Un fondo pensiones bien administrado, con reglas claras y con el capital acumulado bien invertido dentro del mismo país, le da a sus cotizantes más y mejores pensiones, además evita la absoluta inseguridad que tiene el sistema de AFP, administradas en la actualidad por empresas extranjeras, las cuales se limitan hacer su negocio sin ninguna responsabilidad cuando se producen pérdidas tan grandes en los recursos de los trabajadores, como los que se han producido.
Para contestar este por qué, es necesario volver al sistema de pensiones solidarias. Es preciso hacer un poco de historia, dado que en el último tiempo se ha escrito mucho sobre la precariedad de las jubilaciones que recibirán los trabajadores mediante el actual sistema de pensiones, cuyas cifras reales muestran un verdadero desastre en relación a los montos mínimos que recibirán los trabajadores para poder sobrevivir durante el período final de sus vidas.
Ahora bien, si vamos al origen de la creación de estas famosas AFP, éstas fue para reemplazar el antiguo sistema de jubilaciones que otorgaban las distintas cajas de pensiones existentes que estaban en quiebra y no cumplían con las expectativas por falta de recursos. Hay que destacar que en esos tiempos no existía la oportunidad de discrepar y tampoco de decidir (épocas de dictadura).
La oferta del nuevo sistema (AFP) fue ofrecido al régimen absoluto de la época como la solución ideal para salir del déficit que tenía el sistema solidario. Lo que no le dijeron a los personajes del régimen fue que el sistema era bueno, pero estaba muy mal administrado, por otra parte los gobiernos siempre echaron manos a estos fondos para suplir el déficit fiscal, sin pagar interés alguno. El deterioro venía profundizándose a partir del gobierno de Jorge Alessandri, que inició, con la expropiacióny parcelación de los bienes agropecuarios de las Cajas, una supuesta reforma agraria de tipo publicitario.
Las Cajas de pensiones siguieron dando tumbos, fueron expropiados paulatinamente sus bienes y capitales desde el período de los gobiernos populares, terminando en crisis total en la dictadura militar donde quedaron sin ningún bien material.
Pero lo más interesante y digno de destacar es que el sistema nunca fue malo y sus principios filosóficos tampoco, la causa de su desprestigio fue exclusivamente su mala administración, motivo que fue ocultado hábilmente por los creadores del actual sistema para imponer su negocio actual.
Las causas de la mala administración fueron, por una parte, de tipo político, por cuanto se recurría a esos fondos para tapar deudas en la administración fiscal y, por la otra, los pésimos administradores de los bienes de las cajas que en lugar de sacar rentabilidad a los bienes encargados, la mayoría mantenía una burocracia dentro del bien a su cargo.
Finalmente estamos en otros tiempos, desde el año 1990 al 2010, hay que reconocer que las finanzas fiscales se han ordenado. Lo que no sabemos es como quedará el Ministerio de Hacienda en sus finanzas para el próximo período. Esta buena administración de los recursos que posee el estado esta demostrando que existen las personas capacitadas y honorables que pueden administrar, en debida forma, un sistema único de pensiones solidaria y también a la rapidez como circula la información, acompañado del mayor conocimiento que las personas tienen y a la real transparencia que debe haber en su gestión.
Un fondo pensiones bien administrado, con reglas claras y con el capital acumulado bien invertido dentro del mismo país, le da a sus cotizantes más y mejores pensiones, además evita la absoluta inseguridad que tiene el sistema de AFP, administradas en la actualidad por empresas extranjeras, las cuales se limitan hacer su negocio sin ninguna responsabilidad cuando se producen pérdidas tan grandes en los recursos de los trabajadores, como los que se han producido.
Un dato interesante que se debe tomar como un signo positivo para la propuesta, es el caso de las Cajas de pensiones de los militares, los cuales nunca permitieron que las traspasaran a las AFP, hoy en día gracias al aporte del Estado normalizaron sus funciones y son muy bien administradas.
Ahora, ¿qué hacer con los capitales que acumularían los trabajadores en el nuevo sistema solidario para una mejor rentabilidad? es un tema sencillo de abordar,siempre y cuando no meta la cola los que seguramente defenderán a ultranza el actual y obsoleto sistema.
No doy cifras y otras yerbas parecidas porque son muy conocidas, algunas son espeluznantes de malas.
Comentarios
24 de febrero
Saludos estimado Don Armando Hernandez Albarrán:
Pase por este sitio web en búsqueda de su proyecto de ley de una AFP SOLIDARIA TRIPARTITA, no lo encontré pero encontré sus temas de gran interés.
Seria tan amable de indicarme donde puedo ubicar dicho proyecto, para leerlo y asimilar su contenido. Gracias por la atención que me pueda brindar.
Seguro estoy que cualquier iniciativa que conduzca a la autodeterminación de Chile y los chilenos siempre será un éxito.
Salud.
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