Esta semana Chile se solidifica frente a un televisor en horario prime, tradición que señala el término de la época estival y, aquel que no sabe quiénes son las reinas de Viña, está fuera de cualquier conversación de tipo veraniega.
Sin ánimo de competirle a Larry Moe, no entraremos en esos sabroso entretelones festivaleros, pero si buscaremos una suerte de explicación a las cataratas de risas y burlas al sistema político que ha generado el humor en Viña. Hemos asistido varias noches festivaleras, pero en especial aquella protagonizada por Edo Caroe.
Como me decía mi profe de expresión oral y escrita “ aers… definición y contexto”, lo que tenemos en juego es el humor y el humorismo. El primero es aquel estado emocional subjetivo reservado a cada uno de los sujetos y su disposición de ánimo (contexto) y, en otro sentido, el Humorismo lo entendemos dentro de los estilos literarios donde vamos a mixturar la gracia (la chispeza) con la ironía y la alegría con la tristeza.
De acuerdo a lo anterior, y tal como una fórmula donde primero resolvemos las multiplicaciones y abrimos los paréntesis nos preguntamos, ¿cuál era el humor de la Quinta Vergara? o ¿Son esas 15 mil personas el reflejo empírico del humor del país representado en ellos? bueno la verdad que ni lo uno ni lo otro. Esas 15 mil personas solo son representantes de sí mismas, pero con una lógica extremadamente democrática con un sistema de elección, quizás el más democrático, pero el más falto de virtud de todos: el AZAR.
No podemos disentir de los sentimientos de las personas mirando para otro lado o leyendo los time line de cada uno de nosotros, rodeado de conexiones favorables a nuestro propio humor. Edo dijo unas cuantas verdades de las que todos sabemos, pero poco nos reímos, es por ello que su rutina y la de cualquier humorista, se puede criticar desde la vereda ideológica o racional, ya que el humor, lo que trata de desnudar y avergonzar, es precisamente estos conceptos anteriores. Los reflejos que busca el humor no son más que una risa a carcajadas y detonar tu estado animoso, pero el humorismo busca la reflexión sobre, cuando nos dicen que los políticos son ladrones y el objeto del delito eres tú; es esto lo que te da risa. Porque si hiciéramos un chiste con los miles de miles de jóvenes que estudian gratis ocuparíamos la misma fórmula, pero el resultado sería distinto, porque nadie se reiría. Es por ello que los matemáticos ni los físicos se dedican al humor.
Hoy en día la sociedad otorga un sinfín de espacios comunes para reír, pero también para reflexionar sobre cambios importantes y necesarios para esta sociedad. No sacamos nada con la crítica fácil y ya somos muchos los que tratamos de volar en conjunto para encontrar aquel horizonte que conforme una sociedad de derechos y no de privilegios.
Claramente la clase política y empresarial de este país tiene que abrir muy bien sus oídos y escuchar a cada uno de los artistas que pasaron por Viña en estos días, porque ninguno cesó con el chiste político. Lo que sí no está bien, es que siendo tú el objeto de la risa (porque en la talla de que “los políticos no trabajan y se llevan tu plata” los políticos no los principales actores de la acción), nos reímos de nosotros mismos que, como pelotudos, les pagamos los sueldos a los políticos. Por esto podemos reír, pero luego debemos indignarnos y, en consecuencia, buscar la transformación de la realidad de la cual nos estamos riendo, es decir, de nosotros mismos y de nuestra complicidad en la construcción de sociedad desigual, corrupta y privilegiada para pocos.
Sí solo vamos a reír, luego solo vamos a llorar, porque los extremos operan de esa manera. Ya lo señala el magnetismo y las leyes de Newton, es por ello que la invitación y la reflexión es a que no se rían de ti en tu cara y tu lo dejes pasar. Hoy en día la sociedad otorga un sinfín de espacios comunes para reír, pero también para reflexionar sobre cambios importantes y necesarios para esta sociedad. No sacamos nada con la crítica fácil y si la gaviota no vota es porque carece de racionalidad y si tú careces de la misma, busca tu bandada y vuela con él, mientras muchos tratamos de volar en conjunto para encontrar aquel horizonte que conforme una sociedad de derechos y no de privilegios.
Para finalizar un poco de Marx, el humorista: “la política es el arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso y aplicar después los remedios equivocados”. Esto puede ser, pero será solo cuando seamos todos en conjunto los que busquemos los remedios de nuestros problemas y decidamos sobre ellos de forma democrática y deliberativa.
Los contenidos publicados en elquintopoder.cl son de exclusiva responsabilidad de sus respectivos autores.
Te invitamos a conocer nuestras Reglas de Comunidad
Rodrigo Mellado
Es tremendo el desafío global de pasar del descontento a la acción transformadora. Esto no es solo en chile sino todo el mundo. Con estas rutinas, lo bueno es que ya no hay excusa para desentenderse de la corrupción, ni del vacío de poder, ni de la nula fiscalizacion ciudadana. Ya nadie puede decir que no lo sabia, o que la clase política lo hacía de forma oculta. Ahora TODOS, lo sabemos y el peor chiste sería no hacer nada.