La forma de pensar y actuar es moldeada por el entorno social, familiar, cultural, el idioma, las tradiciones, creencias, experiencias. Incluso, la contextura física afecta en cómo pensamos y nos relacionamos con los demás. Un efecto negativo, es que las personas tienden a romper las reglas si ve que su entorno las rompe.
Nuestra sociedad era percibida más pacífica hace 10 años. En una escala de 1 a 10, donde 1 es más violento, el 2013 estaba en 6.9 y pasó a 4.7 el 2023.
La pandemia ayudo en agravar los niveles de violencia y agresividad. Un hecho que permite comprender los resultados del estudio de la Fundación Chile21 y MORI de percepción ciudadana sobre violencia no criminal realizado en Santiago y dado a conocer en septiembre del 2023. El estudio concluye que existe correlación entre la mayor percepción de violencia y los mayores niveles de ansiedad y depresión.
Dicho estudio revela que el 59% de los santiaguinos ha experimentado violencia en la vida cotidiana, siendo la calle (44%), el transporte público (37%) y el trabajo (30%) los espacios de mayor frecuencia. Los consultados perciben que las principales víctimas son mujeres (54%); adultos mayores (53%); y menores de edad (46%). Los grupos sociales percibidos como más agresivos son: inmigrantes (44%); barristas del fútbol (42%); comerciantes ambulantes (41%); choferes del transporte público (36%); automovilistas (35%); y políticos (34%).
Las noticias dan múltiples ejemplos: pacientes que agreden a personal de salud, dueños de terrenos agreden a quienes pretenden ingresar a una playa o lago, peleas que involucran a taxistas, ciclistas, choferes y automovilistas, etc.
Quizás, todo esto sea resultado de sumar algunos ingredientes, como; un consumismo exacerbado, el individualismo, progenitores que viven para trabajar, la desigualdad social y legal. Agregando que, Santiago, es una de las ciudades donde la desigualdad y segregación social es estructural, aquí el lugar de nacimiento determina la calidad de vida y éxito personal al que se puede aspirar. En otras palabras, una gran cantidad de niños y jóvenes terminan siendo víctimas y productos de una sociedad que los discrimina y deshumaniza.
-Colegios
Otro impacto de la violencia está en las innumerables agresiones que se dan en los colegios, hay que agregar que es un problema global y no es exclusivo de Chile.
La presidenta de Escuelas Abiertas, María Teresa Romero, dice: «desde hace un tiempo estamos presenciando unos niveles altísimos de violencia en los establecimientos educacionales y lamentablemente no se han tomado las medidas que corresponden, además de notar un silencio absoluto y casi peligroso de las autoridades con respecto a este tema«. Agregando «no sirve tener leyes y reglamentos si los sostenedores no son tajantes con aceptar situaciones de violencia, agresividad y delincuencia dentro de las escuelas«. «Se necesita dar mayor autonomía a los directivos y profesores para tomar decisiones y volver a dar confianza a las familias de que sus niños tendrán garantizado su bienestar en los colegios«.
Tristemente los ejemplos son incontables,
El Colegio de Profesoras y Profesores, que cuenta con más de 100.000 afiliados, realizó un sondeo que arrojó que el 86,8% de los docentes fue víctima de insultos y amenazas hechas, principalmente, por estudiantes y apoderados.
Es importante actuar racional y con tolerancia al dialogar y debatir con quienes piensan diferente y una forma es aprender a ponerse en los zapatos del otro y entender que no existe una verdad absoluta
-Redes sociales y sitios de opinión
Las redes sociales son un actor importante. Por ejemplo, X y sitios donde se hacen comentarios (El Quinto Poder, EMOL y otros) posibilitan expresar, anónima e impunemente, palabras que no se dirían cara a cara y son comunes las groserías, insultos y mensajes de odio. Por lo mismo, es habitual que, al criticar alguna idea o personaje de algún sector político se le etiquete automáticamente de “zurdo” o “facho” y no es raro que en “X” lo bloqueen solo por dar una opinión contraria. Actitud muy cercana a la que tiene un fundamentalista y fanático religioso.
Las redes sociales con sus imágenes y mensajes cortos y sensacionalistas estimulan las emociones y no la racionalidad. Al utilizar la violencia verbal se construye un ambiente cada vez más polarizado, extremista, de ver todo en blanco y negro y carente de civilidad. Aquí, la verdad no interesa, solo importan y se leen las opiniones que concuerdan con las propias. Hechos que ponen en peligro la estabilidad social, la paz y la democracia.
-Recuperar la civilidad para disminuir la violencia
Civilidad significa: “Comportamiento de la persona que cumple con sus deberes de ciudadano, respeta las leyes y contribuye así al funcionamiento correcto de la sociedad y al bienestar de los demás miembros de la comunidad”.
El concepto contrario es la incivilidad, asociado al comportamiento irrespetuoso en el discurso, prácticas o reglas de convivencia pública. La incivilidad política alimenta los comportamientos antisociales e intolerantes, resultando en desorden y violencia social.
Sabiendo esto, debemos trabajar para recuperar el significado de civilidad e incivilidad y reconocer las diferencias. Hay que hacerlo simplemente por ser todos ciudadanos que convivimos en una sociedad, por lo tanto, tenemos que seguir ciertas normas de comportamiento. Entender que es necesario recuperar las pautas de conducta que promueven la buena convivencia y fortalecen el respeto, la confianza y la buena relación con los demás.
Es importante actuar racional y con tolerancia al dialogar y debatir con quienes piensan diferente y una forma es aprender a ponerse en los zapatos del otro y entender que no existe una verdad absoluta.
Todos habitamos un mismo país, una misma ciudad y un mismo barrio y no es sano ni razonable verse y tratarse como enemigos irreconciliables por pensar y tener ideas distintas, por eso es tan importante cambiar nuestro comportamiento para recuperar y cultivar la buena convivencia social.
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anysur
Estimado, se han derogado muchas normas sociales, en educacion tienen que cambiar a los alumnos que son agredidos de establecimiento ( o continuar sus estudios en forma libre, homeschool) y los establecimientos poco pueden hacer debido a que la legislacion protege al agresor , pueden ser sancionados.
Jdjdjdjejjjjj
«La forma de pensar y actuar» está mayormente asociada jfjfjfjfjfjfjfj a la realidad. En Venezuela por ej. hoy se oye una canción que dice «Maduro, coño e’ tu madre, ¡Ahí te vamos a agarrar!», entre otras canciones que canta el pueblo venezolano oprimido por el dictador chiflado, tal como «No quiero bonos, no quiero más, solo quiero que se vaya Nicolás»…