El presidente Piñera dijo en la Asamblea General de la Naciones Unidas, ante el mundo entero, que en Chile había una gran paradoja. Según sus palabras “Representa una paradoja que en nuestro país hayamos luchado tanto por salvar las vidas de los 33 mineros y tengamos, simultáneamente, a 34 comuneros mapuche que atentan contra sus propias vidas a través de una huelga de hambre”.
En este juego de palabras el presidente de confunde, o intenta confundir al mundo, con los verdaderos protagonistas de la “paradoja”. Entendámonos con claridad, sin confusión: la paradoja es que el Gobierno ha luchado con todos los recursos que tiene a su disposición para salvar la vida de los mineros, por un lado, y simultáneamente tenga a 34 comuneros mapuches en peligro de muerte inminente, manejando y jugando con sus resistencias físicas, midiendo y escatimando los esfuerzos para salvar sus vidas, con cálculos y mezquindades. Esa es la verdadera paradoja respecto de lo que el Presidente dijo en la ONU.
La otra paradoja se da en la posición que ha tomado del Gobierno en esta situación comparada con la que posición que el candidato Piñera tenía en materia de discriminación étnica. En efecto, en su programa de gobierno dice que “debe emprenderse también una política clara contra la discriminación y en favor de la igualdad de trato en una sociedad democrática. Al respecto se debe propugnar una mirada más global de este desafío, mediante el reforzamiento y coordinación de todas las políticas públicas que digan relación con la igualdad de oportunidades, en cuanto a prevención de acciones de discriminación…en definitiva, los planteamientos se orientarán hacia la inclusión y la igualdad de oportunidades, evitando factores de discriminación y los ámbitos en que ésta pueda producirse” (Programa de gobierno n° 153) Los comuneros en huelga de hambre piden que no se les trate con discriminación en tres puntos muy concretos de la aplicación de la ley y ante esa demanda básica, el gobierno no ha sido capaz de cumplir con su palabra.
El mundo debe esperar que el Presidente de Chile sea riguroso en la aplicación de la lógica y que no les enrede la perdiz. Chilenos y chilenas, esperamos que corrija el doble estándar con que su gobierno ha tratado a los mineros y a los comuneros. Las paradojas que sorprenden al Presidente Piñera son del gobierno del Presidente Piñera.
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Foto: .patricio / Licencia CC
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