El resultado de las elecciones primarias ha sido una sorpresa –y una decepción- para quienes creemos que la derecha de hoy no puede ser la de hace veinte años atrás, ni mucho menos la de cincuenta años atrás. El domingo 30 fueron derrotados el mensaje y los sentimientos de quienes pretenden superar las concepciones tradicionales de la derecha tradicional, más defensora de sus propios intereses que de conceptos o ideas.
La noción de derecha moderna se confrontó con la denominada “derecha popular” o “centro social”, concepto tan imposible de determinar como de comprender. Sin embargo, si podemos entender que el resultado electoral de la UDI, es fruto de apelar a la idea de quien fue su gran articulador, Jaime Guzmán, un departamento poblacional que, en sus palabras, disputara “palmo a palmo en las poblaciones” a la izquierda.
Sin desmerecer lo hecho en dicho trabajo de Guzmán, sus partidarios que lo sucedieron se “acomodaron”. Si ganó Longueira fue principalmente por su condición de líder indiscutido dentro de su partido, que fue capaz de arrastrar a un partido que se encontraba moral y políticamente debilitado producto de la elección inadecuada de su inicial candidato.
Sin embargo, y pese al triunfo, debemos decir que dicha noción, la de “centro social”, no basta por si misma para que los principios de subsidiariedad, libertad y responsabilidad sean en dichos sectores tanto o más populares hoy que el asistencialismo, el clientelismo o la dádiva estatal. Decir como han señalado algunos que la “nueva derecha” nació sólo allí sería injusto y mezquino.
Por eso el relato de Andrés Allamand debe seguir vigente en este proceso, no obstante a haber sacado menos votos en esta elección que el proyecto propuesto por la UDI. En el significativo esfuerzo, al alero del concepto de la “democracia de los acuerdos”, referencia obligada al revisar la historia de las últimas dos décadas, la figura de liderazgos como el de Allamand cobran relevancia. Sin duda en forma anticipada a su tiempo, tales ideas hoy fundan el ideario de una nueva e indispensable forma de comprender a la derecha y la función gubernativa que se ha reflejado en los éxitos de la gestión del Presidente Piñera.
La noción que Allamand representa sigue más vigente que nunca: una derecha basada en la dignidad humana, sin miramientos en fomentar la cultura de los derechos humanos y condenar sus trasgresiones, sea que éstas se produjeran en Chile durante el gobierno militar, en Venezuela, en Cuba o China. Un movimiento políticamente laico que no pretende que sus miembros sean necesariamente agnósticos o ateos sino simplemente receptivos a la idea de separación de iglesias y Estado. Un movimiento sustentado en la movilidad social que privilegia el emprendimiento por sobre el igualitarismo y la meritocracia por sobre la uniformidad igualitaria estatista; y un movimiento con vocación de mayorías, sin complejos de sus antecesoras: no es un movimiento de cuadros, de defensa de interés.
Esa “derecha moderna” de la que hablaba Allamand en esos tiempos post-dictatoriales consiguió lo que se había propuesto: llevar a la centro-derecha al poder y alcanzar democráticamente el gobierno. Algo dificultoso de conseguir (diecisiete años de régimen militar autoritario marcaron huella) pero que, veinte años después, terminó transformándose en realidad. Un gobierno basado sobre los cuatro paradigmas descritos.
La centroderecha está llamada a no agotarse en un discurso electoral, sino a representar un movimiento social, que altere esa errada percepción de que Chile es un país ideológicamente de izquierdas. Y en eso, el legado de Allamand debe seguir vigente. Y su figura en la política chilena también.
De otro modo, no se explica por qué es que hoy es la centro-derecha, y no la izquierda, la que consiguió aprobar perfeccionamientos que proponen una verdadera “democracia 2.0”, con inscripción automática y voto voluntario; la que propone con fuerza voto para chilenos en el extranjero para chilenos; la que propone profundización de la tolerancia y la no discriminación; la que promueve la modificación del sistema electoral; la que, en suma, conjuga la efectividad al tiempo de un relato de afectividad.
La centroderecha está llamada a no agotarse en un discurso electoral, sino a representar un movimiento social, que altere esa errada percepción de que Chile es un país ideológicamente de izquierdas. Y en eso, el legado de Allamand debe seguir vigente. Y su figura en la política chilena también.
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Cristian Muñoz G
Me parece que se confunde respecto quienes se «acomodaron» señor autor del articulo. Le recuerdo que la UDI era un partido insignificante hasta que, presidido por Longueira, se convirtió en el partido mas grande de Chile. Esa enorme base popular, ese trabajo en poblaciones, permitió que personas como el Sr. Piñera, sin haber jamás pisado una población, pudiera erguirse como Presidente de la Republica, esa tremanda base popular, fruto del trabajo de Longueira y otros de la «UDI menos moderna» como diria usted, permiten erguirse a otros figurines que jamás han pisado una población marginal, como el actual candidato de RN, ese trabajo con el pueblo son la base para que gente como usted permita arrogarse el titulo de «derecha moderna». ¿ quienes se «acomodaron» señor ?
servallas
No creo que se necesite de «derechas», ni tampoco de «izquierdas», ambos pensamientos arrastran tras de si media humanidad muerta, son viejas máquinas de odio inventadas por los europeos y distan de la realidad latinoamericana, aunque sus agentes piesen que son necesarias. Quizás necesitemos sólo gente honesta, ética, que le importe su pueblo, personas con sinceros propositos de hacer que el pobre levante vuelo, si quiere levantarlo, porque parece ser que los pobres estan cada día más cómodos en su condición. En ambos casos, derechas e izquierdas sólo les interesa ganar el poder.
