Actualmente, el sur de Chile enfrenta una de las peores sequías de los últimos 50 años. La extrema escasez de agua ha afectado fuertemente tanto a la agricultura como a la ganadería, debido a la falta de forraje. Hay animales muriendo de hambre, la producción de leche ha bajado, los precios de frutas y verduras han aumentado, y los agricultores están sufriendo enormes pérdidas. Hace poco un agrónomo que cultiva en las zonas afectadas me envió 2 fotos [1,2], en las cuales se aprecia un desarrollo notoriamente limitado en el tamaño de las mazorcas de los maíces dependientes de lluvia, en comparación a los que dependen de riego, que son de mayor tamaño (siendo de la misma variedad). Y la mayoría del maíz en el sur depende de la lluvia, ya que el sistema de regadío no es barato.
En los últimos años hemos sufrido más de un período de fuerte sequía, por lo cual cabe preguntarse: ¿Hay alguna innovación tecnológica que no estemos aprovechando y que pueda ayudar a evitar, o al menos reducir, las pérdidas? Sí lo hay, y son los cultivos genéticamente modificados (GM), que han sido diseñados especialmente para resistir el estrés hídrico y la escasez de agua.
A nivel internacional hay distintos países desarrollando cultivos GM resistentes a la sequía. En 2013 se autorizó comercialmente en Estados Unidos el primer cultivo GM con esta característica: el maíz DroughtGardTM de la polémica y odiada empresa Monsanto. Otros cultivos GM resistentes a la sequía que están investigando mayormente en universidades y centros públicos son, por ejemplo, el trigo y algodón en China, tomate en la India, papa en Corea del Sur, caña de azúcar en Indonesia y trigo en Australia. También se suma el proyecto WEMA (“Maíz tolerante a la sequía para África”), en el cual están desarrollando variedades de maíz GM resistente a sequía, las cuales serán donadas para el continente africano por la asociación público-privada que financia el proyecto. Estas variedades se comenzarán a cultivar en 2017, y se ha documentado que ayudarán a aumentar el rendimiento e ingresos económicos de los agricultores africanos.
Latinoamérica tampoco se queda atrás en este campo. Dos centros públicos de México, el CIMMYT y el CINVESTAV, están desarrollando trigo y maíz respectivamente. En Argentina, universidades y centros de investigación pública están trabajando en maíz y soya, además de trigo. Por otro lado, la empresa estatal brasileña, EMBRAPA, trabaja en caña de azúcar. ¿Y Chile? Bueno, en nuestro país hay una universidad estatal trabajando en el desarrollo de un maíz resistente a la sequía.
El Dr. Simón Ruíz de la Universidad de Talca, dirige una investigación avanzada en maíz resistente a sequía (con financiamiento público). Su grupo de investigadores lleva 15 años estudiando una planta nativa de tomate chileno del desierto de Atacama (Solanum chilense), de la cual lograron aislar un conjunto de genes que se manifiestan bajo condiciones de sequía o salinidad. Posteriormente, han trabajado en trasladar tales propiedades a plantas como el maíz, que es altamente sensible a la sequía. Tras los últimos ensayos de campo se ha reportado un alto grado de tolerancia al estrés hídrico, y las plantas GM logran una producción superior del 50 por ciento respecto a las plantas convencionales, bajo la misma condición de régimen hídrico. Este es un resultado pionero que nada tiene que envidiar a los rendimientos logrados en el extranjero.
En Chile tenemos excelentes científicos que pueden hacer cultivos transgénicos “Made in Chile”, dirigidos a solucionar los problemas de la agricultura chilena, así que tomemos cartas en el asunto antes de que sea demasiado tarde.
Un 70% del agua dulce del mundo se consume en agricultura, y durante el siglo XXI la pérdida de recursos hídricos y suelos cultivables seguirá aumentando. Además, aquí en Chile es notorio el avance de la desertificación desde norte a sur. Para contrarrestar estos graves problemas, no podemos darnos el lujo de rechazar ninguna tecnología nueva que pueda aportar. En este sentido, cultivos GM como el del Dr. Ruíz, tienen implicancias importantes, ya que permitirían realizar cultivos en suelos que no son aptos, aumentar la producción y el ingreso de los agricultores, así como contribuir a la seguridad alimentaria del país.
