´´No hay sequía, ¡hay saqueo« una frase desafortunada

Cuando Rodrigo Mundaca, quien es un reconocido e influyente activista que lucha por la recuperación de las aguas para las comunidades y vocero del Movimiento de Defensa del Agua la Tierra y la Protección del Medio Ambiente (Modatima), dijo durante una entrevista: “En Chile no hay sequía, ¡¡hay saqueo!!”. Palabras que han demostrado ser un buen eslogan publicitario, al ser una frase clara, breve y pegajosa pero, y algo que no buscaba su autor, la frase conduce a una idea equivocada, su gran error está en comenzar negando la sequía y tiene justificados motivos con lo que sigue, al nombrar el saqueo como principal causa de la escasez del vital elemento.

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Lo que justifica utilizar el término “saqueo”, es que el derecho de aprovechamiento de agua es privado y el Estado está limitado en sus facultades para decidir su gestión

La evidencia habla que los grandes empresarios agrícolas y mineros priorizan el consumo de agua para sus industrias y dejan de lado la requerida para el consumo humano, quizás, esperando que la gente migre del lugar y les deje todo a ellos. Esta forma de actuar evidencia la crueldad e inhumanidad que existe entre los ideólogos del neoliberalismo, al dividir la sociedad entre quienes no son rentables al sistema, simplemente por no ser grandes productores ni grandes consumidores y los convierten en “prescindibles”, por ejemplo, quienes viven en zonas de sacrificio o en localidades como Petorca o en las proximidades de salmoneras o los que pertenecen a pueblos originarios y habitan cerca de las forestales. Esto tiene un nombre y es Necroeconomía.

No se puede negar que este actuar de los grandes empresarios da por resultado que Chile, gracias al volumen de sus exportaciones, tenga un buen PIB al ingresar una buena cantidad de dólares, pero tiene su lado negativo y es que empobrece nuestro ya magro índice GINI.

Lo que justifica utilizar el término “saqueo”, es que el derecho de aprovechamiento de agua es privado y el Estado está limitado en sus facultades para decidir su gestión, ya que los derechos de agua los controla quien más dinero tiene. Resultado, la mayor parte del agua se utiliza con fines productivos y no se garantiza el derecho ni el acceso del agua a las personas.

Volviendo a la desafortunada frase que motiva este artículo, sus consecuencias son acentuar la desinformación y el poco interés que existe, en gran parte de la ciudadanía, sobre los efectos del Calentamiento Global en nuestro país. La última encuesta CEP revela la poca importancia que hay con los temas medioambientales, un buen ejemplo de la falta de conciencia con el tema es la habitual quema de buses y neumáticos durante las protestas ciudadanas por las demandas sociales.

Hay que decir que si los grandes empresarios dejaran de hacer lo que hacen, el único efecto que tendríamos es retardar lo inevitable, que en el futuro próximo, por culpa del Calentamiento Global, nos vamos a quedar sin agua.

Estamos viviendo la peor sequía de nuestra historia y es resultado del Cambio Climático, nuestra zona central y las 6 regiones que la componen, donde vive el 80% de la población, nunca más volverá a ser la que tuvimos a mediados del siglo XX.

La gravedad de nuestra situación la podemos apreciar al analizar el ranking mundial de estrés hídrico del Instituto Mundial de Recursos, difundido en agosto 2019, en el se destacan los 17 países con riesgo extremadamente alto de déficit de agua, como Qatar, Israel, Irán, India, Pakistán. Resulta que Chile se encuentra en el grupo de alto riesgo, pero, rozando el grupo de mayor gravedad al situarse en el lugar 18. Para hacer un paralelo, el año 2015 Chile estaba en el lugar 24. A modo de información, el concepto “estrés hídrico” se utiliza cuando la demanda de agua es mayor que la cantidad de la que se dispone.

Hace un par de semanas, el superintendente de Servicios Sanitarios (s), Jorge Rivas  dijo: «La sequía es gravísima. Los caudales de los ríos son los más bajos históricamente en la Región Metropolitana, en Valparaíso y O’Higgins«, advirtiendo además que el próximo verano podría haber racionamiento de agua en Santiago. El presidente Piñera la definió como un “terremoto silencioso”. Otro factor que influye y que no se dice es que la población y con ello la demanda en Santiago sigue aumentando.

Amables lectores, debemos comenzar a pensar en cambiar nuestros hábitos de consumo y mirar a Ciudad del Cabo, Sudáfrica, que logró posponer el llamado día “0” gracias a importantes restricciones que lograron reducir el consumo de agua a 50 litros por habitante/día, recomendaron duchas de dos minutos y prohibieron regar jardines, lavar autos y llenar piscinas. Por último y si no quiere hacer nada de eso, una buena solución es mudarse a una ciudad más al Sur.

Para mí, la frase de Rodrigo Mundaca debió de ser “a la sequía se suma el saqueo”, pienso que expresada de esta forma, refleja de mejor manera lo que ocurre en el país.