Esperemos que en Chile la lógica y forma de equilibrar una ecuación entre legitimidad, inclusión y ciudadanía para elegir los candidatos al parlamento vía primarias parlamentarias, sea el cumplimiento de una promesa democrática y no el retrato de una notable película.
“Mátalos suavemente” («Killing them softly», en inglés) es el título del film del director de cine Andrew Dominik, que posee como guión diálogos lacerantes, cargados de humor negro y críticas al sistema político actual, que llegan a la retina del espectador a través de citas textuales o voz en off sobre los dichos de los presidentes de EEUU Bush y Obama.
La cinta es una excelente metáfora para retratar el guión político chileno que se ha vivido en materia de “Elecciones Primarias Parlamentarias”, en los últimos días con vista al panorama del domingo 30 de junio de este año.
Les invito a ver algunas escenas.
Escena uno: “El Voto”
En las últimas elecciones municipales, de un universo de 13,4 millones de potenciales votantes, sufragaron algo más de 5,4 millones, y no votaron 7,9 millones de personas. Esto significa que existe cerca de un 59% de abstención ciudadana.
En la antesala de un segundo ciclo de elecciones bajo la modalidad del “voto voluntario”, analizar estos datos son la carta de navegación para que la ciudadanía y los partidos políticos reevalúen un distante vinculo.
Escena dos: “Elecciones Primarias»
El proyecto de elecciones primarias se fundamentó en: avanzar en mayores grados de transparencia en los procesos de selección de candidatos; enfrentar la brecha de representación entre el sistema político y la ciudadanía; y construir condiciones para que ésta sea participe de la decisión sobre las candidaturas al Parlamento. Cabe cuestionarse, ¿qué ha pasado con ello?
Escena tres: “Cómo elegir a los candidatos»
La Encuesta Auditoría a la Democracia del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), que agrupó a importantes centros de estudios (CEP, CIEPLAN,Libertad & Desarrollo y Proyectamérica), arrojó una dimensión “vital” ante la consulta sobre cómo prefiere usted que los partidos seleccionen o elijan a sus candidatos. Un 61% indicó a través de primarias o elecciones abiertas, mientras que un 18% señaló la opción a través de primarias o elecciones en los partidos. Solo un 4% indicó que los dirigentes de los partidos elijan a los candidatos. En esta pregunta un 17%, indicó que “No Sabe”o “No Responde”.
Escena cuatro: “Desolación”
Sin embargo, pese a las estadísticas los antecedentes que comienzan a circular en los patios interiores de los partidos políticos, retratan un cuadro más bien desolador. Menos de un 5% de los distritos van a elecciones primarias de parlamentarios para definir entre los pactos a los candidatos este domingo 30 de junio. Estos intentos de exclusión y omisión ciudadana son la letra chica del contrato democrático.
Entonces, surge la simple pregunta: ¿Si los candidatos presidenciales van a primarias, por qué no los candidatos al Parlamento?
Epílogo
En el film “Mátalos suavemente”, se configura una metáfora de nuestro tiempo: el de una América que deja atrás una situación triste “la era Bush” y se vislumbra otra, cuya diferencia aparente es que está colonizada de promesas, “la era Obama”. Esperemos que en Chile la lógica y forma de equilibrar una ecuación entre legitimidad, inclusión y ciudadanía para elegir los candidatos al parlamento vía primarias parlamentarias, sea el cumplimiento de una promesa democrática y no el retrato de una notable película. Se la recomiendo.
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Foto: Revolución Democrática / Licencia CC
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