Carta abierta del Presidente Metropolitano sobre el proyecto de ley de «Desarrollo Profesional Docente»

Profesoras y profesores. Colegas:

Hace algunos días, el Directorio Regional Metropolitano fijó su posición respecto del proyecto de ley de “Desarrollo Profesional Docente” del Ministerio de Educación enviado al Congreso.

Ahí, mayoritariamente, expresamos los puntos principales de desacuerdo, los que a mi juicio debieran realizarse con indicaciones necesarias que cambien diametralmente el sentido de ellas, tal que este proyecto de ley exprese el verdadero sentir de las profesoras y profesores.

Este es un momento delicado de inflexión. Se resolverá a favor o en contra nuestra dependiendo del grado de unidad, organización y movilización que seamos capaces de desplegar.

Esta necesidad obliga, si queremos tener éxito, a hacer funcionar los consejos gremiales en cada escuela y liceo del país. Desde ya, las actividades del plan de movilización, es una oportunidad para organizarnos por escuelas y fortalecernos mejorando nuestra correlación de fuerzas.

Estamos en un momento especial. Por primera vez en la historia del magisterio, especialmente desde el año 1997, en que se realizó un congreso de educación organizado por el Colegio de Profesores, tenemos la posibilidad cierta de concretar una Carrera Profesional Docente. Desde esa fecha se ha ido construyendo nuestra propuesta, la que debe tomarse en cuenta dentro de la ley que inexorablemente verá la luz. No podemos “tirar por la borda” ese esfuerzo colectivo construido por el magisterio, donde se elimine la competitividad y el criterio de mercado que encierra este proyecto de ley.

En segundo lugar, quiero referirme a algunos puntos fundamentales por donde habría que comenzar con las indicaciones al proyecto:

1.- La Carrera Universal es necesaria. Debieran por tanto ingresar juntos colegas municipalizados, particulares subvencionados y corporados,  pero los términos planteados en el proyecto rompe con ello, pues los beneficios no son universales. Debemos hacer notar que los recursos para financiar la carrera se entregarán por igual al sector municipal como al sector particular subvencionado.  Sin embargo este sector privado no entra de inmediato y terminaría su proceso en el año 2026. Durante todo ese período los dineros entregados irán a los bolsillos de estos sostenedores privados.

2.- Se debe congelar la actual evaluación docente, pues es extemporánea, debe estar dentro de la Carrera que aún no tenemos (a pesar de que hubo dirigentes que la impulsaron con fuerza y ahora critican a quienes en su momento  la rechazamos). Se debe construir acorde a la realidad docente, donde se cambie los parámetros a evaluar, reconociendo méritos, responsabilidades y actividades que realizan los docentes diariamente y entregar los tiempos suficientes para realizar todos los procesos que contemple, dentro de las horas de contrato.

3.- El principal agobio se produce por la falta de tiempo para cumplir con todo el quehacer profesional que nos impone nuestra función. Es imprescindible que la relación de horas no lectivas y lectivas sea de un 50% cada una. La actual realidad impide desarrollar procesos pedagógicos normales sin que las/los docentes se angustien por falta de tiempos adecuados para ello.

4.- Todos quienes entienden de educación, coinciden que sus procesos deben tener carácter colaborativo. Sin embargo, los procesos de certificación en el proyecto de ley son estrictamente individuales: portafolio y prueba de conocimientos. Propongo construir procesos de intercambio pedagógico que determinen principalmente la certificación y evaluación docente.

La lucha organizada, unitaria en su acción, ascendente y profunda, es la única manera de acercarse a logros importantes en esta carrera, que será la normativa que regulará los aspectos profesionales y laborales de gran parte (si no de toda la vida laboral) de cada profesora y de cada profesor.

5.- Me preocupa el TÍTULO III, PÁRRAFO I del proyecto, donde establece expresamente que se aplicará a los profesionales de la educación… de “los Departamentos de Administración Educacional de cada municipalidad, o de las Corporaciones Educacionales creadas por éstas”.

O sea, proyecta a futuro la permanencia de la municipalidad  en la administración de la educación. No se advierte apertura a otro sistema futuro, hacia la desmunicipalización cuando estamos ad portas del envío del proyecto de nueva institucionalidad.

6.- La futura permanencia de profesores a contrata por años es inaceptable, como también la certificación para pasar de un tramo a otro con el mismo portafolio de la evaluación basado en el obsoleto “Marco de la Nueva Enseñanza”, agregando una prueba de conocimientos disciplinares cada cuatro años. Con ello se introducen nuevos elementos de agobio al profesorado.

7.- Respecto de las remuneraciones. No es verdad que al ingresar a la carrera se comience con un mínimo de 950 mil pesos para 44 horas. Hecho los estudios correspondientes, los cuales publicaremos, indican que sumados los distintos ítems respecto a sueldos y asignaciones, incluído muchos años de servicio laboral, no se alcanza este valor. Estamos muy lejos de ello.

8.- Creo que debemos exigir que para los colegas que jubilaron se les reevalúen sus pensiones y para quienes van a jubilar, haya un egreso con justicia, pues la actual situación lanza a nuestras/os colegas directo a la pobreza. Mientras no haya un nuevo sistema de pensiones (de reparto) se debe garantizar un bono de retiro.

Las indicaciones deberán ir por el camino de transformar estos puntos como inicio, pero debemos hacer el estudio y debate pertinente para completar, de acuerdo a la propuesta que tenemos como gremio, aquellas que nos coloquen en la senda que hemos trazado durante 18 años. En esto, la participación de los colegas en las escuelases fundamental.

La lucha organizada, unitaria en su acción, ascendente y profunda, es la única manera de acercarse a logros importantes en esta carrera, que será la normativa que regulará los aspectos profesionales y laborales de gran parte (si no de toda la vida laboral) de cada profesora y de cada profesor. En eso es clave difundir y respaldar la propuesta de carrera docente universal del Colegio de Profesores de Chile elaborada tras muchos años de discusión y análisis.

La consigna para esta etapa debe ser colegas: organización, unidad y lucha.