Las últimas semanas hemos sido testigos de un hecho histórico, el “estallido social” (catalogado así por los medios de comunicación y quienes tienen acceso a ella) re-coloca en la agenda pública una serie de problemas a través de todo el país que emergen a partir de un modelo donde el crecimiento no se refleja en la distribución de los ingresos, generando una brecha en la desigualdad que nos coloca a la punta en los rankings de la OCDE y el Banco Mundial.
Demandas referidas a las pensiones, salud, salarios, educación, el alto costo de la vida, accountability, transparencia por parte de las instituciones, entre muchos otros, son reflejo de la profunda desigualdad y fragilidad en cuestiones sociales y políticas, que más que derechos se han transformado en privilegios.
Frente a las demandas y manifestaciones sociales, la clase política ha demostrado asombro por la rebelión social, evidenciando su desconexión con la realidad al no proponer soluciones a la altura de las circunstancias. La denominada “agenda social” propuesta por el presidente Sebastián Piñera es un ejemplo de ello, ya que no logró desmovilizar a la ciudadanía, quienes han catalogado la propuesta como insuficiente o una burla.El excesivo centralismo de nuestro país genera las profundas desigualdades entre territorios, potenciando un modelo económico que ha demostrado afectar negativamente la calidad de vida de sus habitantes
De lo anterior puedo sacar dos conclusiones: 1.- que el trabajo en los territorios de nuestros representantes es deficiente (en términos de conocer la realidad), y 2.- nuevamente las soluciones planteadas tienen un sesgo centralista al no contemplar (o atisbar contemplar) las demandas desde las escalas regionales y locales del país.
La actual crisis ha dejado de manifiesto que las profundas desigualdades también tienen expresión territorial, al ser el mismo Estado, por su estructura centralista, el generador de la mala distribución. El PNUD en su estudio “Desigualdad Regional en Chile” del 2018, relevaba algunas de las demandas de hoy (Salud, educación, ingresos), exponiendo las serias desigualdades que existen tanto entre regiones como con la capital.
En ese aspecto, los alcaldes, agrupados en la Asociación Chilena de Municipalidades (AChM) han presentado constantemente sus quejas respecto a los deberes que les han entregado (la educación y salud primarias entre ellas) y las limitadas competencias que poseen en términos de generar ingresos para tener un presupuesto municipal que logre solventar sus obligaciones y también permitirles gestionar un desarrollo local adecuado a sus problemáticas.
Por otra parte, los ingresos (según indica el estudio del PNUD) está ligado a las estructuras productivas de las regiones, donde la concentración del PIB está en las regiones que dependen de la minería (regiones de Tarapacá, Antofagasta y Atacama) y servicios empresariales y financieros (Región Metropolitana); a diferencia de las regiones con dependencia en la ganadería, agricultura y silvicultura, que son las que poseen mayores índices de pobreza (PNUD, 2018).
La poca diversificación en nuestra matriz productiva nos hace alta y casi exclusivamente dependientes de la explotación de nuestros recursos naturales, por lo cual las regiones “ricas” en materias primas son las que poseen los niveles más altos de ingresos. En ese sentido, las autoridades han hecho alarde del crecimiento económico chileno, pero no han mencionado la letra chica de los impactos medioambientales que supone tener una economía extractivista y no apostar por el fomento de otras actividades como el desarrollo tecnológico y la innovación.
Otro dato es el que nos entregó en su momento la Comisión Presidencial de Descentralización del 2014, conformado en el segundo Gobierno de Michelle Bachelet. En ella se establecieron como prioridades (algunas) cuestiones que tenían que ver con: el traspaso de competencias; ley de rentas municipales y regionales; gestión del capital humano, democracia local y regional; y fortalecimiento de la participación ciudadana. Todos estos puntos tendían a generar mayores niveles de desarrollo económico y político en los niveles subnacionales, con la finalidad de entregar más equidad e igualdad entre territorios. Así mismo, se buscaba que los recursos (tanto los autogenerados por la descentralización fiscal y los entregados desde el centro) se utilizaran de forma más eficiente, incluyendo la participación de la ciudadanía en la identificación y solución de los problemas.
Los estudios reseñados brevemente anteriormente nos evidencian que desde la academia (PNUD) y desde la misma institucionalidad política (Comisión de descentralización) las demandas que generaron la crisis actual venían siendo seguidas y eran de público conocimiento. Sin ir más lejos en la última elección presidencial, el candidato de la Ex nueva mayoría, Alejandro Guillier, tenía como eje de su campaña la descentralización del Estado, la cual exponía en cuanto foro o debate presidencial existía como la fórmula para superar la pobreza y reducir las desigualdades.
Para finalizar, se puede indicar que la descentralización, o por lo menos quienes la estudian y/o promueven, incluyeron dentro de sus análisis que el excesivo centralismo de nuestro país genera las profundas desigualdades entre territorios, potenciando un modelo económico que ha demostrado afectar negativamente la calidad de vida de sus habitantes. Por ello, se hace necesario dejar hacer gestión a las comunidades subnacionales organizadas, ya que son ellos quienes conocen de mejor manera su realidad y la de su entorno. La ciudadanía ha demostrado hambre de participación y de ser ellos quienes designen su futuro, prueba de ello son los “cabildos autoconvocados”, que de manera autónoma discuten sobre sus necesidades y posibles soluciones. Más descentralización y más participación pareciera ser una urgencia en la construcción de un nuevo pacto social.
PNUD (2018). Desigualdad regional en Chile: ingresos, salud y educación en perspectiva territorial. Disponible en https://www.desiguales.org/regiones
Informe Comisión Presidencial en Descentralización y Desarrollo Regional. Disponible en https://prensa.presidencia.cl/lfi-content/otras/informes-comisiones/InformeDescentralizacion.pdf
Comentarios
08 de noviembre
Es digno para toda persona vivir basándonos en igualdades, de sueldos, salud y pensiones…
0