La humanidad se divide en tres clases: Los inamovibles, los móviles y los que se mueven”
Proverbio árabe
El oficialismo está utilizando aquella arma que mejor sabe manejar: los medios de información masivos. Crear escenarios, proyectar ansiedades, generar incertidumbre, ha sido la forma en que han construido su relación con la ciudadanía.
Fieles a ese estilo, los últimos días han comenzado a cuestionar la figura de la ex mandataria, Michelle Bachelet, en torno a las donaciones que otorgó el Estado, legalmente, a organizaciones del tercer sector. El diputado a cargo de la denuncia indica que dichas donaciones fueron realizadas exclusivamente a organizaciones ligadas a personeros de la Concertación. Sin ir más lejos, han transmitido a través de los medios de prensa la posibilidad de armar una acusación constitucional, si procede.
Recordemos que esta información ya fue entregada después del terremoto del 27 de febrero, y que las organizaciones que más dineros recibieron fueron Un Techo para Chile y Teatro a mil.
La Alianza ya comenzó a enviar a sus interlocutores, posicionados como los voceros delatores de las irregularidades durante los Gobiernos de la Concertación, a denunciar y agitar las aguas para lograr desmantelar a una figura social que se forjó desde la emoción, no desde la razón. Todo indica que el aparato comunicacional se comienza a armar, pues no es menor para la Alianza aún no encontrar la forma de ser protagonistas desde La Moneda, de la misma forma que lo fueron fuera de ella.
Imposible meta si consideramos que ahora la dirección de país depende de ellos.
Pero esos discursos que sirvieron para inquietar ya no tendrán los efectos que tuvieron en su momento. La estrategia ya fue utilizada durante el Gobierno de Bachelet y durante la última campaña presidencial, por lo que la percepción ciudadana en torno a la forma de operar que tiene el oficialismo es más culta, aguda, y sabrá sopesar la información que se le entrega. Por otro lado, ya han comenzado a percibir de qué lado está La Moneda, por lo que si esos dineros fueron a organizaciones que van en directo apoyo de la población más vulnerable, será para ellos otro punto de reflexión, poniendo sobre la balanza a empresarios y ciudadanía.
Hay un dato que al parecer la Alianza no toma en cuenta, y es el siguiente: Bachelet fue levantada por el pueblo (entendiendo pueblo alejado del simbolismo que le entrega latinoamérica al concepto), pues fue la cotidianidad la que comenzó a generar una relación entre la figura de la ex Presidenta y los ciudadanos. Fueron esas coincidencias cotidianas las que unieron al arquetipo con la masa.
En ella se percibió el silencio, el trabajo, la derrota, el esfuerzo, la simpleza, la impotencia y el coraje. En fin: todo lo que le da forma al ciudadano de a pie. Pero hay un factor que es el más relevante de todos a mi parecer: ella no se desconoció a sí misma. A pesar de contar con episodios de vida para hacerlo, fue valiente, honesta, transparente, sensible, persistente. Logró condecorar la vida con un “sigamos pa’ adelante”
Ella hizo visible que vivir al límite no es excusa para tirar la toalla; tal vez llorar un rato, pero quedarse en el camino no fue opción, como no lo es para muchos, y millones en este país.
El oficialismo, para lograr posicionarse como Gobierno, deberá dejar de ser aquel guardián de turno que creyó conquistar a la ciudadana con sólo denuncias, rumores en algunos casos o proyecciones insanas. El oficialismo se revela frente a la ciudadanía más como una burguesía prepotente que viene a inspeccionar las dependencias de sus fundos, que empleados públicos al servicio del Estado. Y esa sensación de ver amenazados los anhelos, sueños y convicciones, bien la conoce el pueblo de Chile.
Empañar a Bachelet es pasar a llevar un sentimiento popular, porque a diferencia del papel, la piel no lo aguanta todo. No creo que deba ser una persona intocable, pues es una figura pública relevante y, como tal, es observada bajo una un prisma mayor. Pero sí creo que esa persona que fue capaz de ser puente entre el Estado y sus ciudadanos, y que fue capaz de ser una estratega innata al evitar provocar un discurso social que humillara la inteligencia humana. Todo ello la convierte, con buen Gobierno o no, con errores, con desprolijidades -si existieran en los casos mencionados- en una ciudadana a pie.
Estrategias más, estrategias menos, Bachelet tiene una humanidad espontánea que la sitúa, al igual que a millones en este país, en aquel espacio donde la aceptación de las coincidencias compartidas nos llevan a encontrarnos a través de la empatía.
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Comentarios
30 de junio
Fiscalizar, auditar, investigar no es lo mismo que desmantelar. Yo me preocuparía en el caso que exista algo doloso en la administración de los dineros de todos los chilenos, pero, como confío plenamente en el buen criterio de la Sra. Bachelet, tengo certeza cierta que esto no prosperará.
Como ciudadana contribuyente y afecta al impuesto único de segunda categoría, al global complementario, al de ventas y servicios, etc. estoy completamente de acuerdo con cualquier gestión cuyo objeto sea transparentar los dineros utilizados por cualquier autoridad, los criterios utilizados, las prioridades empleadas, en fin, a mayor información de lo sucedido con los fondos públicos entre diciembre del 2009 a marzo del 2010, menor será la desconfianza, a menor información, mayor será la suspicacia y generará un escenario favorable para cualquier tipo de especulación. No hay que permitir ese tipo de errores.
Relacionar estrategias políticas con transparentar lo sucedido con los fondos públicos en cuanto a las donaciones, todo envuelto en argumentos populistas, me parece un flaco favor y falta de confianza a la Sra. Bachelet y su equipo.
No me cabe duda que nuestra ex-Presidenta, ante el resultado de una auditoría, investigación ( o el nombre que quieran darle) saldrá potenciada en todo su esplendor sin sombras ni mancha alguna a su gestión.
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30 de junio
Hola Cecilia,
Se eligió este tema ya que no deja de extrañar que se haya tocado en dos escenarios desfavorables para el oficialismo, por lo mismo se consideró relevante para escribir esta entrada lograr establecer una pequeña cronología de cómo la Alianza está llevando su relación con la figura Bachelet.
Sin ir más lejos se lanza cuando se discute incrementar el sueldo mínimo en el congreso, supuestamente no hay más plata; cuandola encuesta CERC está salida del horno, y cuando Chile es descalificado del Mundial.
Para mi percepción creo que siempre la información debe ser completa y transparente, es la única forma que como ciudadanos podamos construir opinión. Independiente del tema o el fin que se busque, por lo que estoy completamente de acuerdo contigo que esto se debe investigar.
En cuanto a la confianza, para mí, nunca debe ser ciega. La confianza ciega deja inmóvil, evita reflexionar lo observado, evita que nos demos tiempo de cuestionar para así reforzar nuestras convicciones o transformarlas. Incluso tener plena confianza en nosostros mismos nos estanca para darnos la posibilidad de revisarnos de vez en cuando.
Por lo mismo que sucedan estos tipos de hechos son sanos, más aún cuando la ciudadanía tiene una conexión especial y estrecha con la ex Presidenta.
Y el populismo, ahí me perdí.