Le solicitamos contribuir a la convivencia que debe haber en Venezuela ante instancias como la OEA y UNASUR para que, bajo la guía de los valores democráticos, propicien un clima de diálogo y entendimiento honesto entre las partes, una investigación a fondo de los hechos. Apelamos a esto, pues usted sabe que un país polarizado necesita reconocerse, respetarse, conversar y consensuar.
Excelentísima Presidenta de la República de Chile, señora Michelle Bachelet,
Nos dirigimos a usted, en nombre de muchas mujeres venezolanas que en su rol de madres, esposas y trabajadoras están firmemente comprometidas en cuidar y velar por el bienestar de sus hijos y familia. En nombre de estas mujeres y el nuestro propio, le pedimos sus buenos oficios ante la grave crisis que atraviesa nuestro país.
Apelamos a usted, no sólo a su rol de Primer Mandataria sino también por su trayectoria personal y política. A usted que ha sufrido el abuso de poder manifestado en detenciones ilegales y en el maltrato por parte de agentes del Estado. A usted, que ha enorgullecido a Chile superando momentos amargos y sirviendo a su pueblo con compromiso y esmero, dejándolo también altamente representado en organismos internacionales, le pedimos no sea indiferente ante las penurias que hoy vive Venezuela.
Nuestros hijos han abandonado sus aulas de clases para salir a la calle a levantar su voz, pidiendo al gobierno que escuche reclamos transversales que afectan a todos los venezolanos (tanto a la mitad que votó a favor de Maduro como a la otra mitad que votó por otra alternativa política). Hoy le piden al gobierno que rectifique las políticas que nos han sumido en una ola de violencia sin precedentes, en una alta inflación y en una escasez de alimentos y medicinas que todos padecemos, pues actualmente nuestro país vive una profunda crisis social que ha empañado de luto y desesperanza a nuestras familias.
Nuestros jóvenes han ejercido el derecho que nos da nuestra Carta Magna de protestar pacíficamente y en respuesta a sus reclamos han sido asesinados, encarcelados y reprimidos con tratos que violan los derechos humanos. Estos hechos han puesto en evidencia que el gobierno no reconoce la crítica y por ende no la escuchará, pues si bien su práctica ha sido imponer su razón manipulando leyes que han secuestrado paulatinamente los poderes del Estado dejando al pueblo en un desamparo jurídico, ahora ha decidido imponer la fuerza para combatir y anular las diferencias.
El gobierno de Nicolás Maduro ha ignorado su obligación de gobernar para todos los venezolanos, y tomó la errada decisión de ya no sólo agredir a sus contrarios con los conocidos descalificativos de “apátridas, fascistas de ultraderecha…”, sino amendrentarlos haciendo uso de la violencia a mano de grupos paramilitares armados por el gobierno de Chávez para defender su llamada “Revolución Bolivariana” (la invitamos a ver el documental español «Los guardianes de Chávez»).
Usted sabe que Venezuela por tradición ha defendido los valores democráticos, es por eso que queremos enfatizar que rechazamos cualquier intento de golpe de Estado que aproveche este momento oscuro en nuestra historia para tomar el poder y hacerle más daño a nuestro pueblo. Pero también rechazamos que se ignore o justifique la violencia contra nuestra gente por la matriz de opinión que ha generado el gobierno aludiendo que se está gestando un golpe. Pues le recordamos que los civiles no tenemos armas y no damos golpes de Estado, sólo salimos con banderas y cacerolas a elevar nuestros reclamos!
Por favor, entienda usted nuestro llamado, pues como madres sólo queremos que nuestros hijos mueran de viejos y no en las calles a mano de la delincuencia o a manos de la represión del gobierno. Tampoco queremos más familias divididas por el exilio, sólo queremos nuestro legítimo derecho a vivir en un país que dé oportunidades de progreso a todos sus ciudadanos. Un país dónde nuestros hijos sientan que pueden soñar y construir sueños. Un país en donde nos reconozcamos como venezolanos, respetando y conviviendo con nuestras diferencias.
En base a lo anterior y en virtud de su elevada ascendencia en el pueblo chileno y en las naciones latinoamericanas, le solicitamos contribuir a la convivencia que debe haber en Venezuela ante instancias como la OEA y UNASUR para que, bajo la guía de los valores democráticos, propicien un clima de diálogo y entendimiento honesto entre las partes, una investigación a fondo de los hechos. Apelamos a esto, pues usted sabe que un país polarizado necesita reconocerse, respetarse, conversar y consensuar.
Recuerde que usted también es nuestra Presidenta, pues nosotras nos hemos radicado en su país buscando cobijo y oportunidades, pero no estamos ausentes ni somos ajenas del dolor que viven nuestras familias y amigos en Venezuela. Estamos seguras que entiende nuestro sentimiento, pues sabemos que usted en el exilio tampoco fue ajena al sentir de su país. Es por ello que esperamos que no le dé la espalda al pueblo de Venezuela y que actúe en nombre de las ideas y principios que la han llevado a la posición en la que hoy se encuentra.
Sin más que decir y esperando lo mejor de usted, se despiden respetuosamente.
Madres Venezolanas Residentes en Chile (por orden alfabético):
Sofía Cabello, Hilmar Castillo, Ysbel Castillo, Zully Chacín, Norkys Contreras, Rosa Gravina, Doris Hermosilla, Urquía Hernández, Ana Mayela Herrera, Eliana Lezama, Gina Mariani , Isabel Massin, Mirna Marcia Morales , María Isabel Morel , Ana Consuelo Pipaón, Mitzzi de Poleo, Aumist Ramírez ,Patricia Carolina Rojas , Rosario Rojas, Rossana Scrocch, Martha Zavala.
Mas firmas en consignación.
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http://www.youtube.com/watch?v=NrCsEyg2ojU
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