El consenso científico ha demostrado que los cultivos GM son seguros, además han generado enormes beneficios ambientales y económicos. Por otro lado, siempre es mejor prevenir que curar, y en lugar de gastar en enormes fondos o forraje de emergencia para los agricultores y ganaderos afectados, deberíamos permitir e incentivar que el sector público y privado inviertan en desarrollos biotecnológicos como el del Dr. Ruíz, que precisamente evitarían o reducirían las pérdidas por sequía. En Chile tenemos excelentes científicos que pueden hacer cultivos transgénicos “Made in Chile”, dirigidos a solucionar los problemas de la agricultura chilena, así que tomemos cartas en el asunto antes de que sea demasiado tarde.
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DanielNorero
Hola Juan Moraga:
* Chile cultiva maíz, soya y canola GM como semillero de exportación (no para el mercado nacional, ya que la ley no lo permite) y son eventos de resistencia a insectos, resistencia a herbicidas, o ambos combinados; aún no hay eventos de resistencia a la sequía autorizados. Como mencioné, el único cultivo GM resistente a sequía autorizado en el mundo a nivel comercial, es el maíz DroughtGard en Estados Unidos. El maíz WEMA para África, y la Caña de Azúcar en Brasil, se proyectan comercializar recién para 2017.
* Las variedades del proyecto WEMA ya han mostrado mayor productividad en los diversos ensayos de campo, y no tendrán patente ni nada de eso, serán donados a los agricultores – es un proyecto con fines humanitarios como el «Golden Rice» o la «SuperBanana» (ambos biofortificados en betacaroteno).
* Lo de los suicidios en la India » a causa del algodón transgénicos» es un mito viejo, y muy difundido por la activista anti-OGM Vandana Shiva (que culpaba al algodón Bt resistente a insectos introducido en ese país en el año 2002). Pero la realidad muestra una situación totalmente distinta. El International Food Policy Research Institute (IFPRI) se dio el trabajó de investigar este preocupante rumor, y en el 2008 publicó un informe de 64 páginas donde demostró que el nivel de suicidio de los agricultores es un problema mucho más antiguo desde que se introdujera el algodón Bt en la India en el año 2002 y que, para sorpresa, desde ese mismo año (2002) los niveles no solo no habían aumentado, sino que la tendencia al alza había terminado, e incluso, los suicidios se habían reducido levemente (http://goo.gl/89Skja).
En 2013, el Instituto Flamenco de Biotecnología (VIB) publicó el estudio «Bt cotton in India: a success story for the environment and local welfare» (http://goo.gl/nHth3j) donde analiza la experiencia del cultivo de algodón modificado genéticamente en India desde su introducción en la campaña 2002-2003, confirmando que:
1.- No hay pruebas cuantitativas o empíricas para sostener el mito de la relación entre algodón Bt y los suicidios masivos de los agricultores.
2.- El algodón Bt ha conseguido que la India pasara de ser importador de algodón a convertirse en el segundo país del mundo en producción y exportación (por el aumento de la productividad).
3.- Antes de la introducción del algodón Bt, se utilizaban 5,9 gr de pesticidas en promedio para producir un kilo de algodón. Con la versión Bt se redujo a menos de 0,9 gr por kilo producido.
4.- El agricultor indio que cultiva el algodón Bt usa menos fitosanitarios y logra incrementar los rendimientos de sus cosechas (hasta un 42% en comparación al algodón convencional).
5.- Aunque el costo del algodón Bt es un 15% mayor que el algodón convencional, aumenta los ingresos económicos del agricultor entre un 53% a un 71%.
6.- El algodón Bt reduce el uso de insecticidas (52% promedio), lo cual genera beneficios ambientales y sanitarios para los agricultores (se reduce el riesgo de envenenamiento en un 88%).
7.- El algodón Bt permite realizar prácticas agrícolas más sostenibles, lo que se traduce en una mayor diversidad de insectos en los campos en comparación con los cultivos convencionales. Muchos de estos insectos ayudan al agricultor al control de otras plagas de una forma natural.
