#Sociedad

Apoya a los gay, indígenas y fuma pitos, ¡pero no toques el modelo!

0 |
COMPARTIR
EN WHATSAPP
COMPARTIR
EN WHATSAPP

Revuelto está el ambiente.  Y el revoltijo es tal que interpela los viejos estándares de lo que entendemos (o entendíamos) por izquierdas y derechas.

Hagamos historia.

Ambos conceptos provienen de la Revolución Francesa.  Más específicamente de la sesión de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) -que por esos insondables azares del destino se realizó el 11 de septiembre… de 1789- que discutía incorporar a la naciente Constitución gala un artículo que permitiera al rey Luis XVI vetar las leyes que aprobara la futura Asamblea Legislativa. Quienes defendían este privilegio se situaban al lado derecho del presidente de la ANC, mientras quienes buscaban resguardar el derecho soberano del pueblo a regirse sin tutelaje monárquico se ubicaban a su izquierda.

De tal época a los derechistas se les asocia con quienes defienden a los privilegiados (en todo orden de cosas) y a los izquierdistas con los que abogan por los más desposeídos. Con el correr de los años a los primeros se les ha vinculado con el fomento del individualismo (lo privado) en contraposición con los segundos que se preocuparían por los derechos sociales o colectivos (lo público).

Esto, en un muy raudo resumen. Y así se entendió durante mucho tiempo, hasta que llegamos a la actualidad, globalización mediante.

Hoy ya no está tan claro qué es ser de izquierda o ni qué es ser de derecha.  Y tampoco de centro, esa figura voluble que ha sido calificada como la capacidad para moverse hacia la izquierda y la derecha según sus propios e individuales intereses.

Fue la Concertación la que durante 20 años se planteó como de centro izquierda.  Aunque los grandes empresarios (que de por sí son privilegiados, más aún en un país desigual como Chile) “aman” –según confesara Hernán Somerville- a quien fuera uno de sus máximos exponentes, el ex presidente Ricardo Lagos. Aunque el modelo económico neoliberal se mantuvo (e incluso se profundizó) durante estas dos décadas. Aunque se continuó con la privatización (o se inició su preludio, la concesión) de gran parte de los recursos naturales del territorio y de los servicios públicos en general.
Así las cosas, uno se pregunta: ¿es de centro izquierda la Concertación, hoy gracias al PC, el MAS y la IC bajo el nombre de “Nueva Mayoría”?

Es probable que en alguna medida sí.  Por lo menos así se siente ese mundo (militante o independiente) que se asume parte de ese ideario que triunfó el 5 de octubre de 1988.  Y que durante este cuarto de siglo ha votado sistemáticamente por los candidatos que le han ofrecido bajo el paraguas de la coalición.

Hoy el problema no radica en ese votante o adherente convencido.  Pasa esencialmente por ese liderazgo partidario o ese representante parlamentario que, al final del día, se cuadra con la antítesis de lo que el sentido común nos dice que es ser de centro izquierda.  Más aún en un país como el nuestro, hoy institucionalmente cargado a la derecha (por el binominal, por el derecho a veto que tiene la derecha, por el Tribunal Constitucional, etc.), que para regresarlo a uno de centro o centro izquierda real requiere de un contrapeso movilizador importante.

Ejemplo del enredo es la agenda valórica, donde quienes se perciben como adherentes de la ex Concertación adhieren a determinados principios que hoy por hoy son patrimonio de esa mirada que se autodefine como de izquierda (y en algunos casos, progresista).

Se sienten cómodos con la despenalización de la tenencia y el autocultivo de marihuana, algo de por sí fundamental para avanzar en el respeto de los derechos de las personas.

No les molesta el matrimonio igualitario y los derechos en pos de la diversidad sexual, deudas pendientes que aún tenemos como sociedad.

Y también se abren a terminar con la injusta situación que viven los pueblos originarios, cuyos territorios han sido sistemáticamente esquilmados, primero por los españoles, luego por las colonias extranjeras y últimamente por las corporaciones que abusan del territorio común.  Siempre, por cierto, con la complicidad del Estado chileno y sus agentes de “normalización”, sean éstos los militares, las policías o la propia instrucción educacional.

Hasta ahí vamos bien y compartimos la mirada.

El problema ocurre cuando discutimos sobre el puntal del modelo de desarrollo social y económico chileno, que hace rato pasó de ser de “sociedad con economía de mercado” a uno de “sociedad de mercado”.

Aparece cuando demandamos un Estado que garantice el ejercicio universal de derechos como la educación, la salud, la previsión social o el acceso al agua (y todo lo que definamos como esencial para vivir en dignidad) sin el tutelaje exclusivo de las leyes del mercado.  Porque esto implicará necesariamente redistribuir la riqueza económica que generan nuestros recursos naturales, rebarajando su control muchas veces concentrado y mal habido.

Comienza, no sólo en la discusión y el debate público, sino cuando se requiere decidir sobre leyes que impactan al modelo económico vigente y su tendencia a la concentración, la falta de transparencia, la desigualdad, el deterioro de nuestro patrimonio natural.  Es aquí cuando la coalición se mueve, gracias a intrincados mecanismos de táctica legislativa (ayudada por los quorum, las ausencias, las abstenciones, etc.), en dirección contraria.

