Con mucha sorpresa he visto como cuatro jóvenes futbolistas de la "U" son devueltos desde el lejano oriente por un "berrinche" de Marcelo Bielsa o tal vez un berrinche político de Mayne Nichols.
Decepcionante signo de los tiempos que estamos viviendo. Nos estamos llenando de "eventos spots" que completan el espacio periodístico pero solo por un corto tiempo, todo muy explosivo, y luego se desvanecen en el olvido y vuelta hasta que aparezca otro mientras la vida corre rápido, muy rápido.
En un abrir y cerrar de ojos se nos paso el mega mensaje del 21 de Mayo, la revuelta popular de la central térmica, el doloroso lloriqueo de Klaus Schmidt-Hebbel y su familia en la TV, el bicentenario y el feriado mas largo de la historia, la escandalosa huelga de hambre mapuche, ya tenemos el iPHONE4 y tambien el glorioso iPAD, nuestra Michelle Bachelet en la ONU, y ahora igual de rápido pasaran los 33 mineros de atrapados a cesantes.
Qué esta quedando de todo esto, qué estamos realmente aprendiendo, qué llena el habitus del chileno, qué están viendo nuestros niños. Con bastante desorden y desinformación el gobierno explota cualquier noticia que levante el people meter, circo para el pueblo, y gana tiempo para algo que aun no sabemos que es. Algo que se enuncia pero que luego de varios meses aun no se aclara, algo que paso como la Powerpoint el 21 de mayo y aun no llega como un Word con plata.
Cuál es la "nueva forma de gobernar", cómo va la reconstrucción, realmente sirven las "cositas" de Lavin, cómo va la integración con Bolivia y Peru, y el 7% de los pensionados, y la extensión del prenatal, y la reforma del sistema de salud publica, y los cambio del sistema electoral con voto en el extranjero, qué haremos con las tasas de endeudamiento individuales, donde están las iniciativas contra inequidad y desigualdad, por qué se mezcla presupuesto de gobierno interior con el de reconstrucción, acaso estamos escondiendo algo, etc etc
El titulo de este articulo "no hay azul en mi bandera" solo refleja una lectura simplista de un país chato que no aprende en su andar. Pese a toda la parafernalia, como sociedad no estamos ganando nada sino solo pasando. No nos engañemos, no hay un azul esperanza que motive nuestro quehacer, solo la inmediatez de una mediática comida chatarra groseramente engullida, inerte y sin sabor.
Vamos Piñera, aún te estoy esperando. Muestreate cabrito !