Ayer finalizó el IX Congreso de la CUT, donde estuvimos una vez más como organización. Fuimos 21 dirigentes y dirigentas nacionales y representantes de las coordinaciones de los servicios de salud que participamos durante los dos días del congreso.
La dirigencia de la CUT ha estado tensionada por la crítica interna y externa que se la hace a la conducción de esta multisindical, tanto por lo hechos acaecidos en la última negociación del sector público, como por la extensión de la negociación del salario mínimo en la actualidad. Y que cualquier crítica en los medios es vista como una falta de lealtad a la conducción de la Central, cuestión que en ningún caso es la intención de nuestra organización.
La baja asistencia al Congreso y a la actividad del domingo en el Acto de cierre del evento en el Teatro Caupolican, nos dicen algo. No nos podemos seguir haciéndonos los sordos; hay situaciones que no pueden seguir ocurriendo. Hoy en muchas organizaciones a pesar de todos los esfuerzos se escucha la palabra desafiliación, eso no lo queremos y necesitamos mejorar el estado actual del movimiento sindical y de la CUT en particular.
En el Congreso CUT coincidimos con las propuestas y sus resoluciones políticas, estamos claros como organización de que este gobierno de derecha no será el que entregue las soluciones a los problemas de los trabajadores/as, y que cualquier cambio en nuestra situación pasa por las acciones que ejecute el movimiento sindical.
Nuestra crítica se levanta a lo que vivimos hoy, y que asumimos nuestra responsabilidad. Queremos mejorar los espacios de debate en la CUT, no puede ser que se pierda una tarde de debate: cuando los grupos de trabajo piden más debate, estamos fallando. Queremos que los dirigentes que debatan sean verdaderamente dirigentes representantes de socios y socias y de NO de los denominados sindicatos de papel.
Necesitamos mayor control social y sindical, no sólo buenos informes políticos o análisis de la realidad. Debemos ser capaces de diseñar acciones, poner fecha y contar con buenos sistemas de control de la gestión sindical o si no nuevamente nos quedaremos en el discurso y las buenas intenciones.
Nos faltó definir un cronograma de movilizaciones. En el mundo sindical sabemos que lo cambios no se solucionan sólo con el lobby o con las reuniones en los ministerios. Se requiere mostrar fuerza. Eso nos falta y en eso debemos avanzar. Tenemos que demostrar que tenemos disposición de lucha y de movilización.
La CUT es la llamada a realizar los cambios en el país, lo repitieron cientos de dirigentes en el debate: “la CUT somos todos/as”. Llegó la hora de demostrarlo, avanzando en los cambios que se deben hacer en la organización y de aglutinar las fuerzas necesarias para realizar dichos cambios. Porque en la CUT somos todos/as y no sólo algunos, llegó la hora.
———-
Foto: Astraboy / Licencia CC
Los contenidos publicados en elquintopoder.cl son de exclusiva responsabilidad de sus respectivos autores.
Te invitamos a conocer nuestras Reglas de Comunidad