Esta será una columna extraña, tengo varias cosas que decir y no tengo idea como voy a hilvanarlas, pero, siguiendo con este estilo visceral y desprolijo que me caracteriza.
Más allá de pésima suerte del Presidente Piñera, quien en su primer periodo debió enfrentar un terremoto colosal, ahora, durante su segundo periodo, debe replantear su administración para hacerle frente a una pandemia mundial, sinceramente, habría que ser harto imbécil para votar de nuevo por él o sus cercanos, la probabilidad de que nos golpee un meteorito o directamente, suframos de una invasión extraterrestre, es realmente plausible.
Dicho eso, ¿Qué es lo único que importa durante la pandemia?, Vivir, esa es la respuesta, una que los economistas y especialistas externos al Minsal aún no parecen entender, y una que el Ministro Larroulet se encarga fervientemente que no llegue a oídos de nuestra primera autoridad, dejando al resto del país a expensas de un sistema económico feudalista, que a pasos agigantados, exhibe una completa falta de preocupación por nosotros, los siervos.Por eso nombré la columna en honor a Rod Tidwell, porque siento que todos quienes confiamos en Sebastián Piñera, tenemos todo el derecho de pedirle que, ahora, nos muestre donde está el dinero.
¿Duele compararnos con el sistema feudal?, bueno, la verdad duele.
Durante años he escuchado el debate sobre economías sociales de mercado, capitalismos, neoliberalismos, comunismos y populismos, y aún sigo pensando que estamos construidos dentro de una lógica tan simple como primitiva, con la única diferencia de hoy tenemos más información y menos consciencia de como usarla, me explico.
Históricamente todas las sociedades, salvo las orientales, se construyen con incompetentes que mandan, líderes militares que controlan, líderes religiosos que dictan la moral y mercaderes que, al final, son los más vivos, todo el resto, dependientes que, según su talento y astucia particular, vive mejor que los siervos y los esclavos.
Si, no es posible que consideremos que alguien que vive con el sueldo mínimo, en la periferia, sacrificándose para servir, sin salud ni educación de calidad y dependiente del pan y circo, como alguien libre y eso, hoy con la pandemia, está quedando demostrado.
Por eso nombré la columna en honor a Rod Tidwell, porque siento que todos quienes confiamos en Sebastián Piñera, tenemos todo el derecho de pedirle que, ahora, nos muestre donde está el dinero.
Siendo aún más claro, cuando escucho que el Ministro Palacios y Briones comienzan a indicar que tenemos que preocuparnos del futuro, del impacto de retirar fondos de las AFP, o directamente, cuando nos invitan a ajustarnos los cinturones, me doy cuenta que nuestro señor feudal (no creo en las monarquías), nombró bufones en vez de caballeros, y eso mis amigos, solo genera un descontento que nos afecta a todos y que colmará las calles una semana después de que llegue la vacuna.
Ahora bien, no me pierdo, Guillier hubiese dado vueltas en su silla y emitido un montón de interjecciones en esta situación, leyendo grandilocuazmente una serie de discursos escritos por titiriteros de su agrado, por eso el tema es otro, ¿En qué medida logramos que las autoridades comprendan que la ciudadanía necesita recursos? punto.
Duele ver que personas acomodadas toman decisiones relativas a la vida de quienes los pusimos en ese lugar, enerva ser regionalista y darse cuenta que no hay ningún parlamentario que haga propia esa bandera de lucha, jode, si, jode, que uno de los anhelos del ejecutivo sea no afectar la cartera del que vendrá después, más sabiendo que no será de centro derecha y que esa deferencia nunca ha sido recíproca, dado que la izquierda siempre encuentra alguna muñeca gigante o viaje transoceánico donde despilfarrar el dinero de todos.
En resumen, a todos quienes los bonos Covid nos sacan la lengua, dado que al llenar el registro social de hogares no podemos incluir el endeudamiento, por lo que aparecemos como personas acaudaladas, les pido que envíen un mensaje en las cartas al presidente y le digan.
Seba, Show me the money.
