La masificación de internet y la explosión de plataformas sociales puso en manos de la ciudadanía una bocina que si se sabe usar puede alcanzar niveles sorprendentes.
El "marquismo" ocupó internet como trampolín para luego convertirse en el mayor dolor de cabeza de la Concertación, pero los que fueron testigos del fenómeno MEO desde el principio deben entender de lo que hablo respecto a su base de apoyo.
El ejemplo óptimo del poder de un social branding (algo así como la construcción de una marca social), está en Yoani Sánchez. Colega cubana de 34 años, que no ha necesitado más que su blog para convertirse en la enemiga mediática número uno del régimen de los Castro.
Ellos -era que no- ante esta amenaza bloquearon su blog Generación Y en la isla, pero poco le importó porque a través de amigos fuera de Cuba, mantuvo la publicación de sus columnas. Si tenía suerte enviándolas por correo electrónico o simplemente dictándolas por teléfono.
Hace unos meses estuve en La Habana y el acceso a internet para turistas en los hoteles existe por un módico costo para el extranjero, pero la lentitud de la conexión recuerda a la que teníamos años atrás en Chile, que terminaba cuando la mamá levantaba el teléfono y escuchaba un extraño ruido.
Posiblemente el teléfono es más eficiente que esperar la buena voluntad de un turista con el saldo de minutos, correr el riesgo de ser detenida y para colmo tener que lidiar con la somnolienta transferencia de datos.
Con todo, ella mantiene su rol. Se las arregla para decir lo que piensa, denunciar los abusos del régimen y buscar complicidades en el mundo. Y cómo no si su blog está disponible en 17 idiomas.
La revolución vino por ella un día. Estuvo detenida unas horas, fue advertida, amenazada y ella los llamó "cobardes" y publicó la historia en su blog para denunciar el hostigamiento.
Premiada por doquier y reconocida por Times como una de las 100 personas más influyentes del mundo… ¡con un blog!
Por eso aplaudo hoy este nuevo espacio para personas como ella, como yo, como tú. Hoy, cuando los medios de comunicación tradicionales están en manos de unos pocos, internet es una bocanada de aire puro.
Pero el espacio por si mismo no tiene sentido si no lo usamos. Hay que alimentarlo para que para que los que recuperaron la democracia y luego se olvidaron de lo que eso significaba, no vean esto como el "juguetito de moda de unos geeks" sino que como el catalizador de un debate, de nuevos liderazgos, no por compadrazgos ni parentelas, sino que por las ideas.
Comentarios
18 de abril
Estoy muy de acuerdo, Este es un claro ejemplo del valor que debemos darle a Internet, aunque para muchos la «democracia mediática» debilita la calidad de la política… Sea como sea, esta es concretamente la forma de comunicación y la herramienta intermediaria entre el poder y los ciudadanos, ya que quienes tienen esta responsabilidad -los partidos políticos- no la hacen efectiva.
Creo que hoy ya no importa cuantos militantes tienen las colectividades… sino la relación y presencia en medios como estos, su capacidad de respuesta y transparencia. Eso genera recordación y será lo que los lleve al éxito, esa es la forma de publicidad con la que deben abanderarse… creo que no hay comparación entre el efecto de una cuña y el efecto de un replay sincero en twitter.
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