#Justicia

Clases de ética como castigo

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Ya se dió inicio a un curso de ética empresarial cuyas clases contarán con la asistencia exclusiva de Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín –excontroladores del grupo PENTA y financistas de la UDI-. Ellas tienen lugar todos los viernes por las mañanas hasta diciembre del presente año. Será por un total 100 horas distribuidas en 33 clases, impartidas por 15 profesores de  la Escuela de Posgrado de la Universidad Adolfo Ibañez (UAI), todos con doctorado. La UAI fue seleccionada luego de analizados los programas de cursos de ética de otras universidades, entre las cuales se encontraron las de la Universidad de Talca y la Universidad de Chile.

El curso contempla dos módulos, uno de ética general aplicada y el de responsabilidad social empresarial y ética de los negocios y se enmarca dentro de una condena a Délano y Lavín por delitos tributarios a cuatro años de libertad vigilada, a una multa de más de 800 millones de pesos a cada uno, y donde se establece la obligatoriedad de realizar un curso de ética empresarial. Su costo es de 30 millones de pesos, unos 50 mil dólares.

El objetivo perseguido es lograr que los dueños del grupo PENTA se comporten éticamente, logren discernir entre lo que es un comportamiento ético respecto del no ético. Para estos efectos la metodología de estudio se centra en el desarrollo del pensamiento crítico a partir de la revisión, lectura, análisis de casos, discusión y participación activa en clases.

A un anónimo comerciante de provincia, por presentar dos facturas falsas con un perjuicio de $2 millones lo condenaron a 4 años de cárcel, mientras que a quienes fueron los dueños de PENTA por evadir el pago de impuestos por 1,700 millones de pesos se les castiga con una multa irrisoria en relación al patrimonio que poseen, junto a la obligación de seguir un curso de ética empresarial. Ni un día de cárcel, lo que asombra e indigna.

Como sostuviera un profesor de filosofía y doctor en ética y democracia ¿cómo explicarles a los estudiantes que asistir a un curso de ética puede ser parte de una condena que incluye además cuatro años de presidio, con el beneficio de libertad vigilada intensiva y una multa de $857 millones de pesos?

¿cómo explicarles a los estudiantes que asistir a un curso de ética puede ser parte de una condena que incluye además cuatro años de presidio, con el beneficio de libertad vigilada intensiva y una multa de $857 millones de pesos?

Lo señalado da cuenta de la distinta vara con que se aplica la justicia según el tamaño de la cuenta corriente bancaria y de la adscripción ideológica de quien se trate. En este caso se trata de personajes de alto tonelaje económico e ideológicamente afines a la derecha, y por lo mismo, financistas de la UDI.  Si bien no hay nuevo bajo el sol, y los poderosos siguen reinando, no por ello debemos dejar de poner el grito en el cielo y seguir peleando porque haya más justicia.

Como bien estaba escrito en un lienzo desplegado por estudiantes de la UAI a la salida de los Carlos de sus primeras clases: “cárcel para los pobres, clases de ética para los ricos, porque en Chile se encarcela la pobreza”. Por otra parte, como sostuviera el mismo profesor al que hice referencia más arriba “resulta inaceptable que las clases de ética sean entendidas como un castigo a un mal cometido y que los profesores de filosofía moral estemos a cargo de resarcir esas penas”.

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3 Comentarios

vasilia

vasilia

Para mi el problema es mas simple: ¿como es posible que un curso de Etica (ETICA POR AMOR DE DIOS!!!) cueste 30 millones de pesos?

Bien dice ud que lo dictan «15 profesores de la Escuela de Posgrado de la Universidad Adolfo Ibañez (UAI), todos con doctorado». Pero ¿30 millones de pesos? Para pagar eso, a mi tendria que dictarme clases el mismisimo Aristoteles.

Toda la situacion es amoral. Es amoral cobrar esa barbaridad por un curso en que todos saben (todos) que estos tipejos lo mas que aprenderan es a como robar sin que los pillen. Es amoral que un corrupto pague 30 millones al contado (como hizo Delano el viernes pasado) para que le «enseñen» etica, sin que siquiera haya hecho un gesto de arrepentimiento o de incomodidad. No les importa, a ninguno de los condenados les importa.

Aqui la unica que gana es la Universidad que se embolsara 60 millones de pesos por nada

Juan M

Esta claro, la justicia en Chile funciona por dinero y poder, estos muchachos de Penta deberían ser colgados en la Plaza de Armas y escupidos por el pueblo, tal como lo hicieron con Mussolini; si ambos tuvieran algo de honor deberian hacerse el sepukku (el harakiri para que me entiendan los ignorantes), o tomar una Glot austriaca y pegarse un tiro, pero no lo harán. Si Dios existe, muchos lo dudan, espero que ambos ejecutivos terminen en los mas profundos infiernos de Dante.

Javi-Al

Para cualquier persona a pie la comparación respecto a las penas no tiene más explicación que lo que todos odiamos, que no hay igualdad ante la ley, uno de los derechos por el que sí deberíamos jugarnos como sociedad, porque mucho de los otros supuestos derechos que se cacarean por todos lados, son en realidad combustible para mantener el conflicto social, los desencuentros, la tensión. Dicho eso, sobre las clases de ética, sería muy bueno incluir en ella muchísima gente, por lo tanto se deberían bajar los valores y a lo mejor no requeriríamos doctores, bastarían profesores con las competencias necesarias, entre otros, sería bueno matricular todo el espectro político, falsos exonerados, y un cuanto hay de cuenteros y parásitos que viven a costillas de todos nosotros.