Escribí hace unos días sobre el impacto que un debate en televisión había generado por la irrupción sorpresiva de Josefa Errazuriz en las preferencias de los televidentes. Ayer la sorpresa se confirmó. Lo que ocurrió en la TV se refrendó en las urnas.
Esto pasó por varias razones, entre otras, muy concretas. El curriculum de Pepa llama mucho la atención. Dirigente vecinal que ha trabajado más de veinte años luchando y aportando por el mejoramiento de su comuna. Acumula conocimiento y cercanía con su comunidad y al tener la oportunidad de comunicar eso con transparencia y convicción, el ciudadano y la ciudadana sintió que estaba frente a una persona genuinamente interesada y comprometida con las pequeñas grandes cosas que forman parte de la vida de cada ciudadan@.
Pepa representa al dirigente social que realiza su trabajo, no para solucionar pequeños grandes problemas alejados de la realidad social y política de la comuna y del país. Pepa ha sido una dirigente social en una comuna dirigida por un alcalde cuyo discurso político representa la defensa irrestricta de la dictadura, cuya relación con la comunidad representa todo lo contrario y todo lo alejado de la presencia ciudadana en la comuna.
Durante todo el periodo de Labbé, Pepa ha trabajado oponiéndose a esa forma de hacer política comunal, autoritaria y asistencialista, representando siempre la alternativa democrática, participativa. Pepa no ha sido una dirigente neutral y anodina. Siempre ha sido una conocida opositora al coronel y a lo que él representa, una oposición desde la base comunal, una oposición desde el cansancio y la perseverancia de creer que algún día esto podía y debía terminar en Providencia.
Pepa representa y simboliza el término de la dictadura y de la transición desde las cúpulas políticas, que más que alejarla solo permitieron transformarla, o en casos como Providencia, enquistarla.
Pepa representa la consolidación del proceso democratizador que aún está pendiente. Ese que permita que todos y todas ciudadanamente seamos sujetos de derechos, seamos ciudadan@s activos y conscientes, seamos ciudadan@s que no solo califiquen como tales cada cuatro años, cuando nos llaman a participar en algún evento para elegir autoridades.
Pepa nos invita a ejercer nuestros derechos permanentemente, nos invita a exigir espacios y mecanismos reales de participación ciudadana en la gestión pública, a fortalecer el amplio tejido social que recorre y despierta a todo el país.
Como alguien escribió: de una pepa puede nacer y crecer una planta, un árbol, algo vivo. Una Pepa nos demuestra que pueden crecer nuevas-viejas formas de hacer política.
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Foto: Emol
Comentarios
16 de mayo
Carlos, si yo viviera en Providencia voto a la Josefa Errázuriz.
Ella representa las antípodas de la maligna viscosidad antidemocrática que se ha entronizado por tantos años en la comuna. Con la Josefa deben despertar por fin los vecinos de Providencia. Una pepa para volver a creer en el vecindario más progresista, amigable y entusiasta de que yo tengo conocimiento. Muchos próceres y amigos de esa comuna me enseñaron a quererla y a respetarla. Un rayo de luz ha venido a confirmarnos que aun hay esperanza.
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