En estas fechas siempre tengo la leve esperanza de que las cosas cambien. Tengo alguna guardada ilusión de que aquello que dividió a Chile, esa horrible escena en el año 1973, en esa detestable cantidad de errores que comenzaron a mediados de los sesenta y que termina en una suscitada violencia que nos arrebato la inocencia de un pueblo… No puedo sino, lamentarme que como nación, fuimos (y somos) usados.
Un poema que escribí en mi adolescencia (16 años), es la única forma que tengo para poder expresar lo que ocurre en mi corazón cada 29 de marzo, cada 11 de septiembre, y en cada palabra de culpa y reproche entre bandos, olvidando, que aquellos que están arriba, son amigos, familiares y compadres.
Este poema espero que lo puedan compartir, si Ud. siente que en algo pueda representar a nuestro país.
Partida de Ajedrez
Este es el relato de un juego,
Pero no de cualquier juego.
Esta es una partida de ajedrez,
Pero no cualquier partida de ajedrez;
Claro que no, como lo han de creer,
Que se trata de cualquiera.
Les cuento…
En un lugar no muy lejano
Existían dos reinados;
Uno con barras y estrellas,
Y el otro rojo con un martillo
Estos dos reinos se enojaron
Y no encontraron mejor manera
Que jugar una partida de ajedrez
Para saber quien de ellos
Era mejor que el otro.
La gran partida de ajedrez comenzó
El tablero estaba entre mar y cordillera,
Los peones de ambos reinos
Eran de un mismo pueblo
Un reino tomo los hombres,
Y el otro los niños y ancianos.
Los armaron de pies a cabezas,
A ambos bandos
Haciéndolos pelear
Padres matando a hijos,
Hijos matando a padres
Hasta que los de barras y estrellas
Dejaron en jaque a los rojos y su martillo.
Después de haber jugado
Ambos reinos se reconciliaron
Dejaron a un pueblo acabado
Y todos terminaron como diablos.
Padres no perdonan a sus hijos
E hijos no perdonan a sus padres
Mientras no se perdonan
Los dos reinos toman y toman.
Por mi parte yo,
Termine siendo relator
De esta gran partida
De Ajedrez.
Comentarios
30 de marzo
Una reflexión de buena altura y con pasión que demuestra con un poema. Y si no califica de poema para algunos letrados entonces el mérito es doble: se atreve a expresa su gran sensibilidad sin tener escuela para hacerlo.
Felicitaciones señor.
+1
31 de marzo
Jose Luis, muchas gracias por tus palabras. se agradece la dedicación a leer esas líneas plasmadas hace 17 años (paradójica cifra de años también).
Un abrazo
30 de marzo
Así fue, una partida más, una de las tantas por todo el globo, ambos poderes mundiales nos usaron como peones, en cada movida dejaron un rastro de odio y muerte. Posteriormente cada uno de los jugadores elaboró su discurso y contó su historia, y así miles, quizás millones se compraron una verdad espúrea acerca de esa partida, ahora quieren otro juego, la revancha. Triste por donde se lo mire.
+2
30 de marzo
Gracias por tus comentarios, se agradece en serio.
Un abrazo