Las tendencias para regular el uso de drogas en el mundo y en Chile

En el ámbito internacional la ONUDC -Oficina de las Naciones Unidas para las Drogas y el Crimen-, algo así como el brazo armado de la ONU para defender las políticas prohibicionistas de control de drogas, ha hecho una filtración oficiosa por medio de la BBC. En el texto propone llamar a los Estados miembros a “considerar la implementación de medidas que promuevan el derecho a la salud y ayuden a reducir la superpoblación carcelaria, incluyendo la descriminalización del uso de drogas y la posesión para consumo personal”.

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En términos de líneas de política de drogas del Gobierno, el doctor Montenegro manifestó la necesidad de mantener un equilibrio entre: proteger la salud pública, diferenciar micro tráfico de consumo, y una ley fuerte para perseguir el narcotráfico.

Esta propuesta es de la mayor importancia, por venir de quien viene, en el complejo contexto preparatorio de la Asamblea General Extraordinaria de las Naciones Unidas (UNGASS-2016) para revisar, el próximo año, las actuales políticas internacionales de drogas. Asimismo, porque según el artículo 3 inciso 2 de la Convención de 1988, dice: «…tipificar como delitos penales cuando se cometa intencionalmente, la posesión, la adquisición o el cultivo de estupefacientes o sustancias psicotrópicas para el consumo personal…», lo cual requeriría ser modificado.

Aquellas propuestas se acogen a las doctrinas similares planteadas tanto por la Comisión Global sobre Drogas que lideran los ex presidentes Cardoso de Brasil, Carter de Estados Unidos de América, Gaviria de Colombia, Lagos de Chile, Zedillo y Fox de México y ex Secretario General de la Naciones Unidas, Kofi Annan, quienes han declarado: «La guerra global contra las drogas ha fracasado». También, la OEA en su informe sobre drogas a los presidentes de las Américas (2013) ha recomendado: «Una importante alternativa -aunque de ninguna manera la única- a las políticas actuales hacia las drogas controladas, tales como la cocaína, heroína, marihuana y metanfetamina, incluiría legalizar una o más de ellas para su venta en algún tipo de forma que no sea para uso médico».

Por otra parte, el recientemente electo Primer Ministro de Canadá, Justin Trudeau, del Partido Liberal, ha afirmado que la legislación sobre drogas no funciona, que la actual criminalización de los consumidores arrestados con pequeñas cantidades de droga generan múltiples problemas que podrían paliarse fácilmente legalizando la marihuana de forma responsable, al estilo de países como Uruguay.

En lo local, la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados en su tramitación de la nueva ley de drogas que modificaría la ley 20.000, luego de haber aprobado el pleno de la Cámara la idea de legislar sobre esas modificaciones para despenalizar el cultivo, el porte y la tenencia de pequeñas cantidades de cannabis, ha tenido dificultades para escuchar a las autoridades del Gobierno sobre el asunto; ni el Ministro del Interior, ni el Subsecretario del mismo se han hecho presentes ante esa instancia legislativa para explicar sus políticas de drogas de acuerdo con el programa sobre el tema de la campaña de la Presidenta Bachelet, ni señalar cuáles serán las indicaciones (modificaciones) que propone el Poder Ejecutivo al proyecto en trámite.

Solo se ha presentado ante la Comisión de Salud el Director de SENDA, doctor Mariano Montenegro, quien ha manifestado que él nada puede decir sobre modificaciones legales ya que su Servicio sólo se ocupa de ejecutar la política de drogas en los ámbitos de la prevención y el tratamiento del consumo de esas sustancias, pero para nada del control de la oferta de drogas, de la provisión de ellas, del cultivo, producción, tráfico, porte y tenencia de ellas, que es el asunto de la actual ley de drogas y de las propuestas para su modificación.

En términos de líneas de política de drogas del Gobierno, el doctor Montenegro manifestó la necesidad de mantener un equilibrio entre: proteger la salud pública, diferenciar micro tráfico de consumo, y una ley fuerte para perseguir el narcotráfico. Sin especificarse cómo esa política se concreta en normas, estrategias, programas y proyectos. Cosa similar había manifestado a la Comisión de Salud el señor Muñoz del Ministerio del Interior.

No obstante, el doctor Montenegro entregó una buena noticia sobre la calidad de la marihuana importada de contrabando desde Paraguay, ya que según la información obtenida de las autoridades competentes de ese país, la hierba de allí proveniente solo está seca y prensada para facilitar su almacenamiento y transporte, no conteniendo ningún aditivo o pegante. Esto desvirtuaría la intención de diferenciar entre marihuana natural y procesada, que según filtraciones del Gobierno, la primera pasaría a la lista 4 de sustancias autorizadas con recetas retenidas, en cambio la marihuana procesada -conocida como “paragua”- permanecería en la lista uno y por lo tanto el que la posea o tenga, aunque sea en “pequeñas cantidades para el uso personal exclusivo y próximo en el tiempo” deberá probar tal situación eximente de responsabilidad penal en un juzgado de garantía como sucede en la actualidad, produciendo así 85.000 detenidos al año de los cuales más de 70.000 pasan por esas instancias penales.

Si bien, el Subsecretario de Salud, doctor Jaime Burrows, ha informado que los productos farmacéuticos derivados del cannabis serán pasados de la lista uno, de prohibido uso médico y recreativo, a la lista cuatro de sustancias autorizadas con receta retenida, pero sin aclarar cuál será la situación del cannabis natural o procesada.