La senadora UDI, Luz Ebensperger, respecto de la legislación por el matrimonio igualitario, afirmó que «La filiación homoparental no está permitida por la biología. Esto es muy peligroso. Hay cosas que son distintas porque la naturaleza lo ha hecho así» (sic). La senadora comete la falacia naturalista al
prescribir deontológicamente cómo estima que debiera ser la realidad en base a lo que la ciencia se limita a describir de ella. Además, la filiación es un derecho emanado de una doctrina legal positiva, no de la filogenia ni reproducción biológica. Recordemos que en su sector se opusieron profundamente a la filiación de hijos biológicos. ¿Acaso encontraría peligroso que combatamos con medicina al coronavirus que la naturaleza hizo así?Recordemos que en su sector se opusieron profundamente a la filiación de hijos biológicos.
Hay mitos como la descendencia de toda la Humanidad a partir de la cruza de una única pareja y sus hijos, el embarazo virginal y la resurrección, que sí se contradicen con el conocimiento biológico. ¿Estaría ella dispuesta a prohibir su enseñanza en las escuelas y a evitarlos en los programas de educación sexual?
Si realmente pretendiera legislar basándose en ciencia, debería empezar por entender que la naturaleza no es ni teleológica ni agencial, que existe la diversidad sexual en humanos y que sí les nacen sentimientos de amor tanto a su pareja como hijos. Lo peligroso es negarles sus derechos civiles y precarizar aquella infancia para la que hay dispuesto un nido de amor. Esa injusticia sí que la cometemos nosotros.
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