Durante las últimas semanas, hemos visto cómo se han manifestado en el país, cientos de científicos y científicas, investigadores, especialistas y jóvenes profesionales del conocimiento y la tecnología en Chile, exigiendo lo más básico que se puede pedir: ser escuchados y tomados en cuenta. Soy parte de esa comunidad, y he reflexionado durante estos días si realmente es necesaria la Ciencia y Tecnología en Chile. Más allá de la respuesta lógica y obvia, desde el punto de vista del desarrollo país y lo que significa alcanzar los estándares adecuados de calidad de vida para la población en el siglo XXI, creo que sería interesante analizar si realmente Chile merece tener grandes centros de innovación científica y tecnológicos, o si más bien, el popular discurso de la innovación, el I+D y la inversión en este aspecto, no es más que cantos de sirenas ante una realidad pragmática y dura.
A lo largo de la historia de Chile, el país ha tenido como eje central de crecimiento económico las exportaciones de materias primas, la mercantilización de los recursos naturales y la especulación de éstos, logrando enormes fortunas en el corto plazo, sin una pizca de visión industrial o fabril. Claro, para muchos es mejor tener dinero ahora que mañana, la visión a corto plazo ha imperado por siglos en el país, y han coludido diversos gobiernos y poderes económicos. Tal como señala un inserto de hace algunos días en los medios nacionales, los gobiernos han escogido la ignorancia. Es cierto, así ha sido, y sinceramente aquello no asombra en lo más mínimo para quienes observamos la historia, sus procesos, y buscamos crear más conocimiento libre para todos.Es duro y triste cómo también se ha mercantilizado el conocimiento en el país. Recordando las palabras de otro colega: «eres el número de publicaciones que tienes». Ha eso hemos llegado, a ser reducidos a un número de indexaciones por año.
Días atrás hablaba con una doctora en educación, y me señalaba: «¿De qué sirve que postule y postule a fondos de investigación, si también están coludidos, y tenemos que luchar como ratas por un queso miserable?». Es duro y triste cómo también se ha mercantilizado el conocimiento en el país. Recordando las palabras de otro colega: «eres el número de publicaciones que tienes». A eso hemos llegado a ser reducidos a un número de indexaciones por año.
Chile ha tenido y tiene grandes mentes científicas, hombres y mujeres, tanto en las áreas sociales como de ciencias básicas, y no son pocos los que deciden no volver al país. Quizás sea hora de comprender que mientras Chile siga una política económica tan miserable como la de vender madera, cobre y frutas, y no conocimiento y alta tecnología, merece lo que tiene, o más bien, lo que aquellos grupos de élite económica les gusta: ganar dinero a bajo costo, con una población en la ignorancia. A Chile la obligaron a ser ignorante…
Comentarios
17 de noviembre
Sin duda que es necesaria, pero puesta en el contexto actual de la economia chilena como lo presenta esta nota la pregunta seria ¿y para que? Nuestro pais se ve muy bien dentro de la estadistica macroeconomica que brienda una apariencia que le ha permitido ingresar ala OCDe y que nos clasifico como pais desarrollado. Si se considera que por ejemplo cuanto se invirte 10 veces menos en C&T que el resto delospaise de tal grupo, uno entra al dudar. Si consideramos que aun producimso barras de cobre y compramos de vuelta cable forrado y cañerias…..de que sirve tener entonces tener iniciativas como BioSigma (empresa biotecnologica asociada al cobre). Pero no todo esta perdido, hay una masa de investigadores con ideas, creativos, tratando de tirar esta carreta y que pueden dar el salto quantico hacia el desarrollo. Una estructura que fomente y coordine efectivamente la ciencia y la innovacion es lo que va faltando.
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21 de noviembre
No sabía que la producción de Madera , Cobre o fruta sean actividades de poca ciencia…
Si es así, cerremos las carreras de Ing. Forestal, o terminemos con la agronomía como ciencia.
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22 de noviembre
Es importante entender que sin duda alguna que la Ciencia, Tecnología y el Conocimiento en general, son claves e indispensables en el desarrollo de las sociedades y países, como lo indica por el ejemplo el destacado antropólogo Marvin Harris. En Chile, lamentablemente, la matriz económica de crecimiento país, se sustenta en la extracción de materias primas (sector primario) la cual no requiere de una población altamente educada e instruida. Mi posición, es que mientras no cambiemos el punto anterior, jamás tendremos o necesitaremos de una sociedad con centro el conocimiento y su creación permanente para el desarrollo colectivo. Por ahora, como se ha dicho, los Gobiernos han escogido ser ignorantes.
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