La unión hace la fuerza

No es un misterio que la armonía dentro de la centro derecha es un bien escaso, ya sea por ambiciones personales o por diferencias dentro de visiones semejantes, mantener la cohesión interna es una tarea titánica, una hoy especialmente trascendental si se quiere volver al gobierno. Por eso, más que hablar de Piñera, Ossandón, Espina, Kast o Kast, es hora de centrar nuestra atención en el proyecto político.

---

A diferencia de muchos, yo siento que la única proclamación válida es la que ocurre después de las primarias, antes sólo existe una democrática postura de partido, porque la hora de la verdad se escribe con el sufragio y a mi parecer, lo más importante de la proclamación de un candidato, es conocer la visión de Chile que nos ofrece.

El «Manifiesto de la República» presentado hace unas semanas propiciaba reflexionar sobre las mismas preguntas, sobre la urgente necesidad de tener un ideario colectivo y compartido, donde el actuar individual quede supeditado a la visión país. Es por ello que gestos como del Senador Francisco Chahuan trascienden, porque sintoniza con las tendencias ciudadanas y aportan a la unión interna.

Con esto no estoy invitando al resto de los candidatos a pararse detrás del ex Presidente Piñera; cada precandidato posee compromisos con quienes los apoyan, pero resulta vital que nunca olviden que todos pertenecemos al mismo sector. Es más, de cara a las necesarias primarias (única encuesta válida para definir candidatos) la posibilidad de reconocer coincidencias y complementar con las diferencias la carta de navegación de próximo gobierno, representa una oportunidad valiosa.

Contrario a lo que pueden decir los adherentes de la Nueva Mayoría, la propuesta de derecha es atractiva para la ciudadanía, tanto por la percepción de que reactiva las oportunidades de trabajo, como porque se valora como un liderazgo más eficiente en el manejo de nuestra economía nacional, por lo mismo, los resultados de todas las encuestas coinciden en que bloque está mejor perfilado.

A diferencia de muchos, yo siento que la única proclamación válida es la que ocurre después de las primarias, antes sólo existe una democrática postura de partido, porque la hora de la verdad se escribe con el sufragio y a mi parecer, lo más importante de la proclamación de un candidato, es conocer la visión de Chile que nos ofrece.

Así que no nos perdamos en los personalismos y en lo sucedido en el anterior gobierno de la centro derecha, sin cohesión antes y durante, no tendremos después y el desafío no está en ganar esta elección, sino en sembrar la continuidad.