#Política

Mapuches, ¿es aplicable una rectificación?

0 |
COMPARTIR
EN WHATSAPP
COMPARTIR
EN WHATSAPP

En 1869, Manuel Antonio Matta criticaba la opinión dominante: “Como prueba de las mayores inconsecuencias que he oído en esta Cámara, se sostiene por parte del Gabinete, que respecto de la guerra de Arauco no rije el derecho de jentes, i que esto autoriza a tratar a los araucanos de un modo cruel e inhumano”. Y luego agregaba: “respecto de esa pretendida ocupación de la Araucanía, veríamos, descartando todo lo que eso tiene de ridículo i pequeño, que lo que hemos hecho es más que suficiente para que se nos califique de bárbaros e ignorantes. I tan cierto es esto que en los mismos planes de las expediciones que se han hecho estaba prescrito el asesinato, el robo i el incendio”.

El recrudecimiento de actos de violencia en la Araucanía denotan que reducir el “conflicto mapuche” a mero problema terrorista, que se soluciona con fuerte (co)acción, es una estrategia deficiente y contraproducente, al no considerar la complejidad del asunto.

Mi propósito no es discutir la hegemonía estatal a la hora de proponer soluciones, sino plantear una reflexión amplia desde un punto de vista libertario.

Entre las demandas mapuches, están el derecho a la autodeterminación, autonomía jurisdiccional en relación al Estado chileno, respeto de tratados previos, y “reparación” por parte del Estado. Dos argumentos principales se esgrimen para negar tales reclamos: que eran simples tribus dispersas sin organización (sin ley), y no trabajaban la tierra. Bajo un concepto hobbesiano, se plantea que no eran dueños de la tierra pues no estaban conformados como Estado, carecían de gobierno con soberanía territorial, y nadie ejercía derechos de propiedad individuales.

Pero, como dice Robert LeFevre en su obra “La propiedad de la tierra” (capítulo 8): “La acusación de que la propiedad privada del suelo no podría existir salvo con protección del gobierno no se sostiene a la luz de la evidencia. El papel del gobierno con respecto a la tierra ha sido más bien agresivo que protector”.

Que el derecho de propiedad (individual o colectiva) dependa de mandatos del Estado genera dilemas. Porque, ¿cómo podríamos rechazar que ese Estado suprima o no reconozca tal derecho, mediante fraude y coacción?

Bastiat decía: “la vida, la libertad y la propiedad existen con anterioridad a aquello que hizo a los hombres hacer leyes por primera vez”. Presumir que sin Estado no hay derecho de propiedad, es aceptar que el Leviatán lo crea, obviando la espontánea interacción desde donde surgen instituciones que permiten el libre intercambio, como el trueque.

Entonces, ¿es válido que el Estado ejerza coacción sobre la tribu Kayapó, sólo por no estar organizados estatalmente? ¿No es acaso eso una forma de servidumbre involuntaria? La respuesta sería sí, sólo si -como dice Rothbard- alguien acepta que un sujeto A puede ser dueño de un sujeto B. Lo que sería aceptar la esclavitud.

Los mapuches no tenían gobierno centralizado, pero sí sus ágoras, que llamaban “Koyang”. A través de éstos hicieron 28 tratados con la corona española, estableciendo límites y mutua independencia. Con el mismo mecanismo hubo 14 parlamentos con el Estado chileno, el último en 1872.

En 1819, O’Higgins reconocía la autonomía mapuche: “Araucanos, cunchos, huilliches y todas las tribus indígenas australes: os habla el jefe de un pueblo libre y soberano, que reconoce vuestra independencia”, según cita Carlos Contreras Painemal en su tesis de doctorado “Los Tratados celebrados por los Mapuche con la Corona Española, la República de Chile y la República de Argentina” (Freien Universität Berlin).

Los mapuches tenían conciencia de dicha independencia. En 1881, cuarenta caciques envían carta al ministro Recabarren: “¿Con que permiso quiere meterse aquí? ¿Cuál de los caciques le ha dado permiso? Me parece que nadie le ha dado permiso” (cita de Carlos Contreras Painemal).

Por otro lado, es dudoso que sin alguna forma de producción (sin transformar el entorno), un pueblo sobreviva. La cláusula lockeana no restringe el concepto de trabajo sólo al industrial o de gran escala. La supuesta falta de trabajo sobre la tierra, se liga con la noción de progreso y la idea (hegeliana) del Estado como fase ética superior. Bajo ese esquema, los mapuches son considerados atrasados por no producir industrialmente, y carentes de toda clase de derechos, por no tener Estado.

El Mercurio en 1859, en concordancia con dicha concepción, decía que: “no eran más que una horda de fieras que es urgente encadenar o destruir en el interés de la humanidad y en bien de la civilización”, tal como cita Fabián Almonacid Z en su artículo en la revista Historia (N° 42, enero-junio 2009).

No es raro entonces que el 4 de diciembre de 1866 “el carácter principalmente ganadero y comerciante del pueblo mapuche quedaba fuera de las consideraciones de la ley” (citado por Fabián Almonacid Z). Por tanto, que los territorios mapuches fueran declarados por el Estado chileno como baldíos.

