El eterno abismo entre los políticos y los intelectuales en la vereda derecha de nuestro sistema político pareciera estar llegando a su fin, o al menos a una tregua, y no de parte de la llamada generación de recambio que tiene serias deudas con el sector. La renovación real de ideas y dogmas viene de la mano del gran articulador e ideólogo de la derecha en los últimos 30 años, Allamand que años atrás fue catalogado como el niño símbolo de la unidad por una revista de circulación nacional, vuelve a la carga liderando a un grupo de personalidades destacadas de la centro-derecha con un manifiesto que llama a pensar en la república, que recoge los planteamientos originales de la derecha en cualquier programa de gobierno y que además plantea desafíos que por años fueron desechados por el sector que representa como el hecho de asumir la desigualdad como un problema a resolver en Chile.
En un año electoral donde las primarias de Chile Vamos, van en orientación más que en definir un abanderado sino que en elegir cuáles serán las ideas del sector que prevalecerán en el programa de gobierno, ejemplo hay varios como las públicas disputas entre la UDI y EVOPOLI sobre el aborto, matrimonio igualitario, conservadores v/s liberales. Allamand hace un llamado al orden y a pensar en lo que une a la derecha y no en lo que la divide: Reivindicar la república, nación abierta, democracia exigente, Estado fuerte, desigualdad y sociedad libre, economía fundada en las instituciones, educación, derechos y deberes. Conceptos que liberan un debate que nos demuestra que las décadas de existencia de la derecha en nuestro sistema `político no han sido en vano, más bien al contrario.Chile Vamos tiene el deber de considerar los puntos expuestos en «Manifiesto por la República y el buen gobierno» incorporarlos a su debate interno y profundizarlos, ya que es sabido que su electorado castiga la división y premia la unidad.
Chile Vamos tiene el deber de considerar los puntos expuestos en «Manifiesto por la República y el buen gobierno» incorporarlos a su debate interno y profundizarlos, ya que es sabido que su electorado castiga la división y premia la unidad. En política abundan los ejemplos de liderazgos con liderazgo exponencial que por ego o no saber medir los tiempos se farrearon enormes oportunidades de pasar a la historia, muchas veces el impulso de probarse electoralmente y de creerse dueños de votos inexistentes pasaron la cuenta. Allamand hace la lectura correcta que el próximo gobierno de Chile Vamos será liderado por el ex Presidente Piñera, pero ve una oportunidad de aportar al sector con ideas que curen el déficit de gestión política, a pesar de las críticas de uno de los partidos que conforman la coalición es innegable no ver el aporte de aquél que teniendo todas las credenciales para ser candidato presidencial, entiende que es el momento de otro y encuentra su lugar aportando con el sustancia intelectual y política, unidas por primera vez.
Comentarios
16 de febrero
El país necesita un sistema nacional de conversación en la red, como una Cámara Ciudadana Digital. Allí las propuestas del Sr. Allamand y las de otras personas podrían exponerse, resumiéndolas (para limpiarlas de la gramática de adorno que sólo sirve de estorbo, distracción o embolinamiento de la perdiz). Para el caso de la propuesta del Sr. Allamand, en democracia diría: «…voten». Nada más. la Leí someramente y no encuentro el INSTRUMENTO para ejercer una democracia basada en las ideas y en la razón.
Si tal existiera, se presentarían ideas, se evaluarían, se escogería algunas y se innovaría en muchas materias. Lo notable de esto es que cada político con un cierto tintinineo de renombre podría simular esa Cámara Ciudadana y decir: estas son mis ideas, busco otras y quiero debatir acerca de ellas. Pero, no lo hacen. Ninguno lo hace. Ningún partido político lo hace.
Luego, lo que tenemos es un panfleto político para aparentar que hay una idea, pero, no hay INSTRUMENTO para ejercerla. Sólo se quiere validar al sistema que se tiene, que consiste en que tú rayes un voto, pero, nadie, en ningún lugar, te ofrece la posibilidad de expresar tus propias ideas de forma institucionalizada o legal.
Que el Sr. Allamand utilice la palabra democracia y la maltrate con subtítulos, lo único que quiere decir es que «me gustan las cosas como están y estaríamos mejor si más gente votara», porque no presenta herramienta para ejercer una democracia renovada, verdadera y efectiva.
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19 de febrero
Muy sencillo poner bajo la alfombra lo que nos divide. Total no es importante el matrimonio; es desechable. No es importante la familia. Tampoco es importante los hijos. Asi aprobamos el divorcio. La igualdad de los hijis, luego vendrq el abirto. No señores son temas impirtante. Que a ti no te importe. Esa es otra cosa. A mi me importa.
19 de febrero
Estimado Cristian:
Un manifiesto por la familia y similares lo puede escribir cualquiera, pero, lo que no puede hacer cualquiera es decir como la fortalece. Para el caso de la democracia, cómo la hace real y racional.
Todas sus mejores intenciones y posturas acerca de la familia las podría expresar usted en una Cámara Ciudadana Digital, si quisiera participar en ella y si ella existiera. Su postura podría interactuar con la de otras personas y usted podría difundir su postura, defenderla o sumarla a la de otras personas.
Para el caso de la familia que ud, plantea, mejorarla para mí consiste en dos cosas. Mejorar al individuo y mejorar el entorno de la familia. Mejorar al individuo puede hacerse de muchas maneras. La que creo más importante debe ser hacerlo reflexionar en lo que es importante y para ello debiera leerse la Biblia y tendría una guía de vida para ser mejor.
El entorno consiste en lo que llega del Estado como recurso, obra o acción, o lo que puede lograr la persona y la familia. Al respecto, primero habría que ver su economía, porque con una mejor economía familiar las personas pueden pagar mejores servicios, como educaci´n, vivienda, salud, etc–
Para el caso, mi postura es que haya un banco de dinero que le preste dinero a los chilenos con menos recursos a un interés razonable y no usurero. El ciudadano además podría ser socio de ese banco y empresa. Largo detalle.
Allamand propone eso ?… No… Sólo balbucea frases sin instrumento…