Se intenta dilucidar el estrecho vínculo entre la violencia y las intromisiones de poderes económicos que buscan prosperar sin considerar los contextos en que lo hacen, motivando una serie de fenómenos sociales caracterizados por la degradación de sectores vulnerables, entre ellos la violencia de género, los pueblos originarios o las invasiones justificadas por mero afán económico, arrebatando a la vida su sitial de importante necesidad, junto a los principios fundamentales de Libertad e Igualdad.
Comentarios
27 de febrero
En Chile reina la corrupción, la soberbia y la violencia porque hace mucho tiempo perdimos la democracia. En otras palabras, no creo que sea posible que en un país justo, inclusivo y participativo, gobernado realmente por los trabajadores, fiscalizado por esa misma mayoría, pueda producirse semejante depravación, preversión y vicio, no por lo menos en el grado que existe en el sistema político administrado y defendido por la derecha duopólica.
El neoliberalismo es corrupto y reaccionario porque es antidemocrático. La relación que éste establece entre los dirigentes y funcionarios públicos y la patronal, entre la política y el dinero, llega a tal nivel que tarde o temprano el régimen nos conduce a un Estado fallido en el que priman los intereses de una plutocracia que usufructúa la voluntad popular y los derechos de todos. En nuestro país la única alternativa para acabar con esta farsa es la Asamblea Constituyente Autoconvocada. El desafío es tremendo pero necesario y urgente.
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