Harald Beyer no es Yasna Provoste. El no sale de la administración pública para enfrentarse a la angustia del desempleo o al oprobio de sus antiguos compañeros. Muy por el contrario, él vuelve al mundo privado de donde salió y de donde quizá el mismo se arrepiente de haber salido.
Independientemente de las dos posturas acerca de la destitución del otrora ministro de educación Harald Beyer – triunfo de la calleo politiquería de la Concertación – no debemos olvidar que, a pesar de todo, el gran ganador es el propio exsecretario de Estado.
Harald Beyer no es Yasna Provoste. El no sale de la administración pública para enfrentarse a la angustia del desempleo o al oprobio de sus antiguos compañeros. Muy por el contrario, él vuelve al mundo privado de donde salió y de donde quizá el mismo se arrepiente de haber salido.
Beyer cuenta con el respaldo de todo su sector, el mismo sector que es dueño del sector privado. Después de unas semanas para sacarse de encima el estrés, lo veremos ocupando alguna gerencia y seguro aparecerá sonriendo en las páginas sociales de El Mercurio en algún evento corporativo.
El exministro de educación ahora tiene la excusa perfecta para correrse de la extensión de los trabajos de verano, que es para su sector el servicio público, y ya no tendrá que ajustar su familia a los sueldos reguleques de la administración del estado. Ya ni Sebastián, ni ningún otro personero de su sector, le pedirá que asuma algún cargo en ninguna parte, porque está convenientemente inhabilitado.
Ahora comienzan para el exministro nuevos tiempos, tiempos de dedicarse a las cosas privadas, porque las cosas públicas siempre han sido, a fin de cuentas, una cuestión del medio pelaje o derechamente de los rotos. Llegó a este momento mostrando la hombría del macho alfa que no se doblega, ni renuncia ante las presiones de la rotancia, ni de las masas más o menos organizadas que se tomaron la calle en contra de su gestión. Ha quedado bien ante sus pares que son lo único que le importa, porque al resto de nosotros puede pasarnos por la parte menos digna de su cuerpo porque no importamos, porque no generamos lucro ni, en rigor, controlamos nada. Ahora el exministro ha salido convenientemente de la lupa del escrutinio público, y puede entregarse a la mantención y crecimiento del sistema desde un puesto en el que estará lejos de los molestos controles estatales.
Ha sido un juicio sin prisionero, una mera sanción moral a un sistema que no le gusta a nadie y que nos fue impuesto por la fuerza, pero el sistema seguirá ahí, incólume y entregando, a la mano invisible que rige el mercado, el futuro de millones de chilenos jóvenes que tienen que estudiar y de chilenos viejos que tienen que jubilar. Sin embargo, tal vez esta destitución, pedida desde la calle,-a la que tuvieron que sumarse también personeros de la Oposición que tienen sus manos bien metidas en la educación con lucro-, sí haya servido para algo. Tal vez este no sea un gesto vacío después de todo y tal vez sea el primer atisbo de un verdadero abandono de los amarres pinochetistas…pero sea como sea, queda claro que el señor Beyer es el gran ganador y el héroe para la gente que importa, porque el resto de nosotros todavía no le importamos.
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http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=_uoH87kpAEA
Comentarios
19 de abril
LOS EXPERTOS…PODERES FÁCTICOS DE UNA DEMOCRACIA FORMAL.
Surgieron hace alrededor de unos 30 años más menos más, desde alguna academia, alguna corporación, de algún instituto de investigación, de alguna ONG, o de algún centro de poder, remplazando o acompañando a los gestores del poder político público o a la sociedad civil.
Son transversales y generalemente tienden a ser corporativos. Y cuando alguno de ellos, está en peligro, no escatiman esfuerzos en ser solidarios, rasgando vestiduras de lo mucho que saben o de lo mucho que han aportado al país. Manifestando por ejemplo: “ES EL QUE MÁS SABE DE EDUCACIÓN”.
