Un nuevo femicidio eleva a veinticuatro las mujeres que a la fecha han sido asesinadas por hombres desconocidos, conocidos o de su entorno familiar. Seis femicidios en una semana: tres mujeres asesinadas por sus maridos, dos niñas de 2 y 7 años asesinadas por su padre, y hace dos días una mujer de 88 años fue asesinada por su sobrino.
Usted no lo sabía, ¿no es cierto? Es que al parecer no es algo importante. Los medios de comunicación tienen copados sus espacios con políticos que defienden sus indefendibles actos corruptos. Los políticos por su parte siguen ocupados, como siempre, en sus “importantes” asuntos, entre los que no cabe la vida o la muerte de una, seis o veinticuatro mujeres. ¿El femicidio es algo que no nos afecta como sociedad?
Imagínese qué sucedería si el asesinado fuera un político o un futbolista. Los medios de comunicación transmitirían día y noche por semanas, buscarían entrevistas y explicaciones de los hechos. Las autoridades políticas visitarían a la familia, y prometerían rápidas investigaciones y justicia.
Pero no es el caso de los femicidios. Estos no generan tanta conmoción social; ni siquiera una alusión por parte de las autoridades públicas; y en los medios de comunicación los femicidios ocupan apenas un lugar en la crónica policial.
La indiferencia, la apatía, la indolencia de la sociedad, de los medios y del estado chileno reflejan la subvaloración y el menosprecio de la vida de las mujeres.
La violencia contra las mujeres y el femicidio, una de sus manifestaciones extremas, nos genera tanta indignación como los abusos policiales contra estudiantes y el pueblo mapuche; como el asesinato de los jóvenes en Valparaíso, o como la corrupción entre políticos y empresarios.
Usted no lo sabía, ¿no es cierto? Es que al parecer no es algo importante. Los medios de comunicación tienen copados sus espacios con políticos que defienden sus indefendibles actos corruptos. Los políticos por su parte siguen ocupados, como siempre, en sus “importantes” asuntos, entre los que no cabe la vida o la muerte de una, seis o veinticuatro mujeres. ¿El femicidio es algo que no nos afecta como sociedad?
Instamos a todas y todos a discutir en el trabajo, en la casa, en las organizaciones, con las amistades sobre la violencia contra las mujeres; exigir a las autoridades que se pronuncien y tomen medidas; exigir a los medios que informen con seriedad y fundamentos que permitan reflexionar sobre este grave problema; y generar acciones de repudio y resistencia en la perspectiva de su erradicación.
¡CUIDADO! EL MACHISMO MATA
¡NI UNA MUJER MENOS NI UNA MUERTA MÁS!
RED CHILENA CONTRA LA VIOLENCIA HACIA LAS MUJERES
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