También, un estudio del año 2011 (http://goo.gl/o38bA0) arrojó que el cultivo de algodón Bt en la India había logrado disminuir entre un 50% a un 70% las aplicaciones de pesticidas dependiendo de la región, lo cual se tradujo en la reducción de millones de casos de intoxicaciones por pesticidas. Junto a esto, el Estado Indio ahorró entre 14 y 51 millones de dólares por conceptos de atención médica de urgencia
Cabe mencionar que estos obvios beneficios han llevado a una altísima tasa de adopción de la tecnología: Un 95% del algodón de India es GM (http://goo.gl/C6tPu5). Lo de los «agricultores obligados a plantar semilla GM» es otro mito. El agricultor compara costo/beneficios, si una semilla no le es rentable, o rindió mal en la última temporada, puede perfectamente cambiar de tipo de semilla y/o semillería. A todo esto en India, no solo Monsanto vende semillas OGM, también hay empresas nacionales e instituciones agrícolas del gobierno Indio que trabajan en ensayos experimentales de berenjena, maíz, arroz, garbanzo y algodón GM – para solucionar problemas de sus propios agricultores.
– Por favor, lo de Monsanto ya esta trillado. Transgénico (una tecnología), no es sinónimo de Monsanto (una empresa). Los OGM son desarrollados no solo por empresas, sino también por universidades y centros de investigación pública, en países desarrollados y en desarrollo. Dentro de estos últimos tienes, por ejemplo, a China, India y Brasil y otros de menor magnitud como Bangladesh, Filipinas y Cuba (Sí, Cuba!), además de 10 países africanos, que están desarrollando cultivos transgénicos (con fondos públicos) dirigidos a solucionar diversos problemas de su agro.
¿Monsanto controlando la alimentación mundial? Parece que has visto muchos documentales y/o leído muchas noticias de medios como RT o «El Ciudadano». Me apesta tener que hablar de Monsanto, ya que pareciera que uno lo defiende, pero hay que tener en cuenta algunas cosas: si miramos el gráfico en este enlace (http://goo.gl/dzzFT5) se verá que las ganancias anuales de Monsanto son menores a las de que Starbucks, CocaCola o Home Depot, ademas de ser una alpargata al lado del titán petrolero ExxonMobile. ¿Como puede ser que estemos bajo el control mundial de la odiada semillera en lugar de vivir la dictadura de los MochaLatte doble con leche descremada o bajo el yugo esclavizante del bricolaje de HomeDepot? ¿Como es posible que puedan financiar a cada miembro de la comunidad científica para hablar de inocuidad alimentaria, mientras ExxonMobile no ha podido escarmentar al mas de 80% de científicos que vinculan el calentamiento global con el uso de combustibles fósiles? Y no creo que Monsanto ni los gringos estén pagándole a los cubanos o a los chinos que van como bala en el desarrollo e investigación de cultivos transgénicos para sus agricultores.
Si están en contra de ciertas empresas, entonces apoyen los desarrollos públicos. La infundada oposición de movimientos ecologistas y antiOGM ha contribuido a hacer más caro y lento el proceso de autorización de un OGM: $136 millones de dólares cuesta en promedio sacar un OGM al mercado; alrededor del 26 por ciento de esos costos ($35.100.000 millones de dolares) son incurridos por las pruebas reglamentarias y el proceso de registro. Y el promedio de tiempo desde el inicio de un proyecto de descubrimiento hasta lanzamiento comercial es de unos 13 años promedio (hasta 16 en la soya) [Phillips McDougall Study http://goo.gl/Wc3Hek%5D
Visualizando la gran inversión de tiempo y dinero necesario para crear y llevar al mercado un cultivo GM, se produce una paradoja con los movimientos anti-transgénicos, ya que su oposición contribuye hacer cada vez más difícil, caro y largo este ya engorroso mecanismo de autorización. ¿Por qué una paradoja? Resulta que solo las grandes empresas tienen una espalda financiera para aguantar este complicado y costoso proceso, y por más oposición que haya, con sus fondos van a conseguir tarde o temprano les aprueben su desarrollo a nivel comercial. ¿Pero que pasa con instituciones/empresas públicas o universidades que no tienen los fondos para resistir el mismo proceso? Obviamente se ven perjudicados ya que se les dificulta el tener mayor holgura para introducir cultivos GM a nivel comercial y equilibrar la participación en el mercado con más entidades de mayor presencia. Finalmente, los movimientos anti-transgénicos solo consiguen perpetuar y facilitar esa acumulación del mercado de semillas (en las grandes empresas) que tanto critican.
