Al chileno no le interesa la miseria de «F», sólo le interesa el morbo del famoso caído en desgracia. Miles de «F» deambulan en las calles. Miles de «F» se venden día a día en las calles por 5 o 6 mil pesos, pero mientras no involucren «rostros», seguirán siendo invisibles para la televisión, para los ministros, para los empresarios, para la iglesia, para todos nosotros.
Nuevamente hemos perdido en foco de lo importante en el acontecer nacional, alimentando el morbo de los editores periodísticos de los más destacados canales de televisión. En mayo del 2012, TVN desplegó la noticia «Desbaratan red de Prostitución Infantil, en la plaza de armas”, noticia de la que nadie se acuerda, información que a nadie le importó, nunca se le dio apoyo a las menores involucradas en esa oportunidad, las cuales perfectamente pueden ser las mismas protagonistas de la nueva red y, por qué no decirlo, los mismos perversos compradores de carne. ¿La diferencia? En esa fecha no se divulgaron nombres de famosos.
Con bombos, platillos, bengalas y maromas, hoy nos presentan nuevamente la noticia, con la sórdida historia del, sometido a proceso, productor musical de TVN, la historia del pervertido dibujante de comic, los pormenores de las conversaciones entre las «cabronas» y sus clientes, cotizando carne fresca, cruda, adolescente.
Con el virtuosismo de periodistas amarillentos y el amparo de sus directores y editores, (ávidos de publicidad e ingresos), perdemos la oportunidad de darnos cuenta de la gravedad de la situación, tal como olvidamos lo de mayo de 2012. Perdemos el foco de las verdaderas protagonistas de esta sórdida historia, quienes han quedado olvidadas, encerradas en sus casas, sin ningún tipo de apoyo ni protección.
El testimonio de la menor «F», deja ver claramente el abandono de la policía, de gobierno y de nosotros mismos. Ella está siendo acosada por sus vecinos, por sus compañeros, ella no podrá recuperarse sola para enfrentar la vida nuevamente, ella será invisible y las luces de la TV taparan la miseria en la cual seguirán viviendo. Es muy probable que cuando sea adulta, siga en la prostitución, con acceso a drogas, vendiendo su frágil alma por unos sucios pesos de algún miserable poderoso, el que se ampara en la pésima justicia social que hoy tenemos.
Miles de «F» deambulan en las calles. Miles de «F» se venden día a día en las calles por 5 o 6 mil pesos, pero mientras no involucren «rostros», seguirán siendo invisibles para la televisión, para los ministros, para los empresarios, para la iglesia, para todos nosotros.
Al chileno no le interesa la miseria de «F», sólo le interesa el morbo del famoso caído en desgracia. Luego de eso, y cuando la noticia se diluya, «F», sólo será una putita pobre, que alimenta los deseos más perversos de la urbe.
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Foto: 24horas.cl
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