"La gente cuando escucha hablar de nuestra población, se asusta porque cree que todos somos ladrones y traficantes", dice la operadora del telecentro y ella tiene razón.
"Busque usted mi población en Google y va a ver que sólo hablan de drogas" dice el otro operador y tampoco falta a la verdad.
Con la elegancia de la Times New Roman o con el foco luminoso que abre camino a la cámara en la oscura noche de la redada, los medios levantan "la verdad", la que alimentan con la desesperanza aprendida del habitante que se traga la bronca, la misma que tragó su padre y su abuelo cuando llegaron a vivir a las caballerizas que dieron origen a la población, después que las lluvias despiadadas del año 50 ablandaron el corazón a las autoridades de turno y se los llevaron desde las orillas del río a la guarida de los caballos para ayudarlos a caminar hacia una vida "más digna".
Los medios hablan de ellos, la opinión pública levanta sus juicios, la autoridad decide su destino y ellos se vuelven espectadores de su presente, de su destino.
¿Cuánto está dispuesto el Estado a entregar herramientas a los que no tienen voz?¿En que medida el Estado considera que esto es una tarea pendiente?
Hace unos años, el párroco, Gerard Ouisse, un cura obrero belga que trabaja en la población La Legua (una de las poblaciones más antiguas de Santiago originada de una toma), envió
una carta a Chilevisión (canal de televisión chileno) , en relación a un reportaje emitido por este canal sobre la población, con el cual sólo lograban estigmatizar aun más a sus habitantes, como si ser uno de su vecinos equivaliera a ser drogacicto, delicuente, asesino.
Un gran grupo de personas, políticos, académicos, ONG, curas, pobladores, entre otros, manifestamos públicamente nuestro apoyo a Gerardo, pues su carta era a su vez la carta de cientos de "Leguas", era una carta que golpeaba como una piedra ese cristal que parece tan transparente e inocuo con el cual los medios nos muestran aquellos que llaman "la verdad".
Es interesante debatir respecto a quienes escriben la verdad y también respecto a quien tiene, además, el poder para posicionarla como la "verdad única", a partir de la cual se registran los eventos con los que las personas configuramos el imaginario que vincula en nuestra mente, conceptos e imágenes cuando una palabra es escuchada o leída.
Cuando usted escucha la palabra "poblador de la Legua", necesariamente imagina algo, ve una imagen, es capaz de señalar características, es capaz incluso de decidir si es o no bueno contratarlo en la oficina, sin siquiera haberlo escuchado o conocido y esto es en gran medida por el efecto y la influencia que los medios ejercen en nuestra capacidad de "elaborar la visión del mundo" a través de la información que recibimos.
El monopolio de los medios en las manos de los que tienen el poder permite sólo visibilizar lo que esa lupa quiera ver, sólo lo que esa lupa quiere y le conviene mostrar.Las imágenes que nos muestran, son las que alguien decidió que eran las que debían ser mostradas. ¿Sabe usted a caso que en La Legua hay talleres de tejedoras mapuches? ¿Sabe que hay un grupo musical llamado Legua York? ¿Sabe que el sitio web de La Legua ganó el premio al mejor sitio web comunitario hace unos años? Conoce acaso usted a Anita Gossens? ¿Sabe usted que para navidad se hace una misa a la que van grandes empresarios? Creálo, todo esto existe, aunque no se lo muestren.
Las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) son capaces de revertir estas asimetrías, permiten darle voz al silencioso, permiten construir nuevas redes que visibilicen y aglomeren las voces de quienes no han sido llamados a ser la "voz oficial", pero que necesariamente debe existir en un país democrático y que ve en la participación
ciudadana activa, la esperanza de fortalecer el alicaído tejido social de nuestro país, donde se ha vuelto frágil la capacidad de organizarse, de confiar en el vecino y que ha olvidado el algoritmo básico que señala que la unión de varios, claramente es más potente que pretender encontrar solución en la soledad de la casa encerrado viendo la teleserie de las ocho.
Como dice
Paulo Freire "cuando la persona se sumerge en sí misma, perdiendo toda esperanza, sus ganas de luchar se ven mermadas o desaparecen", de este modo, las TIC por sí solas no son liberadoras, pues sólo lo son en la medida que las personas son capaces de combatir el “cansancio existencial”, que es la pérdida de toda esperanza.
El sueño y la utopía son indispensables para descubrir y transmitir las posibilidades para la esperanza, la expectativa de cambio, dado que sin ella no se lucha para cambiar las cosas.
Yo creo que las tecnologías son herramientas para la liberación de quienes son oprimidos y avasallados por la verdad oficial que otros le imponen, siendo a la vez un medio necesario para lo que Boaventura de Sousa Santos señala como "justicia cognitiva" que no es otra cosa que entender que la razón está distribuida en todos por igual, por lo tanto todos tenemos el derecho para manifestarla, divulgarla y darla a conocer.
Quien crea entonces que esto es sólo un problema de acceso a las TIC, está equivocado, el foco principal es el uso con sentido de estas herramientas, es por tanto un nuevo desafío para el Gobierno de Piñera.
Ya qprendimos en el Gobierno de Lagos, que sólo contar con la Campaña Nacional de Alfabetización y alegrarnos de como la cifra de "manejadores de software" se incrementaba no fue suficiente.
Tal vez es importante hacer confluir líneas de trabajo entendiendo por ejemplo , que en un país que envejece es importante la formación permanente de la ciudadanía, también conocida como Long Life Learning, siendo,por tanto, esencial abordar este tema con el apoyo de las TIC con inteligencia, con dedicación y con audacia.
Yo estoy segura de que esfuerzos en esa línea no serán en vano para un gobierno que esté dispuesto a apostar seriamente por activar la participación ciudadana en este siglo, en la Sociedad del Conocimiento.
Los contenidos publicados en elquintopoder.cl son de exclusiva responsabilidad de sus respectivos autores.
Te invitamos a conocer nuestras Reglas de Comunidad
Comenta este artículo
2 Comentarios
gmunoz
Somos dos! El tema que se nos viene es el intento de algunos gobiernos de controlar la red.
¡Cómo adelantarnos a eso?