Quería sumar una propuesta a las muchas que ya tienen. Es por una experiencia maravillosa que tuve.
Hace unos años visité Berisso, una especie de Puente Alto de la ciudad de La Plata (Argentina), con la salvedad que éste todavía subsiste aparte pues la ciudad no ha llegado hasta sus barrios, aunque falta poco. Dentro de su municipalidad existe oficialmente un muralista, una persona encargada no sólo de ayudar a la conservación y registro de las obras de arte comunales, sino a la producción de nuevas obras, a las cuales puede acceder cualquier vecino disponiendo de sus casas o espacios comunitarios (en caso de haber acuerdo). Si un vecino (o varios) solicitan su servicio, se comienza un trabajo de rescate de historia local con los mismos, se organizan talleres de metodologías participativas y finalmente se llega a un día de ejecución de obra, donde participan todos con un resultado colectivo, normalmente muy apreciado.
Entiendo que los presupuestos son eternamente escasos, pero he participado de otros murales donde las empresas se suman cuando notan que hay un apoyo oficial detrás, así, realmente mi propuesta sería invitarlos a crear, dentro del departamento de aseo y ornato, de cultura o donde crean mejor, una coordinación de muralismo comunitario.
Puede que suene a poca cosa frente a otras propuestas (la cultura no siempre está al centro de las demandas), pero yo al menos, en mi experiencia, he podido notar las siguientes ventajas:
1.- Apropiación y valoración del espacio comunitario a través del desarrollo de iniciativas artísticas con ancla en lo local.
2.- Trabajo en común, entre vecinos, generación de confianzas y valor del espacio ciudad.
3.- Alianzas con el mundo privado, las que muchas veces, vía RSE, se suman a estos proyectos con los materiales para poder amortizar la ejecución de obras.
4.- Acercamiento al mundo juvenil al poder involucrar voluntarios para los trabajos de pintura.
5.- Registro y conservación de obras con alto valor local.
6.- Embellecimiento, registro, comunicación uno a uno (de lo institucional a lo personal) y si me apuran, felicidad por el logro, y clara mejoría del espacio.
Berisso actualmente tiene muchísimos murales, lo que ha permitido que ciertos barrios se enlacen y tengan cuadras completas pintadas, lo que redunda en una ciudad maravillosa, donde los vecinos de todas las edades respetan la obra colectiva. Ahí hay un cambio de paradigma acerca de lo que muchas veces se cree como “orden” o “limpieza”, el arte es una manifestación maravillosa y permea mucho más allá de las murallas cuando son varias las manos que logran una obra para y por todos. ¡Espero podamos conversar!
¡COMPARTE!
Comentarios