Esta semana se produjo la versión del año en curso del multimediático, facilista, mundial y bastante idiota evento llamado “La hora del planeta”, que invita a apagar los artefactos eléctricos por una hora. Con esto, dicen los creadores, se busca “darle un respiro al planeta” y crear conciencia.
Muchos cargaron las baterías de sus laptops, MP3, iPads, teléfonos, linternas, etc.. Probablemente compraron velas, desempolvaron sus viejas teteras para hervir el agua en la cocina a gas. Como esto se trata de participar y sentirse parte de lo que hace mucha gente en el mundo en el mismo momento, otros tantos siguieron el evento por Internet. Para tener una postura “verde”, como para todo tipo de ámbitos, hay que tener algún dominio básico de las disciplinas que involucran este tema (tecnológico, biológico, meteorológico, económico, entre otros) que pocos de los autodeclarados manejan, por lo que no son capaces de analizar lo que implica el llamado y mucho menos determinar si en verdad tiene algún efecto real.
En la megalomanía y antropocentrismo en que vive el ser humano, en algún momento, se atribuyó la capacidad de “salvar al planeta” de los estragos causados por la contaminación. El planeta tiene entre 5.100 y 4.400 millones de años de edad, la vida en la tierra tiene aproximadamente entre 4.400 y 2.700 millones de años respectivamente, en todo ese tiempo el planeta ha pasado eras volcánicas, eras glaciales, inundaciones, sequías, lluvias ácidas, impactos de meteoritos y varios fenómenos más considerados catastróficos. Sin duda, tras estos hechos tanto el planeta como la vida han cambiado, mutado, y adaptado a las nuevas condiciones muy exitosamente. Durante este cambio constante muchas especies se han extinguido, muchas otras subsistido y muchas otras proliferado. Por esto, pensar que el ser humano, como especie, puede salvar al planeta suena ridículo. La contaminación ambiental es un tema muy grave para nosotros y algunas especies sensibles a nuestra intervención, pero lejos está de ser una amenaza para el planeta. “Salvémonos” debiera ser el slogan.
En relación con el calentamiento global, muchos científicos están comenzando a expresar su escepticismo respecto a que las emisiones de CO2 sean la causa. Y lo plantean como una duda porque afirmarlo sería políticamente incorrecto. Hoy es difícil asegurar científicamente si las emisiones de CO2 son o no la razón del calentamiento global, pero definitivamente es más difícil expresar públicamente que pudieran no serlo.
Ahora, excluyendo la semántica de su nombre, "La hora del planeta" es un evento inútil, porque es concebido obligadamente como un llamado liviano, que no incomoda, técnicamente erróneo, pero quizás entretenido a los ojos de un individuo presto y dispuesto a apoyar todo tipo de activismo social políticamente correcto, desde la comodidad de su casa, desde la comodidad de un “reenviar”, de un “retweet”, de un “compartir”. Cualquier llamado que signifique una participación activista real, comprometida y sostenida en el tiempo estaría condenado al fracaso en términos de impacto y apoyo mediático, y luego al olvido en medio de otros llamados igual de simplones.
Es muchísimo más fácil apagar los artefactos una hora una vez al año y sentirse salvador del planeta, que reciclar las botellas que se bebe cada fin de semana.
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Foto: Idea luminosa – gotencool / Licencia CC
Comentarios
28 de marzo
Yo lo considero un acto simbolico, no util. Ayuda a despertar conciencia a la masa. En ese sentido creo que La Hora del Planeta tiene sentido. No podemos cambiar las cosas sin generar masa critica.
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28 de marzo
Considero acertado el eslogan «Salvémonos» en vez de «Salvar al planeta»; sin embargo detrás de la faceta heroica de salvar, se esconde la necesidad involuntaria y emergente de dejar las cosas como están, es decir capturar esta vida si dar paso a ninguna evolución. En otras palabras la frase de «Salvar….» implica mantener las cosas como están, ya que así es cómodo y es la fórmula que nos resulta como especie para vivir. Ahora la pregunta es la siguiente..¿Me sirve a mí, individuo solitario y egoísta apagar la luz durante una hora?…la respuesta quizás sea un rotundo NO. Pero es más fácil quedarse sin hacer nada, que levantarse del sillón, apagar el televisor y quedar con una vela pensando que en el futuro, quizás esta vela sea la única forma de iluminarse….
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29 de marzo
Estimado Fabián,
Concuerdo contigo en el argumento de fondo que sostienes. Podrías compartir y analizar la experiencia alemana, en donde los verdes ganaron de forma inédita en estados federados antes dominados por la alianza conservadora.
Saludos,
Francisco Contreras
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30 de marzo
Concuerdo, y se me viene a la mente: «Del dicho, al hecho…»
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26 de noviembre
Me suena a George Carlin tu escrito, mas lo comparto. Quizás el mensaje «salvémonos nosotros» sea más al callo.
Algo que muestre cómo nos afecta a cada uno el no reciclar o no ahorrar agua por ejemplo….
Saludos
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