La necesidad de permisos para la realización de exámenes médicos

Este domingo, el gobierno anunció su plan “Paso a Paso”, con el que busca avanzar hacia un “desconfinamiento” gradual. Aunque se entregaron los criterios técnicos que serán empleados para determinar cuándo se dará cada “paso” y en cuáles comunas, está por verse la reacción de la comunidad médica y académica, así como la de otros sectores. Mientras tanto, muchas comunas tendrán que seguir viviendo en el “Paso 1”, en medio de una cuarentena que se extiende por varias semanas y que ha visto cambios en los permisos individuales que permiten a las personas poder realizar algunas actividades mínimas de carácter esencial.

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Resulta sencillamente incomprensible que no exista hasta la fecha un permiso individual especial que permita a las personas la realización de exámenes médicos

Resulta evidente que la vigilancia de las enfermedades crónicas es, quizás, una de las necesidades más esenciales en medio de la pandemia. Una creciente literatura científica muestra que la existencia de ciertas condiciones médicas pre-existentes puede ser determinante para el progreso de un cuadro de COVID-19, incluso correlacionándose con un mayor riesgo de mortalidad. Una de las evidencias más recientes se publicó hace solo unos días en la revista Nature, en un estudio con datos de poco más de 17 millones de personas.

En consecuencia, resulta sencillamente incomprensible que no exista hasta la fecha un permiso individual especial que permita a las personas la realización de exámenes médicos. El actual permiso de asistencia a establecimientos de salud tiene una duración acotada y requiere el cumplimiento de ciertas formalidades. En el caso del permiso para asistir a una hora médica, por ejemplo, se requiere adjuntar el nombre de un médico y la hora de la cita médica respectiva. Sin embargo, para un paciente que requiera hacerse exámenes de sangre, por ejemplo, no solo no es posible proveer el nombre del médico que realizará el examen (entre otras razones, porque algunos exámenes son realizados por otros profesionales de la salud, y para el paciente es imposible conocer de antemano el nombre de la persona que lo atenderá), sino que además la atención se realiza por orden de llegada, y no existe en todos los casos un comprobante de “hora agendada”.

Además, si bien podría resultar comprensible otorgar un período de tres horas para asistir a una cita médica agendada con antelación, en el caso de los exámenes médicos existen situaciones en las que sería deseable contar con un permiso con una duración mayor. Por ejemplo, ¿qué ocurre en los casos de personas que viven en pueblos pequeños, y que deben asistir a capitales regionales o provinciales para realizarse exámenes? Supongamos, por ejemplo, el caso de una persona que vive en la comuna de Las Cabras y debe asistir a la ciudad de Rancagua (actualmente en cuarentena), ya sea porque el examen que debe realizarse no está disponible en su comuna o por solicitud de su médico tratante. Por otro lado, en el caso de algunos exámenes se atiende a los pacientes por orden de llegada, y se requiere realizar diversos trámites, previo a la realización del examen mismo. A ello se debe sumar el tiempo de desplazamiento desde y hacia el domicilio respectivo. Si bien se podría pensar que esta incertidumbre podría resolverse acudiendo a los canales de información disponibles, obtener algún tipo de información a través de dichos canales puede resultar difícil. Ni siquiera el actual “Instructivo para permisos de desplazamiento” incluye instrucciones acerca de cómo proceder en el caso de la necesidad de la realización de exámenes médicos.

Es posible que, observando lo que ha sucedido en otros países (en los que el “desconfinamiento” ha sido seguido por rebrotes y nuevas medidas de confinamiento), en nuestro país los “retrocesos” en el plan “Paso a Paso” sean posibles, e incluso frecuentes. Es por ello que no solo debemos pensar en el eventual desconfinamiento, sino que también debemos perfeccionar las actuales restricciones de desplazamiento (las que, después de todo, forman parte del “Paso 1”). Por otro lado, demás está decir que pueden existir personas que se encuentren viviendo situaciones de salud delicadas y que requieren la vigilancia de su condición, lo que implica la necesidad de exámenes periódicos. La imposibilidad de realizar una vigilancia adecuada de dichas condiciones puede implicar su agravamiento o incluso conllevar a desenlaces peores.

Dado este contexto, resulta evidente que las autoridades o bien no han advertido la necesidad de un permiso especial para exámenes médicos, o bien estiman (equivocadamente) que este no es necesario. Ante la inexistencia de dicho permiso, algunas instituciones parecen haber comenzado a implementar un sistema de agendamiento de exámenes médicos, con el fin de ofrecer a la ciudadanía un documento que permita cumplir las formalidades del actual permiso de “Hora Médica”. Sin embargo, esta iniciativa es aún inicial, se encuentra limitada a solo ciertos tipos de exámenes, y no ha sido replicada masivamente. Es más deseable que la autoridad habilite una opción en la Comisaría Virtual, con el fin de permitir a toda la ciudadanía la vigilancia necesaria de su salud en el actual contexto sanitario, toda vez que el “Modo Covid” posiblemente nos acompañará por un largo tiempo.