#Ciudadanía

Los condenados por consumo y la ilegitimidad de la Constitución

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Durante las últimas semanas, mucho ha llamado mi atención las innumerables manifestaciones de apoyo que se han realizado en favor de Manuel Lagos. No quiero ser mal interpretado, no estoy en contra de ellas, pero si me he cuestionado: ¿por qué nada se dice respecto de los otros miles de ciudadanos que se encuentran detenidos o incluso, cumpliendo condenas por el simple hecho de ser consumidores de droga?

No planeo rasgar vestiduras respecto de la condición de favorito que a Lagos le otorga tener amigos famosos, eso sería absurdo, es obvio que su círculo lo va a apoyar.

Se ha señalado, como causa de éste infortunio, la mala política legislativa de criminalizar el consumo, pero el problema es de raíces más profundas. Creo que este es el punto en el cual se fundamentan las fervorosas y actuales reivindicaciones sociales. El hecho es que la Constitución Política de 1980 no reconoce como garantía fundamental plena, el derecho de autonomía personal.

El derecho de autonomía personal implica que cada persona puede tomar las decisiones que afectan su vida personal. Normalmente se descompone en derecho de libertad ambulatoria, derecho a la vida privada, derecho de libre albedrío, libertad de pensamiento, el derecho que se le entrega al moribundo de no aceptar transfusiones de sangre, el derecho del discapacitado a elegir su tratamiento, etc.

La Constitución de 1980, si bien consagra algunos aspectos del derecho de autonomía personal, lo diluye, lo divide y lo limita, pues claro, nunca un régimen autoritario lo consagraría integralmente. Éste absurdo se ha mantenido durante los últimos años de forma casi inadvertida por la mayoría de los ciudadanos.

La Constitución de 1980, si bien consagra algunos aspectos del derecho de autonomía personal, lo diluye, lo divide y lo limita, pues claro, nunca un régimen autoritario lo consagraría integralmente. Éste absurdo se ha mantenido durante los últimos años de forma casi inadvertida por la mayoría de los ciudadanos.

Recuerdo hace unos años, en medio de la discusión generada por la ley que prohíbe la venta de comida chatarra en colegios y universidades (la Ley del Súper 8), el senador Jovino Novoa alegaba: “Si una persona adulta, mayor de 18 años quiere comerse un choripán, entonces es libre de hacerlo”. La pregunta es: ¿por qué esa misma persona adulta no puede fumar marihuana? Los efectos nocivos y adictivos de la comida chatarra están comprobados, por lo que no es dable el argumento de la salud. ¿Por qué entonces esa misma persona adulta no puede decidir casarse con otra de su mismo sexo? ¿Por qué esa misma persona no puede decidir morir dignamente? Y así un largo etcétera.

No existe razón alguna, más allá de que el porcentaje conservador que integra nuestra población insiste en imponer sus propias convicciones y su propio estilo de vida sobre el porcentaje que abogamos por la libertad de los individuos.
Hablo de porcentajes, pues siempre he mantenido la duda sobre cuántos somos realmente liberales en Chile. A rato,  uno se siente algo sólo.

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Francisco González

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vasilia

vasilia

El derecho de autonomía personal implica que cada persona puede tomar las decisiones que afectan su vida personal.

Pero el derecho de autonomia implica que asumas las consecuencias.

Y ese es el problema con los consumidores de drogas, que mucho hablar de que tienen derecho a consumir… pero de responsabilidad cero. No quieren asumir las consecuencias negativas, porque no quieren pensar que hay consecuencias negativas. Es como el que consume comida chatarra: nunca quiere pensar que afecta a su salud hasta que esta gordo, diabetico y en un hospital.

¿Que libertad es esa que depende de una droga? Ya tenemos muchas cosas que nos limitan en la vida: el tener que vestirnos, el tener que comer, el tener que dormir, y como si eso no fuera suficiente, algunos van y le suman drogas. «La uso para ser creativo, la uso porque me relaja»… Siempre buscando excusas para engancharse a algo externo sin querer preguntarse «¿por que realmente la necesito?».

Los enfermos necesitan medicamentos y drogas, los que necesitan sanarse y no pueden hacerlo mas que metiendo elementos extraños, e incluso toxicos a su cuerpo (como en el caso de la quimio) Pero no hay nada peor que estar dependiendo de un medicamento y muchos sienten enorme alivio cuando ya no tienen que consumirlos. ¿Por que alguien sano voluntariamente decide meterse una droga y luego vivir metiendose esa droga si no lo necesita realmente? Es raro hablar de libertad en esas circunstancias.

La libertad de escoger es tan sencilla: consumir drogas o no consumirlas. ¿Por que alguien escoge la primera, cuando la segunda es mejor e incluso infinitamente mas dificil de cumplir en un mundo lleno de drogas de facil acceso? ¿Que quiere evadir al no escoger la segunda opcion? ¿Que pretende probar escogiendo la primera, que es un rebelde mediocre, creyendo que la rebeldia al sistema se manifiesta en fumarse un porro? ¿Que necesita tanto ser igual que todos que tiene que drogarse porque todos se drogan?

El que consume marihuana es un ser prisionero de su vicio, igual que el que consume alcohol o el que consume heroina, o el que consume cigarrillos. Pudiendo escoger tener el vicio de leer, el vicio de caminar, el vicio de tocar flauta dulce, el vicio de pintar, va y escoge un vicio que perjudica su salud. Y por mas que intenten poner la historia de que la marihuana es menos perjudicial que el tabaco, el hecho es que es perjudicial, y eso no se borra por muchos estudios que se haga. La cuestion es de grado, no de daño.

Por eso es malo consumir drogas, no por moralinas y porque uno se ira al infierno, sino porque son una mala opcion, en que una persona muestra que tiene problemas de autoestima y de amor propio y no una autentica rebeldia ante un sistema injusto. Es incluso una opcion cobarde, de quien busca evadirse de sus problemas y no enfrentarlos, o una opcion desesperada de alguien con carencias (sobre todo emocionales). Y es una opcion muy poco informada, porque si algo hay negativo en este asunto, es que alguien consuma algo que no sabe que diablos es. Pero ¿libre? No, las drogas no tienen nada que ver con la libertad.

PS. lo que no quita que la Constitucion del 80 no tiene muy claro lo de los derechos de las personas. Ese es otro asunto.

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