Es necesaria una revisión profunda de lo que entendemos por izquierda, centro y derecha.  Porque aunque se diga que son conceptos obsoletos, siguen cobijando una discusión de fondo hoy tan vigente como ayer: ¿debe la sociedad preocuparse por todos sus integrantes o cada uno debe buscar su beneficio a título individual? 

Yo creo, como muchos, en lo primero.  Pero no me restrinjo sólo al así llamado discurso valórico-moral.  Debe extenderse también al de la economía, esa intrínsecamente material.

———-

Imagen: Wikimedia Commons

TAGS:

Los contenidos publicados en elquintopoder.cl son de exclusiva responsabilidad de sus respectivos autores.
Te invitamos a conocer nuestras  Reglas de Comunidad

Comentarios

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Quedan 1500 carácteres.

#NuevaConstitución

VER TODO
Para la ciudadanía la rotonda sin salidas es como vivir el castigo de Sísifo, destinados a llevar una pesada roca política a la cima de la montaña, solo para verla rodar montaña abajo y volver a repeti ...
+VER MÁS
#Política

De vuelta a la rotonda política

Para la ciudadanía la rotonda sin salidas es como vivir el castigo de Sísifo, destinados a llevar una pesada roca política a la cima de la montaña, solo para verla rodar montaña abajo y volver a repetir el ciclo interminable de esfuerzo y fracaso

Que existe agotamiento en múltiples sectores, difícil es de negar. Y eso incide en la viabilidad política actual. Pero eso no significa que el dilema constitucional esté cerrado
+VER MÁS
#Política

El mito del cierre definitivo del proceso constituyente/constitucional

Que existe agotamiento en múltiples sectores, difícil es de negar. Y eso incide en la viabilidad política actual. Pero eso no significa que el dilema constitucional esté cerrado

A pesar de los obstáculos y desgastes, el compromiso adquirido para modificar la Constitución debe ser respetado y llevado a cabo para reconectar con las expectativas y necesidades del pueblo
+VER MÁS
#Política

¿Nos jodimos todos?

A pesar de los obstáculos y desgastes, el compromiso adquirido para modificar la Constitución debe ser respetado y llevado a cabo para reconectar con las expectativas y necesidades del pueblo

El pueblo de Chile, está hastiado de la reyerta de baja monta, no quiere ver más discusiones bizantinas, alejadas de sus problemas cotidianos. Los chilenos y chilenas favorecen los acuerdos, pero esos no ...
+VER MÁS
#Política

Las lecciones del plebiscito

El pueblo de Chile, está hastiado de la reyerta de baja monta, no quiere ver más discusiones bizantinas, alejadas de sus problemas cotidianos. Los chilenos y chilenas favorecen los acuerdos, pero esos no se han visto por ningún lado

Nuevos

La segregación social y la desigualdad económica exagerada destruye democracias y sociedades y aumenta la delincuencia. Una solución que considerar para construir sociedades prosperas y justas, es limita ...
+VER MÁS
#Sociedad

Cuando el Estado está ausente, la delincuencia se hace presente

¿Qué elementos tiene la alcaldesa para desacreditar nuestro sistema electoral y sus personas, que han dado pruebas de que dichas instancias son una fiesta para la democracia, y sostener que el fraude esta ...
+VER MÁS
#Educación

Cuando no crees en tu propio electorado

Una “tesis” fuerte posible de entrada dice: <los mejores continuadores de un Jacques Derrida, talvez no sean los filósof@s sino los físicos quántico-relativistas>. Veamos… Sabine Hossenfelde ...
+VER MÁS
#Ciencia

Una físico teórica y los “relatos” de la física actual

El Estado no tiene hoy ni los recursos ni las facultades para intervenir en la siderúrgica en tris de cierre. Lo de aumentar la salvaguarda, es un placebo, no va a reducir los costos de producción, ni a h ...
+VER MÁS
#Economía

La CAP es la punta del iceberg

Popular

Para nuestro proyecto político, no existe nada más revolucionario que un objeto concreto y patente que el Estado funciona, permitiendo que jóvenes de clases y medias y medias bajas puedan generar movilid ...
+VER MÁS
#Educación

El Frente Amplio debe valorar la selección en liceos emblemáticos

No se justifica el interés público que exige la constitución, para mantener la concesión minera en Chile a empresas extranjeras. Su sola existencia es contraria al interés nacional
+VER MÁS
#Economía

A 52 años de la Nacionalización de la Gran Minería del Cobre en Chile

1 Acabo de participar en la “Fourth Chilean Conference on Philosophy of Physics”/ IV Conferencia Chilena en Filosofía de la Física, del 11 al 13 de marzo de 2024. Lo escribo en inglés como fue publi ...
+VER MÁS
#Cultura

Consideraciones iniciales de una filosofía de la física actual

Si por estas cosas curiosas de la vida, llegara a prosperar esta operación comercial, enfrente de la angosta vía local Camoens de Vitacura, se habrán reemplazado 6 viviendas ya demolidas por 7 oficinas, ...
+VER MÁS
#Ciudad

En Chile ''los de arriba'' mandan a todo evento