Dada la inmigración masiva y su descendencia, el país va a crecer, y lo está haciendo, por lo que se debe adelantar en la planificación de los servicios que el país requiere entregar
Un país puede ser proactivo, activo, reactivo y inactivo o pasivo.
Puede ser proactivo si su Estado, a través de sus sucesivos gobiernos, se adelanta a las necesidades de la población y a superar fallas en el sistema público. Si los distintos gobiernos están alineados con una posición orientada al ciudadano, en su fase de usuario del sistema estatal, es decir el que gobierno central, los gobiernos regionales y los municipales se encuentran alineados en servir, se asegura entonces una buena calidad de servicio a nivel país.
Será activo si, independientemente de su calidad de proactivo, se mantiene permanentemente activo en su servicio al público, siempre con los más altos estándares factibles, atendiendo a las normas de calidad vigentes, a lo menos.
Será reactivo si no actúa antes de que un evento ocurra y, además, en general actúa tardíamente ante la ocurrencia de un evento, o si está en contra de una acción activa o proactiva.
Por último, será pasivo o inactivo si no actúa de ninguna forma, y si lo hace, lo hace sólo por la gran presión, y actúa de manera ineficiente y hasta ineficaz, como ocurre con la justicia cuando es denegada o es inoportuna.
Dada la inmigración masiva y su descendencia, el país va a crecer, y lo está haciendo, por lo que se debe adelantar en la planificación de los servicios que el país requiere entregar.
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