Descentralización
A riesgo de ser catalogado de impopular, quiero insistir sobre la hipótesis de que tanto Fondenor como Plan Aysén, Plan Chiloé y cualquier otro fondo compensatorio, de no ir acompañado de una profunda modificación a la forma de distribuir el poder del Estado, no soluciona el problema de centralismo de Chile. ¿Cuál es la discusión que hoy detiene la implementación del Fondo de Desarrollo del Norte (Fondenor)? Plata. La distancia entre los planteamientos de alcaldes del norte y la propuesta del Gobierno, tal como está, hoy se reduce a dinero.
Si el Gobierno llega a acceder a las demandas de los alcaldes, lo más probable es que todo el diseño institucional centralizado siga igual, con la única salvedad de que después de ello un grupo de municipios del norte, contará con mucho más dinero que el promedio nacional para inversión comunal. No está en cuestionamiento de mi parte la legitimidad de las demandas territoriales. Al contrario, lo que quiero reivindicar es la gran oportunidad que tenemos hoy para modificar el centralismo, la regionalización y la relación entre los niveles de gobierno central, regional, provincial y municipal.
Uno de los principales problemas es que todas estas medidas instrumentales (planes, fondos), no se visualizan enmarcadas en un conjunto mayor de reformas integrales de descentralización. Propuestas que consideren, por ejemplo, la democratización total de gobiernos regionales, más atribuciones fiscales para los municipios y medidas de fortalecimiento de la sociedad civil que incorporen el referéndum revocatorio a mitad de mandato, como forma de controlar el buen uso de los recursos públicos, ya sea a solicitud de ciudadanos o del concejo municipal.
Asimismo, qué bien haría que una reforma a la descentralización considerara incentivar la incorporación permanente de profesionales calificados en aquellos municipios más vulnerables que no cuentan con capital humano suficiente para formular sus proyectos de inversión. Esto, a propósito de la disparidad que se observa en algunos municipios del país, que tienen Secretarías Comunales de Planificación (Secpla) con 10 profesionales, en comparación a otros municipios que cuentan con sólo uno. Precisamente en este último grupo de municipios se encuentran algunos de los que se verían favorecidos con los nuevos recursos que considera el Fondenor.
Creo que el actual Fondenor, que propone el Gobierno, es un avance, pero en su justa dimensión. Es decir que compensa, pero a su vez protege al centralismo y no se hace cargo de la problemática de fondo que padecemos desde hace más de 150 años. Con este tipo de soluciones de apagar los incendios territoriales con medidas parche, podemos encontrar después una reivindicación por el fondo del vino, el fondo de la pesca, el fondo antártico, el Plan Ñuble, Curicó, Osorno, etc.
Tengo la sensación que es hora de pensar una gran reforma sobre regionalización y descentralización democrática, que debiera ser capaz de contextualizar y darle un sentido profundo a la elección de Cores, intendente, las demandas por nuevas regiones, más atribuciones municipales, referéndum municipal, mayores atribuciones políticas y modernización del rol de los concejales. Todo ello, para evitar seguir parchando al país en materia de descentralización, cuestión que finalmente se termina convirtiendo en una protección al propio centralismo.
* ¡Adhiere aquí a la acción de Alvaro Muñoz para exigir descentralización real!
—–
Foto: acuerdos.cl
Comentarios