DANIEL MUÑOZ V.
QUE DIVERTIDO ES VER LA PUBLICACION DE UN MILITANTE DE RN….. MUY CONOCIDO EN EL MUNDO DE LOS VIEJOS COCHIOS QUE LE GUSTAN LOS NIÑOS…. ES COSA DE PONER EN EL GOOGLE EL NOMBRE DE ESTA PERSONA «PATRICIO NAWRATH», Y SE DARAN CUENTA DEL DOBLE DISCURSO DE LA DERECHA EN CHILE. PATETICO SEÑOR QUE EN LAS REDES SOCIALES BUSCA A NIÑOS O JOVENES HOMOSEXUALES PARA ENGATUZAR, QUIZAS NO A ENORES DE EDAD, PERO SI A LOLITOS QUE NADA TIENE QUE INTERESAR UN SEOR YA DE CASI 40 AÑOS. POR LO DEMAS UN LADRON, QUE ENGAÑO A UN MATRIMONIO DE ESFUERZO, QUE PUSIERON AÑOS DE SU DINERO GANADO CON MUCHO SACRIFICIO Y LOS ESTAFO, ABUSANDO DE LA CONFIANZA QUE ELLOS PUSIERON EN SU PERSONA.
UN CARA DE RAJA, QUE VIVE HABLANDO DE POLITICA SOCIAL, SIENDO QUE NO TIENE LA CARA PARA HACERLO, SOBRINO DE UNA MINISTRA DE ESTADO, CO UN TRABAJO CONSEGUIDO POR CONTACTOS POLITICOS AL IGUAL QUE SU HERMANA QUE TRABAJA EN UN PESTO DE CONFIANZA DE UN ALCALDE DE DERECHA SIN TITULO ALGUNO QUE AVALE SU EXPERIENCIA EN RELACIONES PUBLICAS, CUÑADO EN OTRA MUNICIPALIDAD DE DERECHA…. ETC, ETC, ETC!!!! ESA ES LA CARA QUE TIENE TODA ESTA GENTE!!!
DANIEL MUÑOZ
QUE BUEN COMENTARIO NOS HACE EL SEÑOR NAWRATH, PATO COMO LO CONOCEN LOS AMIGOS…. UN HOMOSEXUAL MUY CONOCIDO POR SUS GUSTOS DE PENDEJOS, BUENO PARA EL SEXO CASUAL EN LOS BAÑOS PÚBLICOS, FUNDADOR AL IGUAL QUE SU PARTIDO POLÍTICO LIBERAL A LOS BAÑOS DEL MALL PLAZA VESPUCIO…… COMO ERES CONOCIDO PATITO….. BUENO YO EN LO PERSONAL Y MUY AMIGO TUYO QUE FUI, PUEDO AGREGAR A TU CV QUE LE ROBASTE A MIS PADRES UN BUEN PAR DE MILLONES Y JAMAS DISTE LA CARA, LO HICISTE PORQUE SON PERSONAS HUMILDES Y DE ESFUERZO Y TU TE SENTÍAS MAS QUE ELLOS PORQUE TENIAS A POLÍTICOS A TUS ESPALDAS…. GRACIAS A TU TIA MINISTRA DEL EX GOBIERNO (CECILIA PEREZ) LOS TENIA A TODOS TRABAJANDO EN IMPORTANTES PUESTOS…. MINISTERIOS Y MUNICIPALIDADES (TU HERMANA SIN ESTUDIOS ES O ERA ENCARGADA DE COMUNICACIONES DE LA M. DE LA FLORIDA,,,, O NO__??)….. PARA QUE SEGUIR SOLO DEJAR EN CLARO LO ASQUEROSA QUE ES LA POLITICA EN CHILE Y ESTA ES UNA MUESTRA QUE LOS RECAMBIOS COMO TU SON TAN ASQUEROSOS COMO TU…… SERE EL MAS COMUNISTA CONTIGO…. NO HAY PERDÓN NI HAY OLVIDO.
peon
La derecha está huevo frito… No volverá al poder por muchos años, seguramente… La elección de Piñera fue un accidente, dentro de un escenario en el que la izquierda cometió errores que él supo capitalizar con más de un cuento creíble… «Cerraremos la puerta giratoria de la delincuencia»… (Sheguro, canguro…)
Respecto a democracia, democracia 2.0, o cualquier otra alucinación de la derecha y en general de toda la mafia política en cuánto al tema, creo que siempre será bueno visitar la RAE para preguntar por el concepto de democracia, para demostrar entendimiento cuando se hable del tema…