En Chile, ¿existen seres humanos superiores a otros? ¿Alguien podría justificar que hoy en día hay personas que cuentan con todos sus derechos humanos, mientras que a otras se les niega incluso acceso a ellos? El primer artículo de la Constitución Política de ninguna manera establece que solo las personas heterosexuales o cisgénero mayores de edad nacen libres e iguales en dignidad y derechos. Al contrario, establece que las personas nacen libres e iguales en dignidad y derechos. Entonces, ¿cómo seguimos justificando que las leyes que actualmente nos regulan como población van en contra del 1er artículo de la Constitución que supuestamente nos incluye a todxs? En el día de los Derechos Humanos es inconcebible que a pesar de que Chile es un país diverso, multicultural y democrático no exista plena igualdad de derechos humanos para toda persona.
Es insólito e inaceptable que el avance en materia de derechos humanos aún esté siendo tratado como meros acuerdos políticos en lo legislativo, y más grave aún es que a la vez dependan del “convencimiento” de quienes toman las decisiones, sean ellxs del Senado, del Parlamento o del Ejecutivo. Esta inequidad se evidencia incluso por la Corte Suprema, al enviar informes que dejan claro la deuda del Estado en materia de DDHH. Comenzando con el informe sobre la exclusión arbitraria de los convivientes civiles que hayan contraído el Acuerdo de Unión Civil en el proyecto de una Reforma a la ley de Adopción; siguiendo con el informe sobre la Ley de Identidad de Género y la posibilidad de establecer un mecanismo administrativo; y finalmente el informe sobre la deuda del Estado con el Matrimonio Igualitario.Garantizar los derechos humanos equitativos de cada persona es obligación del Estado. Los derechos humanos están por sobre cualquier opinión personal, política, social, prejuiciosa, suposición o ideología.
Luego de estos informes se hace público que la Senadora UDI y Presidenta de la Comisión de Derechos Humanos Jaqueline Van Rysselberghe quiere poner una queja formal contra la Corte Suprema hablando defendiendo procesos en “nuestra democracia”. ¿A qué democracia se refiere la Senadora cuando los derechos fundamentales de toda persona son denegadas por meros prejuicios personales de algunos? ¡Eso no es y nunca ha sido democracia!
El hecho de que la Corte Suprema se haya pronunciado es una señal positiva, pese a quien le pese, es nuestro máximo tribunal y se ha pronunciado por los derechos civiles equitativos. Jacqueline Van Rysselberghe, en su desesperación, alude que a la Corte Suprema no le corresponde opinar sobre procesos legislativos. ¿Desde cuándo dejó de existir la libertad de expresión, el minuto en que a ella y a la UDI no les conviene? Porque al minuto de expresarse contra los derechos igualitarios no tiene pelos en la lengua en expresarse y usar su libertad de opinar.
Garantizar los derechos humanos equitativos de cada persona es obligación del Estado. Los derechos humanos están por sobre cualquier opinión personal, política, social, prejuiciosa, suposición o ideología. La vulneración de derechos humanos es insostenible, no podemos estar orgullosxs de vivir en un Chile donde se discrimina y se reservan los derechos como beneficios para solo algunxs o se crean leyes diferentes para personas diferentes. ¡Basta ya! Por lo mismo queda muchísimo trabajo por hacer y derechos por luchar. Cierro con una reflexión sobre nuestra realidad en la práctica y en lo concreto, Chile no es para todxs.
Comentarios
11 de diciembre
Qué prejuicios los suyos, Claudia, al decir que Chile no es para todos. Si fuera así, ya debiera usted vivir en Alaska, supongo. ¿Quién espera que la tome en cuenta si usted sintetiza de esa forma sus pensamientos?…
Además, me parece que usted se contradice, o yo no entiendo bien. Primero dice que Chile es un país democrático. La verdad no puedo imaginar cuál es la razón por la que usted dice eso. Luego, hace una referencia a una senadora de la mafia de la UDI y dice que sus expresiones, interpreto, no representan la democracia…
Le hago notar eso sí, que la senadora dijo, según usted, «nuestra democracia» y yo interpreto que se refiere a la democracia de la mafia de la UDI, porque si no, no me imagino a qué democracia se refiere la senadora, lo mismo que tampoco entiendo a qué democracia se ha referido usted al decir que Chile es un país democrático…
¿Podría explicar?…..
Aparte de eso, tal como su caso, he leído a otras personas hablando de derechos incumplidos y me pregunto, para ellos mismos, o bien para usted en su caso, ¿qué derecho no puede ejercer?…
Hasta donde puedo imaginar, todos tenemos derecho a sentarnos en la plaza, a caminar por la calle, a comprar en una tienda, a mirar lo que queramos, escuchar lo que sea de nuestro gusto, comprar una casa, transitar en vehículo, meternos el dedo al ojo… ¿Qué derecho a usted no se le permite ejercer?…
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13 de diciembre
Ella dijo específicamente… «No me permiten ejercer el derecho a proteger a mi familia».
Porque si la lectora no lo ha notado, la nota es escrita por una mujer con una familia «LESBOPARENTAL».
Le explico que es una familia compuesta por dos mujeres, las cuales cumplen todas las funciones emocionales, economicas y sociales respecto de uno o mas hijos que las reconocen como figuras maternales a ambas.
13 de diciembre
Eso que escribió la autora y que usted cita, Carolita, es muy vago…
Además, si usted dice que se «cumplen todas las funciones emocionales, económicas y sociales», respecto de esa familia, o en general una familia “LESBOPARENTAL”, eso se contradice con lo que usted citó que escribió la autora, porque no todas las funciones se estarán cumpliendo si la autora dice «No me permiten ejercer el derecho a proteger a mi familia»…
Por otro lado, ¿qué significa el derecho a proteger a la familia, o más bien a los hijos?… ¿Protegerlos de quién, quiénes, o de qué?…
Mire… Yo creo que a esta altura de los hechos y la historia que hemos forjado en el país, se han sumado nuevos actores a la vida social y política que antes no existían. Por ejemplo, se sabía que existía la mafia política. Luego apareció la mafia social y por último creo que ha aparecido la mafia del MOVILH…
Es decir, si la autora hace una proclamación de que sus derechos aquí y allá «no son respetados» y no especifica qué derecho no le son respetados, su discurso perfectamente puede constituirse en cualquiera de la mafia del MOVILH que patalea por una y otra cosa y que nadie le asegura a la gente que no son otra cosa más que lo mismo que fue la mesa social que se constituyó luego en la mafia social…
Entonces, ¿en qué momento los artículos tipo MOVILH son sólo artículos personales y no otra apología de la que debamos defendernos?…
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