Paola Fuentes (@eklectica)
Después de la excelente argumentación de Daniel Morero (que aprovecha de desmentir muchos mitos sobre los transgénicos que aún hoy se transmiten, pero que no tienen ninguna base ni son reales), lo único que puedo agregar es este excelente enlace:
El error de cuando tu único argumento es Monsanto
http://cienciasycosas.com/2013/10/19/el-error-de-cuando-tu-unico-argumento-es-monsanto/
Y recuerden: los ‘documentales’ de Youtube no son la mejor fuente de información, la mayoría son puras conspiranoias baratas sin ninguna base sustentable.
DanielNorero
Es muy bueno ese artículo Paola – de hecho lo enlacé a la palabra «Monsanto» en la columna xD.
Agrego como complemento a la típica falacia de «que Monsanto tiene comprado a todos los científicos del mundo», que más de la mitad de los estudios de bioseguridad en cultivos GM no tienen conflicto de interés por afiliación profesional o financiamiento de los autores; puse la evidencia en esta columna previa del mostrador: http://www.elquintopoder.cl/ciencia/transgenicos-y-la-exageracion-del-conflicto-de-interes/
PD: Sobre el caso de los suicidios en India, me faltó sumar que estos se deben a variados y complejos motivos. Entre ellos, la bajada del precio del algodón en el mercado, ausencia de seguridad social, falta de créditos a bajo coste, burocracia y corrupción del gobierno (http://www.nytimes.com/2002/12/02/world/poor-in-india-starve-as-surplus-wheat-rots.html) y muy importante, una agricultura no tecnificada dependiente condiciones climatológicas extremas que no favorecen el riego (la única oportunidad son los monzones).
Ign. Rodrígue de R. (@micronauta)
La hipótesis de que los cultivos transgénicos pueden hacerle frente a la crisis hídrica es interesante, pero necesita ciencia para demostrarse y al menos números para validarse.
El elefante en la habitación es que los cultivos transgénicos no son gratis, entonces la primera pregunta que debe hacerse -independiente de preguntas también válidas sobre efectos ambientales, calidad de alimentos, etc.- es si es más barato para los agricultores mejorar sus sistemas de regadío o pasar a depender de quién le venda semillas genéticamente modificadas para resistir la sequía.
Otro punto importante de examinar es el del “consenso científico”, término del cual se ha abusado mucho en referencia al supuesto calentamiento global. No se si existe evidencia incontrovertible sobre ese supuesto consenso en este caso, y me consta después de haber profundizado en el tema climático que ese supuesto consenso no es tal.
DanielNorero
1.- Los aumentos de rendimientos varían según los eventos producidos en distintos países. En el caso chileno, los detalles específicos aún no se publican, porque están en los últimos ensayos de campo, pero la información del momento indica un 50% de mayor productividad en comparación a las líneas no transgénicas – bajo condiciones de sequía. Tuve la oportunidad de estar en una charla que dictó el Dr. Ruíz en una taller de patentes en la U. de Chile, y con los avances que han obtenido, le esta dando por lo menos unas «3 patadas» al maíz DroughtGard de Monsanto en rendimiento – por eso mencioné que es un desarrollo pionero.
2.- Obvio que no son gratis los cultivos GM. Más arriba en otro comentario mencioné que cuesta 136 millones de dólares en promedio sacar un OGM al mercado; alrededor del 26 por ciento de esos costos ($35.100.000 millones de dolares) son incurridos por las pruebas reglamentarias y el proceso de registro. Y el promedio de tiempo desde el inicio de un proyecto de descubrimiento hasta lanzamiento comercial es de unos 13 años promedio (hasta 16 en la soya) [Phillips McDougall Study http://goo.gl/Wc3Hek%5D. Es obvio que el investigador requiera un mecanismo (patente en EEUU, obtención vegetal en el resto del mundo) para recuperar lo invertido – y el agricultor lo pagará si le significa una ventaja productiva respecto al cultivo convencional.
