La educación actual basa las creaciones y descubrimientos en un focalizado establecimiento de límites, tal como nuestra sociedad. No podemos darle una segunda vuelta a las indicaciones del profesor porque es una persona a quien no se le puede rebatir dentro del aula, y su voz es nuestra idea y nuestro conocimiento, desconociendo nuestra capacidad cognitiva para generar nuestras propias soluciones. Somos obligados a pensar de igual forma, a dar las mismas soluciones a nuestro problemas particulares, y a depender totalmente de alguien más.
La matriz piramidal con la que se enfrentan los estudiantes, impide generar recursos propios sin sufrir el hostigamiento del resto. Las mentes creativas son discriminadas, los que proponen ideas rupturistas o alejadas de los parámetros que dictan los profesores y que están en los currículums de cada proyecto educacional, son víctimas del golpe demoledor del martillo sobre sus cabezas que es lanzado con fuerza por quienes evangelizan la igualdad de derechos, pero que desconocen la particularidad de cada alumno en su propio proceso de aprendizaje.Las mentes creativas son discriminadas, los que proponen ideas rupturistas o alejadas de los parámetros que dictan los profesores y que están en los currículums de cada proyecto educacional, son víctimas del golpe demoledor del martillo sobre sus cabezas…
Esta matriz es la que mantiene el sistema tal cual lo conocemos. Si no somos capaces de romper esta estructura y evolucionar hacia una matriz de redes, donde cada individuo aporta desde sus recursos, donde cada profesor se apoya en otros para lograr el mejor rendimiento, donde los padres participen en el proceso de evolución de sus hijos, y no los dejen en la escuela o el colegio pensando en sólo dos cosas: unos deseando que aprendan a trabajar y ser responsables para alimentar las fábricas y contar con orgullo al resto de su clase social que sus hijos trabajan en tal o cual empresa/institución, y los otros deseando que sus hijos obtengan tal nivel de conocimiento que sean médicos, arquitectos o abogados para alimentar el ego familiar y, claro está, contarlo al resto de su clase social. Todos buscan el mismo fin social. La gran mayoría aspira a que sus hijos se titulen de la universidad. La TITULITIS AGUDITIS es un mal de nuestro país neo liberal.
Todos debemos ser reeducados. Todos debemos repensar nuestra vida y el cómo podemos aportar al resto de la sociedad. Todos debemos aportar a que la red de conocimiento, tal como lo hace nuestro cerebro y que es copiada en la Internet, sea capaz de obtener conocimientos cooperativos de todos y así poder servir para transmitir ese resultado a todos. Cada nodo de esta red (todos nosotros) puede brillar con la luz que podamos encender con nuestras soluciones y construcciones de realidad.
Los alumnos pasarían de ser ovejas con un pastor, a ser científicos guiados por un maestro. Todos somos descubridores de un nuevo mundo, de nuevas experiencias y de diferentes realidades. Pasaríamos de tener colegios donde aprendemos la ciencia y los descubrimientos de otros, a practicar cómo se descubre.
La conciencia de saber que nuestra creatividad -como parte de una gran red de conocimientos- es fundamental. No sólo para que nuestro sistema educativo despliegue las herramientas que necesitamos para armar un nuevo país, sino que además nuestra Evolución puede ayudar a otros a encontrar su propio camino y mejorar nuestra sociedad donde nosotros como Maestros, Apoderados y Alumnos evolucionemos hacia una Civilización de personas libres, socialmente iguales y culturalmente preparadas para aportar al resto del Mundo.
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