El pasado 28 de agosto se presentó el primer libro de la primera editorial de Diversidad Sexual en Chile. La compilación y factura estuvo a cargo del periodista, activista y performero, Víctor Hugo Robles. La obra lleva el nombre de «El Diario del Che Gay en Chile», un guiño al diario del mismísimo Che Guevara. El libro se encarga de reunir y publicar distintas visiones y miradas en torno al activismo y la contingencia chilena frente a la emergente producción, presentación y representación de un activista que a través de un diálogo díscolo, alocado y contundente a dado respuesta a distintas demandas de la sociedad civil, como la lucha obrera, travesti, homosexual y sobre todo, por exponer y develar los discursos y problemáticas de los marginados de un país donde la desigualdad social y económica se encuentra a la orden del día.
«El Diario del Che gay en Chile» nos abre un abanico de críticas y análisis sobre el malogrado tiempo de retrocesos y avances que se han venido suscitando en los últimos 25 años de vuelta a la democracia, dentro de aquellas coyunturas podemos encontrar el caso de Daniel Zamudio, hecho que le brindó una ley de antidiscriminación a la jurisprudencia chilena, junto a la visibilización mediática a algunos sectores y movimientos LGTBI. Del mismo modo, podemos encontrar críticas políticas sobre la normalización y domesticación LGTBI en contextos de cruento neoliberalismo el cual busca con ansias la domesticación de la diferencia sexual bajo la sospechosa analogía de la «igualdad». En “El Diario del Che Gay en Chile”, Víctor Hugo Robles, autor y protagonista, no es igualada, ni satisfecha, sino luchadora de la diferencia.Todo esto y más se puede encontrar en una producción «tensa e intensa», como diría nuestro Che homosexual, personaje y figura político-cultural que ha sabido anteponer una crítica activista cuir y feminista, pero siempre desde una óptica sudamericana, pobre, marginal, seropositiva, mestiza y conosureña, pues lo más fuerte de rescatar que de este texto que es un trabajo analítico, archivístico y sobre todo una producción que reflexiona desde el sur con el sur.
Todo esto y más se puede encontrar en una producción «tensa e intensa», como diría nuestro Che homosexual, personaje y figura político-cultural que ha sabido anteponer una crítica activista cuir y feminista, pero siempre desde una óptica sudamericana, pobre, marginal, seropositiva, mestiza y conosureña, pues lo más fuerte de rescatar que de este texto que es un trabajo analítico, archivístico y sobre todo una producción que reflexiona desde el sur con el sur.
Es dentro de la celebración de los 18 años de la emergencia de “El Che de los Gays», acontecida un 4 de septiembre de 1997, cuando se presenta e inaugura la primera editorial de diversidad sexual en Chile, «SiempreViva Ediciones», casa editorial que se funda al alero de Víctor Hugo Robles y Pamela Sánchez, los cuales han visto un precariedad y falta editorial en Chile por difundir y reunir las investigaciones, creaciones y poéticas de la diversidad y disidencia sexual en Chile, democratizando así las letras y la cultura en una línea más diversa, más subversiva y más crítica.
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