Comentarios
10 de julio
Estimado, es refrescante leer sus líneas, esto de leer y leer a las izquierdas cansa, agota la mente, y tengo la sospecha que leer tanto destilado de odio también enferma. Pienso que el drama de las derechas es la falta de peso intelectual, la carga se arregla en el camino y en el sentido común, o en lo que la vida va poniendo delante. Piñera en ese contexto no parece ni un intelectual, ni alguien que tenga muchas convicciones, tampoco deja mucha evidencia que tenga una visión de estadista, por ello en muchas mentes va al mismo saco que Bolsonaro y Trump, las encarnaciones de satanás. Sobre el «money», es entendible, mucha gente de esa derecha que nos gobierna viene del mundo privado, donde cada peso cuenta, la izquierda que en general ha estado a cargo del gobierno, no gana el «money» recibe y gasta. Por eso las lamentaciones después de perder el gobierno. Comparto lo de primitivo, al final del día uno se da cuenta que somos muy primitivos, la gracia esta en hay gente que sabe como convocar la jauría.
+1
10 de julio
Como cantaba la gran Sherryl Crow, If It makes you happy, It can’t be that bad.
Me agrada escribir sin caer en fundamentalismos, me gusta pensar libremente y por eso mismo, renuncié a toda militancia de derecha.
En la derecha no hay intelectuales, solo hay personas inteligentes que buscan argumentos para validar su visión particular, lo mismo que en gran parte de la izquierda chilena.
Al pensar, razonar y reflexionar, se abren los ojos y al ver la realidad, te centras en resolver y no en explicar causas o presuponer consecuencias.
El Presidente Piñera tiene un fabuloso equipo REACTIVO, capaz de aplaudir y mascar chicle al mismo tiempo, pero carece de pensadores que lean el contexto y midan escenarios.
Para darte un ejemplo, ¿Te imaginas si se hubiese apropiado de inmediato del proceso constituyente?, definitivamente habría quedado en la historia como alguien que escuchó y no como quien hoy solo quiere bloquearlo (más allá de la pandemia).
En fin, lo único que importa es la vida y endeudarse es pan de cada día, así que llegó la hora de sacar el 10% y después vemos que sigue, así funciona la clase media, sin APV, sin Ahorro, en pelota y ciega ante la cruda realidad.
Son todos narcos, son todos narcos (que temazo)
Un abrazo y respecto a mi profundidad intelectual, creo que el conocimiento hay que usarlo, no pregonarlo.
Éxito y nos leemos
14 de julio
Un artículo agradable de leer y sobre la Edad Media, hoy vivimos en una algo más moderna y resulta que nos está pasando lo mismo, incluida la pandemia.
La letal Peste Negra apareció en 1347 y se calcula que en 7 años fue responsable de unos 48 millones de muertes, directa o indirectamente. Muertes que Europa tardó 2 siglos en reponer.
Su impacto fue tal, que el poder señorial perdió su capacidad económica a diferencia de los agricultores y jornaleros, que pasaron a ser valiosos por su escasez y pudieron pedir salarios más elevados por su trabajo, logrando un mejor bienestar. Hubieron varias otras transformaciones sociales que marcaron el fin de la Edad Media e iniciaron la Edad Moderna.
A lo mejor se está repitiendo la historia.
Saludos y se agradece tu ameno artículo
+1
14 de julio
En serio gracias, me gusta escribir livianito, deslizando reflexiones profundas, como el cantar de un juglar, pero sin vestirme de bufón, llevo años pensando que la crisis internacional no es política, sino estructural, como en la edad media y sólo mediante una comprensión colectivista de la sociedad, podremos crear una modelo que nos permita el tan anhelado, y por veces utópico, bienestar social.
Me encantó el aporte que indicas en tu comentario, es exactamente lo que estaba pensando, es más, los romanos decían que ningún maestro guerrero, puede vencer sin su maestro herrero, sino veamos que pasa en los barrios acomodados, si dejamos de pasar a recogerles la basura, en fin, hay mucho paño que cortar.
Éxito Fernando, nos seguimos leyendo