Este tipo de declaraciones sólo quedarán en la órbita de las especulaciones, en las retinas de quienes con asombro lo presenciamos y en el inconsciente de quienes poca atención ponen al fondo de las cosas.
A eso de las nueve de la mañana del ocho de agosto, el Subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, esboza las primeras críticas en lo que sería un día repleto de declaraciones y opiniones en relación a los disturbios producidos por la marcha estudiantil. Los responsables frente a cualquier problema que surgiera durante el desarrollo de la marcha –planteaba Ubilla- serían quienes convocan y adhieren, es decir, “los estudiantes secundarios y el señor Boric”.
Ya sabemos lo que ocurrió en esa jornada y cómo revolucionó a la opinión pública. Pero poco importa hablar de eso, al menos en esta columna. Lo que nos convoca es retratar el error fatal en el que incurrió Gabriel Boric y la responsabilidad que debe asumir él y, en general, su entorno; asesores, colaboradores, etc.
A pocas horas del transcurso de la marcha, el Presidente de la FECh esgrimía sus primeras declaraciones: “Lamento profundamente lo que está sucediendo hoy día en las calles de Santiago, pero la responsabilidad de esto es por la indolencia y el silencio del gobierno frente a las propuestas del movimiento estudiantil, en particular del ministro Beyer, porque insisto, nosotros hemos buscado todas las maneras de diálogo posible”. Pero el temple racional de sus dichos fue interrumpido, inexplicablemente, por un lapsus comunicacional al que generalmente se le denomina “declaración desafortunada”; “creo que quema de micros es montaje. ¿Qué hace una micro vacía en medio de la calle justo mientras se tramita ley Hinzpeter?” decía Boric en su cuenta twitter. No pasó mucho tiempo para que las redes sociales, medios de comunicación y autoridades públicas reaccionaran.
Tras una semana, el desarrollo de este acontecimiento termina en un mea culpa por parte de Boric, que no es más que la consecuencia nefasta de un error innecesario, y que el ministro Chadwick con astucia no desaprovecha, endosando implícitamente la responsabilidad de todo un descontrol estudiantil reflejado en desmanes y violencia permanente. Más claro que echarle agua: la fisura fue monumental.
Lo realmente lamentable es que el error comunicacional que comete el dirigente es de aquellos que poco se entiende, de esos que por donde se le mire calza perfectamente bajo el lente de las primeras impresiones, pero que caen al tiempo por no tener columnas firmes que logren sostenerlo. Porque incluso puede que Boric tuviera razón. Se escucha lógico si tenemos en cuenta algunos episodios vergonzosos ocurridos en movilizaciones anteriores y protagonizados por las fuerzas de orden público. Pero hace tiempo ya que la lógica, como disciplina de estudio, dejó de ser efectiva y ampliamente utilizada. En consecuencia, este tipo de declaraciones sólo quedarán en la órbita de las especulaciones, en las retinas de quienes con asombro lo presenciamos y en el inconsciente de quienes poca atención ponen al fondo de las cosas.
El lamentable traspié de Boric derivó en dos consecuencias claras. Terminar por debilitar posiciones y credibilidades, lo que es trágico en un modelo de medios dominado claramente por sólo una de las opciones políticas, donde cuesta hacerse camino para expresar lo que se piensa, por muy coherente que ello sea. Y en segundo lugar, dar espacios para que aquellos que poco y nada aportan al debate y al diálogo terminen por imponer sus puntos de vistas e ideas.
Muchos podrán haber escuchado la frase “mejor pedir perdón que permiso”, pero en un contexto como el actual, atento a las vacilaciones comunicacionales y la importancia de la identidad e imagen, no es precisamente ésta la regla general.
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Foto: Carlos Fuentes / Licencia CC
Comentarios
15 de agosto
Preciso y Contundente el artículo, se agradece la claridad..
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15 de agosto
Muchas gracias.
15 de agosto
Buena secuencia de lo que sucedió ese día, pero era obvio, tanto Boric como cualquiera de los que presenciamos el hecho sabemos perfectamente esas micros quemadas iban vacías, fuera de recorrido, y además eran tres micros en Bustamante y calle por la cual no hay recorridos troncales de buses.
Mira este video, el gordito que hasta con guantes prepara todo para la quema de uno de los buses, acá no hay dudas que todo esto sí fue Montaje, esto es la verdad de lo que sucedió: http://youtu.be/F5Q6aFLs3sU
Si tú dices que Boric está mal asesorado, al menos podría haber mantenido silencio, porque todo lo que pasó, terminó por hundir más el movimiento estudiantil.
Saludos!
@PipeHenriquezO
+3
16 de agosto
Claro. Independiente de que sea cierto o no, la forma en que Boric trasladó sus declaraciones a la opinión pública terminó por encasillarlo en un mea culpa que no es más que la consecuencia de un error innecesario.
Coincido contigo, lo sucedido mal le hace al movimiento estudiantil.
07 de diciembre
No me parece el momento adecuado de recordar este episodio, responsabilizando a Boric. No hagan con Boric lo que él hizo con Camila: enrostrarle su militancia. No me gusta este artículo, menos viniendo de quien viene. Sumar fuerzas, o no?
Yo estuve ahí, Boric tenía razón.
15 de agosto
La autocritica que debería hacerse es sobre su oportunismo electorero lleno de intereses reaccionarios, que lleva a los estudiantes a un abismo. Cuando la lucha tiene que ser por educación gratis y democrática que es lo que realmente queremos los estudiantes
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16 de agosto
Va incluso más allá. No obstante lo que comentas va de la mano con tener al menos un borrador con objetivos que todo dirigente debe construir, y en la medida de lo posible no apartarse de ello, de lo contrario se termina generando una sensación que bien graficas tú: un abismo.
17 de agosto
Espero no encontrarme con este tipo de columnas si es que un día hay un estallido social en serio. Quemar tres micros pasaría a ser una anécdota inocente, y pocos tendrían la decencia analítica de culpar a un dirigente estudiantil por la violencia.
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20 de agosto
Estimado, si lo que planteas es que de mi análisis se desprende el culpar a Boric por la violencia producida en manifestaciones, lamento decirle que está muy lejos de ser cierto.
Básicamente me detengo a señalar que las disculpas de Boric no son más que la consecuencia de un error comunicacional innecesario y que produce efectos claros y precisos. Lo ideal sería que se abstuviera de cometerlos, dado que mal le hace a la movilización social.
Saludos.