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La decadencia del PPD, un caso emblemático y vergonzoso

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En el sistema político actual, los chilenos solo podemos participar en período de elecciones para elegir nuestros representantes. Con una ley binominal perversa, son las dirigencias de los partidos las que controlan quienes serán los candidatos que llegarán a las cámaras.

A las dirigencias no les importa lo que piense la ciudadanía o sus propios militantes, hay que decirlo con todas sus palabras: siguen repitiéndose entre un grupo de amigos que quieren defender el poder que mantienen desde la recuperación de la “democracia”.

Lo que sucede hoy en el PPD, particularmente en el distrito 24 (Peñalolén y La Reina), es un reflejo claro de hasta donde puede llegar la camaradería más detestable en las cúpulas partidarias.

El PPD en sus estatutos internos llama el 2012 a todos quienes quieren ser candidatos al parlamento a participar en una primaria interna, pero con una condición (o filtro): los interesados deben pagar una cuota alta en dinero y juntar más de 3.000 firmas de apoyo. Es lo que establecen por justo y democrático.

Pero cuando el candidato no es amigo o cercano al círculo de quienes se reparten el poder en el PPD (girardismo), las reglas del juego parece que siempre se pueden romper.

Teresa Valdés, pre-candidata a diputada proveniente de la sociedad civil pagó su cuota y desde enero está trabajando en terreno para llevar una nueva candidatura, juntó las 3.000 firmas y reunió apoyos, incluso entre algunos dirigentes del PPD.

Pero Teresa Valdés, si bien participó en la creación del PPD, no es parte del círculo cerrado quienes lo dirigen hoy.

A las dirigencias no les importa lo que piense la ciudadanía o sus propios militantes, hay que decirlo con todas sus palabras: siguen repitiéndose entre un grupo de amigos que quieren defender el poder que mantienen desde la recuperación de la “democracia”.

Por esta razón, los dirigentes decidieron bajarla, imponiendo un candidato del grupo, que no inscribió su candidatura cuando había que hacerlo, no pagó ninguna cuota y no juntó ninguna firma.

Este señor es un rostro de la vieja política, que ya fue diputado 16 años, intendente y otros cargos amigos de la Concertación.

Luego del espectáculo patético que dio la Concertación con la no realización de primarias, la presión ciudadana no permitió que bajaran por secretaría a Teresa Valdés, y se realizará una primaria interna el día domingo 16 de junio.

Pero para los dirigentes esto es un trámite, porque los abusos continúan. Toda la máquina partidista y recursos del PPD están apoyando al señor Barrueto, en perjuicio de la candidata proveniente de la sociedad civil.

Este tipo de prácticas se repiten en todo el país. Chile necesita tomar conciencia y apoyar el cambio de los políticos que nos representan en el parlamento. La ciudadanía debe señalar aquellos que quieren repetirse el plato una y otra vez. Se debe votar en las primarias internas que se realicen (dónde todo independiente puede votar) para impedir que se siga reproduciendo lo peor de la política de Chile. Es el momento de sacar la voz, actuar y denunciar.

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4 Comentarios

Angelica Vergara B.

Absolutamente de acuerdo!

Mario Merambio

PPD un partido formado artificialmente por R. Lagos «instrumental» le llamó. Con ese nombre no es raro que el PPD sea instrumental a los apernados en el senado y camara de diputados.

Gonzalo Pinto

Teresa Valdés no la lograron bajar, de echo ganaremos la primaria !!!

sergio donoso

Hay muchas personas que parece que fuera pecaminoso que en 1988 el PPD fuera instrumental. Pero, no entienden que un instrumento para derrocar a Pinochet, y como tal, funcionó correctamente. Logrado ese objetivo, el PPD determino seguir como partido para constuir un sistema democratico en Chile desde una perspectiva progresista. Luego de 25 años, se observa que el partido tiene que redefinirse: ¿solo el interesa tener influencia en el poder, o le interesa ser un actor político con ideas, con prestigio y con respaldo de la ciudadanía?