En 1869, Manuel Antonio Matta criticaba la opinión dominante: “Como prueba de las mayores inconsecuencias que he oído en esta Cámara, se sostiene por parte del Gabinete, que respecto de la guerra de Arauco no rije el derecho de jentes, i que esto autoriza a tratar a los araucanos de un modo cruel e inhumano”. Y luego agregaba: “respecto de esa pretendida ocupación de la Araucanía, veríamos, descartando todo lo que eso tiene de ridículo i pequeño, que lo que hemos hecho es más que suficiente para que se nos califique de bárbaros e ignorantes. I tan cierto es esto que en los mismos planes de las expediciones que se han hecho estaba prescrito el asesinato, el robo i el incendio” (ambas citas de Matta se pueden leer en la tesis de doctorado de Carlos Contreras Painemal).

¿Tiene el Estado o quienes se organizan en torno a éste, el derecho de determinar qué pueblo es bárbaro o civilizado, para luego coaccionarlo y someterlo en base a aquello?

Desde un punto de vista libertario, no. En este punto podemos hablar de rectificación. No por los siglos de los siglos, sino desde que el Estado como monopolio de la fuerza y como entidad regida por derecho, se apropia de territorios que no le pertenecían. Esa es la discusión que debemos tener.

————–

Foto: postaletrice / Licencia CC

TAGS:

Los contenidos publicados en elquintopoder.cl son de exclusiva responsabilidad de sus respectivos autores.
Te invitamos a conocer nuestras  Reglas de Comunidad

Comentarios

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Quedan 1500 carácteres.

#NuevaConstitución

VER TODO
Para la ciudadanía la rotonda sin salidas es como vivir el castigo de Sísifo, destinados a llevar una pesada roca política a la cima de la montaña, solo para verla rodar montaña abajo y volver a repeti ...
+VER MÁS
#Política

De vuelta a la rotonda política

Para la ciudadanía la rotonda sin salidas es como vivir el castigo de Sísifo, destinados a llevar una pesada roca política a la cima de la montaña, solo para verla rodar montaña abajo y volver a repetir el ciclo interminable de esfuerzo y fracaso

Que existe agotamiento en múltiples sectores, difícil es de negar. Y eso incide en la viabilidad política actual. Pero eso no significa que el dilema constitucional esté cerrado
+VER MÁS
#Política

El mito del cierre definitivo del proceso constituyente/constitucional

Que existe agotamiento en múltiples sectores, difícil es de negar. Y eso incide en la viabilidad política actual. Pero eso no significa que el dilema constitucional esté cerrado

A pesar de los obstáculos y desgastes, el compromiso adquirido para modificar la Constitución debe ser respetado y llevado a cabo para reconectar con las expectativas y necesidades del pueblo
+VER MÁS
#Política

¿Nos jodimos todos?

A pesar de los obstáculos y desgastes, el compromiso adquirido para modificar la Constitución debe ser respetado y llevado a cabo para reconectar con las expectativas y necesidades del pueblo

El pueblo de Chile, está hastiado de la reyerta de baja monta, no quiere ver más discusiones bizantinas, alejadas de sus problemas cotidianos. Los chilenos y chilenas favorecen los acuerdos, pero esos no ...
+VER MÁS
#Política

Las lecciones del plebiscito

El pueblo de Chile, está hastiado de la reyerta de baja monta, no quiere ver más discusiones bizantinas, alejadas de sus problemas cotidianos. Los chilenos y chilenas favorecen los acuerdos, pero esos no se han visto por ningún lado

Nuevos

Existen en Chile experiencias concretas respecto a la participación de trabajadores y trabajadoras en los directorios de empresas de las que se puede aprender y ampliar
+VER MÁS
#Política

Cóbrenos la palabra

Se diría entonces que los humanos somos en sí mismos, como especie ajedrecística, en este caso, el medio, y cada jugada, un misterio hacia adelante o hacia atrás que nos contesta a ratos; con un poco de ...
+VER MÁS
#Deporte

Sonja Graf: Un retrato a lo Peaky Blinders del ajedrez

Lo que necesitamos como sociedad, es que gobierno y oposición, actúen con responsabilidad. El flagelo de la delincuencia, afecta todos los aspectos de nuestra vida, y era que no, produce severos efectos e ...
+VER MÁS
#Internacional

El legado de Cúcuta

Es urgente que las autoridades den el ejemplo y que el Estado de Chile haga rendir cuentas a los responsables de estos crímenes con premura y determinación, pues la impunidad no puede continuar en el paí ...
+VER MÁS
#Justicia

Una más del general Yáñez

Popular

Según la Encuesta de Bienestar Social (2021), en Chile las personas dedican más de un tercio de su tiempo diario a labores de cuidado, y un 85% de aquellos que pasan más de 8 horas al día en esta labor ...
+VER MÁS
#Sociedad

Avances y retos en el cuidado familiar en Chile

Los empresarios, por la gran responsabilidad que cae sobre sus hombros, no tienen que ambicionar ser los mejores y más ricos del planeta, sino que ser los mejores “para” el planeta, colocando a las per ...
+VER MÁS
#Sociedad

Razas y subhumanos una creencia para justificar atrocidades

La información pluralista y de calidad, la cultura de buen nivel, los valores democráticos y de civilidad, deben ser considerados igualmente derechos de todos los chilenos, y un deber a cargo de los recur ...
+VER MÁS
#Política

Tv pública, una reforma pendiente

Existen en Chile experiencias concretas respecto a la participación de trabajadores y trabajadoras en los directorios de empresas de las que se puede aprender y ampliar
+VER MÁS
#Política

Cóbrenos la palabra