Aunque hoy gran parte de la comunidad reconoce la importancia que tiene los humedales -cuyo día internacional se celebra este 2 de febrero- para el desarrollo de la vida, aún falta que este reconocimiento esté expresamente incorporado en nuestra normativa y puedan ser protegidos como corresponde.
Por la experiencia y la realidad del territorio que tenemos en la región de Los Ríos, entendemos que la protección debe ser a todos los humedales, porque todos cumplen un rol en el ámbito hídrico o en relación a la flora y la fauna de un ecosistema determinado. No podemos establecer protecciones solo para algunos y para otros dejar la puerta abierta para su alteración física.
Lamentablemente, a pesar de sus múltiples beneficios, los humedales están en riesgo y en el caso del sector urbano, hay diversos factores como la presión inmobiliaria, la falta de regulación y de criterio que los están amenazando, y donde a pesar de las denuncias, se hace compleja su protección.
De allí que en el marco de la discusión del proyecto que crea el Servicio de la Biodiversidad, hemos incorporado una indicación para la protección de estos cuerpos de agua, sin diferenciar entre urbanos y rurales o entre los que son sitio Ramsar y no, ya se encuentren en terrenos públicos o particulares. Tal propuesta fue acogida y aprobada recientemente en la Comisión de Medio Ambiente del Senado, y esperamos que durante la tramitación del proyecto siga contando con el respaldo transversal, dado que se trata de un tema relevante, en especial en un contexto de crisis hídrica que nos obliga a actuar con mayor rapidez para mitigar los efectos del cambio climático.
Sin duda, este es un paso importante que permitirá una mayor protección, dado que si bien existen hoy instrumentos que contribuyen a este objetivo, son pocas las comunas que han logrado la recuperación y conservación de sus humedales. En el caso de Valdivia, cada cierto tiempo se escuchan las denuncias de rellenos para dar paso a proyectos inmobiliarios, como sucede por ejemplo con los humedales de la salida sur, del río Angachilla y al final de Los Pelúes, entre otros.
Por ello, tal como lo comprometimos en el coloquio sobre humedales, hemos presentado las indicaciones para protegerlos sin distinción, porque por la experiencia y la realidad del territorio que tenemos en la región de Los Ríos, entendemos que la protección debe ser a todos los humedales, porque todos cumplen un rol en el ámbito hídrico o en relación a la flora y la fauna de un ecosistema determinado. No podemos establecer protecciones solo para algunos y para otros dejar la puerta abierta para su alteración física.
Entendemos que lo importante es contar con una buena norma que efectivamente y en coordinación con otras entidades, como el Servicio Forestal -que confiamos empezaremos a discutir prontamente tal como hemos pedido en reiteradas ocasiones- sirva para proteger nuestra biodiversidad, que es uno de nuestros mayores patrimonios.
Fuente: Diario Austral de Valdivia.
Comentarios