Stop Mutilaciones de niñes intersexuales

Mi especialidad como consejera en sexología y resiliencia es el acompañamiento de mujeres que han sufrido violencias sexuales y mutilaciones sexuales.

Escuchar testimonios dolorosos y dificultades sexuales, comprender, empatizar guardando mi rol, proponer perspectivas para asimilar traumas sexuales es mi trabajo. En principio cualquier sexoterapeuta podría hacerlo.

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Escuchar, comprender, resonar emocionalmente, respetar la diferencia, no debería ser una dificultad mayor para ningún profesional de la salud.

En cia-oiifrance.org podemos leer muchos artículos. El que más me impresionó fue (traducción) Basta de mutilaciones intersexuales. El nombre de la página no puede ser más claro: stop-mutilations-intersexes.org

Lo que personalmente pido a cada colega sexólogo y sexóloga no es hacer un Doctorado en Intersexualidad. Le pido simplemente leer testimonios y escuchar lo que dicen las personas intersexuales.

Sus experiencias son traumáticas. Sentirse ratón de laboratorio, sentirse «objeto de estudio» es terrible.

No hay que pasar meses leyendo para enterarse que las operaciones pueden crear sufrimientos psicológicos graves y provocar patologías que no hubieran existido sin las intervenciones médicas.

¿Cuál es el problema para aceptar el 1,7% de la población mundial? ¿Cuál es el problema de aceptar que hay seres humanos que no entran en las categorías binarias «hombre» o «mujer»?

En realidad, el problema no existe en los cuerpos de las personas intersexuales. El problema no está en sus cromosomads, sus genitales, sus gónadas o sus producciones hormonales. El problema está en el autoritarismo de algunos que se creen con derecho a imponer una idea de lo que debe ser un cuerpo, cueste lo que cueste.

Escuchar, comprender, resonar emocionalmente, respetar la diferencia, no debería ser una dificultad mayor para ningún profesional de la salud.

Las personas intersexuales nos esperan con sus peticiones.