#Sociedad

Uso correcto del lenguaje en #Discapacidad

Compartir

A medida que ha ido poniéndose “de moda” el término” INCLUSIÓN, también han ido apareciendo distintos términos para referirse a las personas con discapacidad cuando queremos referirnos a ellas.

No vidente, minusválido, mongólico, personas con capacidades diferentes y/o con capacidades especiales, entre otros términos, son los que la mayoría de nosotros usamos para referirse a este grupo de personas que actualmente equivalen en Chile al 12,9% de la población.

Durante todos los años que he trabajado en Discapacidad, he sido reiterativa y muchas veces majadera, especialmente con algunos medios de comunicación en utilizar el término correcto pues quien más que nosotros los periodistas, somos quienes debemos reparar cuidadosamente en educar y enseñar de manera correcta a la población una vez que estamos informando algún asunto relativo a Discapacidad.

Y el problema que he detectado es que lamentablemente no hablamos de Discapacidad porque no sabemos de ella, no sabemos cómo referirnos a las Personas con Discapacidad (PcD), cómo tratarlos, de qué manera ayudarlos en la cotidianeidad ni menos, cómo colaborar en el proceso de insertarlos al mundo de manera natural y sin que genere miedos o temores innecesarios.

En esta necesidad de aportar contenidos al diario vivir de nuestra sociedad y en relación al uso correcto del lenguaje para PcD, es que quisiera comenzar por lo básico y poner a su disposición el Folleto “Dilo Así” que elaboró a comienzos de este año la Corporación Ciudad Accesible con el aporte de Servicio Nacional de la Discapacidad (Senadis).

Hablar de PERSONA CON DISCAPACIDAD y NO de DISCAPACITADO, nos sitúa tanto a nosotros como a ellos en el lugar correcto pues debemos saber que desde que Chile ratificó la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y su Protocolo Facultativo, en el año 2008, hemos asumido un modelo centrado en las personas, el respeto de sus derechos y el fomento de su independencia y autonomía, el cual nos desafía a abandonar el asistencialismo y generar las condiciones que permitan a las PcD su plena inclusión social y una efectiva igualdad de oportunidades.

Hablar de PERSONA CON DISCAPACIDAD y NO de DISCAPACITADO, nos sitúa tanto a nosotros como a ellos en el lugar correcto pues debemos saber que desde que Chile ratificó la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y su Protocolo Facultativo, en el año 2008

El nuevo paradigma sobre discapacidad ya no centra su análisis en la condición de salud de la persona, como único elemento constitutivo de ésta, sino que nos llama a entender la discapacidad como el resultado de la interacción de esa deficiencia con elementos contextuales, como barreras del entorno y restricciones a la participación en la sociedad. Lo anterior implica que en este nuevo modelo es la sociedad la que debe hacer las adecuaciones para incluir a las PcD, eliminando esas barreras y evitando esas restricciones que les impidan estar en igualdad de condiciones con las demás.

En este contexto, la principal consecuencia normativa en nuestro país es la Ley Nº 20.422 que Establece Normas Sobre Igualdad de Oportunidades e Inclusión Social de Personas con Discapacidad, de 2010.

Así las cosas y para comenzar a informarnos y educarnos más es que les dejo el link del material gráfico para que entre todos vayamos sumando esfuerzos y cuando hablemos de Inclusión, hablemos con algo más de propiedad de temas relacionados a las PcD.

Columna publicada originalmente en Diario Sustentable

1
10

Los contenidos publicados en elquintopoder.cl son de exclusiva responsabilidad de sus respectivos autores.
Te invitamos a conocer nuestras Reglas de Comunidad

Comenta este artículo

Datos obligatorios*

1 Comentario

Guillermo Castillo

Muchas gracias por la lúcida columna. Cuesta decir las cosas por su nombre. A veces, por ser respetuosos, somos inadecuados y el eufemismo tristemente da cuenta de mucha falta de información. Saludos.