Generalmente tiene apellidos que se asocian a la meritocracia. Han sido Jefes de Proyectos y han postulado a todos los fondos de investigación existen. Han hecho del sentido común su fuente de inicio y han terminado adornado al poder establecido. Caminan por las calles observando el comportamiento de la gente, más le tienen temor al poder de la calle.
Llegan a los encuentros partididarios, a los seminarios, a los encuentros nacionales, dando “las luces”, para que dos o tres comentaristas traduzcan sus códigos crípticos, a los que están en la platea y a los estan en la tribunan. Estos, a lo más, pueden formular alguna pregunta, y sin mucho preámbulos. O también, al inicio de la exposición, se reparten tarjetas pequeñas para hacer preguntas.El experto con un estilo doctoral elige la más amigables y responde como un “pez en el agua” . Luego, algún comentarista, o el mismo experto, realiza un resumen de lo expuesto o de lo “debatido”. Y posteriormente, los asistentes son convocados a 15 minutos de “BREAK”o al final del evento a un cocktail. Y si este es opíparo, más, importante es el evento. Y si al final, regalan algún libro el acontecimiento es inefable.
Han sido favorecidos por los tiempos que vivimos. Pues, han tenido tiempo libre, para seguir el hilo de los mercados financieros y del conocimiento. Se han desarrollado , a la sombra de la tecnología, y se han transformado en sacerdotes y sacerdotizas, depositarios de la verdad casi absoluta. Son simpàticos y locuaces, a veces, sorprenden al auditorio con “alguna salida”. Pueden tartamudear y pronunciar no muy fluidamente, pero como cada palabra es como un fósforo encendido, son perdonados y adorados. Por naturaleza son lobbistas y buenos para capturar el talento a otros.
Digamos también las “cosas como son”. Estos expertos no necesariamente son “manejadores del conocimiento” propiamente tal. Muchos de estos son elegidos por sus redes o por saber estar en el momento preciso, y en el lugar indicado.
Los expertos… poderes fàcticos de la democracia formal existen. Mas, cuando los ciudadanos, se van transformando en actores, es muy probables que se puedan ir extinguiendo.
Olivillo
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19 de abril
Que poco objetiva su reflexión,esperé hasta el final un dato real y no conclusiones resentidas y generales nada más,una referencia,un dato documentado,alguna empresa,bien o servicio para el juicio «valórico/político» que hace a Beyer justificando su análisis,cero. Se hace necesario separar nuestro resentimiento íntimo de opiniones públicas que merecen muchos más.Mi sensación es la misma suya estimado,sin embargo,queda en mi fuero personal e intento informarme y humildemente informar objetivamente. Muy mediocre,saludos.
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19 de abril
Bastante desafortunado el articulo, deja ver su odiosudad contra los sectores privados, justificando en algo el estatismo, como si fuera la solución reverencial a todos los problemas educativos, como si las municipalidades administradas por años por alcaldes concertacionistass fueran ejemplo de buena administración lo que hoy es comprobadamente lo contrario , o como si cuando la educacion fue publica alcanzo la cobertura total y con calidad esio nunca fue ni podra ser el Estado no es ni sera capaz solo de absorber este problema y menos entregar una educación de calidad para todos, en eso ilusionan a las masa con fines finalmente políticos electorales
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19 de abril
Bastante desafortunado el articulo, deja ver su odiosidad contra los sectores privados, justificando en algo el estatismo, como si fuera la solución reverencial a todos los problemas educativos, como si las municipalidades administradas por años por alcaldes concertacionistass fueran ejemplo de buena administración lo que hoy es comprobadamente lo contrario , o como si cuando la educacion fue publica alcanzo la cobertura total y con calidad eso nunca fue ni podra ser. el Estado no es ni sera capaz solo de absorber este problema y menos entregar una educación de calidad para todos, en eso ilusionan a las masas con fines finalmente siempre políticos electorales
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22 de abril
esto es un articulo de periodismo, o un panfleto penca
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