Rene Flores C.
12.00
Normal
0
21
false
false
false
ES-CL
X-NONE
X-NONE
MicrosoftInternetExplorer4
/* Style Definitions */
table.MsoNormalTable
{mso-style-name:»Tabla normal»;
mso-tstyle-rowband-size:0;
mso-tstyle-colband-size:0;
mso-style-noshow:yes;
mso-style-priority:99;
mso-style-qformat:yes;
mso-style-parent:»»;
mso-padding-alt:0cm 5.4pt 0cm 5.4pt;
mso-para-margin-top:0cm;
mso-para-margin-right:0cm;
mso-para-margin-bottom:10.0pt;
mso-para-margin-left:0cm;
line-height:115%;
mso-pagination:widow-orphan;
font-size:11.0pt;
font-family:»Calibri»,»sans-serif»;
mso-ascii-font-family:Calibri;
mso-ascii-theme-font:minor-latin;
mso-hansi-font-family:Calibri;
mso-hansi-theme-font:minor-latin;
mso-bidi-font-family:»Times New Roman»;
mso-bidi-theme-font:minor-bidi;
mso-fareast-language:EN-US;}
Después de las declaraciones del entrenador de la selección chilena de fútbol, aparecen algunos diciendo que lo que hizo es incorrecto. No es posible que el entrenador, en la calidad de EMPLEADO, de su opinión sobre quién debe ser o no su EMPLEADOR. Si bien es cierto, en ningún caso Marcelo Bielsa ha manifestado quién debe ser o no el Presidente de la ANFP. Lo que hizo fue, en definitiva, colocar sobre el tapete de esta discusión un elemento más de presión, al aseverar que si Harold Mayne-Nicholls no sale electo, él renuncia. Esto para muchos es simplemente inconcebible, porque es una presión indebida y, más aún, es inmiscuirse en una decisión que no le compete.
Pero al escuchar su extensa declaración, más allá de sus problemas pragmáticos, es posible encontrar más de un argumento que es necesario revisar. Entre ellos, el primero de todos, el más evidente y tal vez por eso hasta ahora no considerado por twiteros y blogueros como es que Bielsa ha hecho, debiendo o no, un acto público no velado, transparente, que todos y todas se enteren de su particular visión respecto de con quién él puede o no puede trabajar, no sólo por las simpatías sino por los estilos.
La mayoría de nosotros ha colocado la atención sobre si tiene o no derecho a hacer lo que hizo, incluso algunos diciendo como
Patricio Navia aseverando en Twitter que lo de Bielsa es un autogolpe, por la presión que ejerce. Sin embargo, olvidan el derecho a dar opinión, en este caso fundada, en este caso con intereses de por medio, sobre cualquier hecho o situación.
Pero esta no es una opinión cualquiera, es sin duda una opinión muy particular. Proviene de quien menos goza de la fluidez y la verborrea de algunos. Es la opinión de quién tiene a su haber logros que mostrar. Es la opinión de alguien a quién no se le cuestiona su capacidad profesional. Es la opinión avalada por los hechos; a falta de fluidez en su discurso, hablan por él los resultados. Si bien los resultados no lo son todos, en este caso son más que los del resto.
Lo de Bielsa sólo es cuestionable porque es un hecho público, lo del Presidente Piñera es aceptable para muchos porque es un hecho privado. En definitiva, tenemos doble moral para juzgar las cosas. Las acciones de uno generan las reacciones de otros. Tal vez sino intentáramos manejar oscuramente las cosas, si de verdad creyéramos que las organizaciones son suficientemente maduras para tomar sus decisiones sin presiones, componendas o promesa electoreras, tal vez y sólo tal vez no estaríamos preguntándonos si lo de Bielsa es válido.
Quizás no sea válido lo que hizo, pero al parecer ERA NECESARIO, que alguien aunque sea extranjero o extrangero (como escribe el Presidente en Twitter) nos recuerde que la democracia es un estilo que debe aplicarse a todo y todos, que el verdadero poder está en los mandantes y no el mandatado.
—————————-
Comentarios