Las patentes existen desde los años 1930’s (los cultivos GM recién desde 1996) cuando se lanzaron al mercado los primeros híbridos convencionales de alto rendimiento – que también significan un largo trabajo de tiempo y $$$ para llegar a líneas puras que mantengan lo mejor de las líneas parentales. Y los agricultores desde entonces pagan por ello, ya que un híbrido les produce mucho más que una variedad tradicional. Actualmente en el sur de Chile se usa mucho maíz híbrido convencional de empresas europeas como Limagrain y KWS – con «patente» y todo porque a los agricultores le sale a cuenta después de todo. Un cultivo GM no es más que un híbrido al que se le ha insertado un transgén (ya sea para resistencia a insecto, herbicida, sequía, etc). Así que no confundamos algo económico (patentes, invenciones, modelo productivo) con la tecnología (mejoramiento convencional, biotecnológico, transgenia, etc).
También están los desarrollos con fondos públicos, que están llevando a cabo muchos países, sobre todo en vías de desarrollo (China, India, Brasil, Bangladesh, Cuba, Filipinas, Argentina, México, 10 países africanos, Colombia, Chile, Costa Rica, etc) que son dirigidos a los agricultores nacionales.
– Sobre el claro consenso científico (y más de 2000 papers) que avala la seguridad de los cultivos GM, escribí y di la evidencia (para verificar) en este post: http://www.siquierotransgenicos.cl/2015/01/02/que-dice-la-evidencia-cientifica-sobre-la-seguridad-de-los-cultivos-y-alimentos-transgenicos/
Christian
Si lees Climate Depot (escrito por un abogado pagado por la derecha extrema de EEUU) claro que pensarás que «no hay consenso» sobre el calentamiento global. Si lees fuentes verdaderamente científicas, es decir, basadas en publicaciones en revistas revisadas por pares, con metodologías abiertas al escrutinio profesional, verás que no solo es un hecho indesmentible, sino que además es más grave de lo que se pensaba http://www.ipcc.ch/pdf/assessment-report/ar5/syr/SYR_AR5_FINAL_full.pdf
PabloFraserM
Excelente columna, muy informativa. Pensar que hay tanta gente que cree que lo transgénico es horrible casi consumir veneno, y estos serán los que nos salvarán. Sigue así para que se acabe la ola de magufos pro-orgánicos que sólo hacen crecer temor en la sociedad.
Ricardo Esparza
«Chile sin Transgénicos», «Yo No Quiero Transgénicos en Chile» y movimientos como esos hacen mucho daño en oponerse sin fundamento alguno a los cultivos transgénicos. Ellos, los políticos ignorantes que nos gastamos y los «eco-hippies» (que reclaman desde un iPhone tomandose un café -con leche orgánica- en StarBucks) son los responsables de que los agricultores no puedan usar una herramienta que les ayudaría en casos graves como las sequías. Si los magufos no quieren modernizarse bien, pero no jodan al resto, ni menos cuando de por medio esta el sustento de vida de alguien (agricultor) y la seguridad alimentaria del país.
Bosques, agua y transgénicos: Los desafíos de una agricultura intensiva que sea sustentable » Sí Quiero Transgénicos
[…] y que es el responsable de la tolerancia de este maíz a condiciones de estrés hídrico. En este enlace se mencionan cultivos GM resistentes a sequía que se están desarrollando en Latinoamérica y […]
juan e.moraga
En Chile la gran mayoria de la semilla de maiz es transgenica desde hace mas de 20 años,en cuanto al regalo para Africa es otra falacia recordemos los cientos de agricultores de la India que se suicidaron por las deudas obligadas que tenian con Monsanto,como tambien cuando un agricultor se negaba a sembrar estas semillas los obligaban con artimañas como tirar semillas transgenicas en sus tierras para despues hacerles un juicio por apropiacion de estas y les quitaban las tierras para ellos seguir sembrando sus semillas transgenicas,es realmente preocupante como Monsanto con el gobierno norteamericano estan tratando de manejar la alimentacion a nivel mundial y asi poder hacer lo que quieren.