Quienes respaldaron el golpe no lo hicieron para exterminar a los vencidos, sino que para reconstruir el tejido nacional. Lo que hizo la dictadura fue lo contrario, destruirlo. En vez de tender la mano al vencido, lo aplastó, lo persiguió sin misericordia.
La proximidad del 11 de septiembre vuelve a enrarecer el ambiente, provocando pasiones, debates, reflexiones, discusiones. En este año, reforzadas porque se cumplen 40 años desde un golpe militar inédito en la historia nacional e internacional, y que repercutió tan significativamente en nuestra convivencia, que sus secuelas perduran hasta el día de hoy. Además, los debates se refuerzan porque la conmemoración de estas cuatro décadas desde entonces se da ad-portas de una elección presidencial y las elecciones parlamentarias, junto con la primera de consejeros regionales.
En este contexto los ánimos parecen exacerbarse, en una suerte de gangrena que el tiempo no ha sido capaz de sosegar ni apagar. Por el contrario, se reactivan una y otra vez, sin que las nuevas generaciones, herederas de las que vivieron aquellos tiempos puedan soslayar la experiencia. Es así como hasta hoy tenemos un país dividido política, económica, social y culturalmente. Una división lacerante, agudizada por los niveles de desigualdad en todo orden y donde los esfuerzos por mitigarla parecen insignificantes e inútiles.
A 40 años del golpe, un senador de la derecha, de la Región del Maule, tuvo el coraje de dar un primer paso, admitiendo lo que no vio en décadas –las violaciones a los DDHH- y pidiendo disculpas. Dio un paso difícil, tan difícil que no fue seguido por su partido, ni por su candidata presidencial, y paga un precio, el aislamiento en su sector.
Consultada al respecto, la candidata Evelyn no fue capaz de levantar la mirada y abrir su corazón, llegando incluso a centrar la responsabilidad en la DC al afirmar que “cada uno tiene que hacerse cargo de su pasado. El golpe no vino porque sí, no vino de la nada. La Democracia Cristiana pidió prácticamente el golpe. Hubo situaciones anteriores gravísimas.”
Al respecto es bueno puntualizar que efectivamente, la mayoría de la DC, en base al clima confrontacional imperante –que unos intentaban mitigar mientras que otros procuraban agudizar, a uno u otro lado-, estuvo a favor del golpe, como lo estuvieron muchos(as) chilenos(as), sin imaginar siquiera las características que iba a tener la dictadura que sobrevendría.
Una minoría en la DC, que se expresó a través de un histórico documento, “La Declaración de los 13”, tuvo la lucidez de prever lo que sobrevendría. Quienes respaldaron el golpe no lo hicieron para exterminar a los vencidos, sino que para reconstruir el tejido nacional. Lo que hizo la dictadura fue lo contrario, destruirlo. En vez de tender la mano al vencido, lo aplastó, lo persiguió sin misericordia. De allí que a poco andar, al visualizar las violaciones a los DDHH por parte de la dictadura y el silencio de su soporte civil, el gremialismo hoy refugiado en la UDI, la Democracia Cristiana, junto con la Iglesia, no dudó en condenar tales violaciones, e inició un camino que la enaltece: socorrer a los vencidos y ayudar a levantarse a una izquierda diezmada y perseguida dentro y fuera de nuestras fronteras. Una izquierda que hace rato asumió sus errores frente a una derecha que a la fecha no logra asumir sus horrores.
Fueron muchos los demócratacristianos quienes se la jugaron por quienes en el pasado habían sido sus adversarios. A ellos, mi homenaje.
Comentarios
30 de agosto
Esta Ud profundamente equivocado en lo que dice respecto a lo que se refiere a lo que esperaban quienes respaldaron el golpe. La extrema derecha (PN y PyL) buscaban el golpe para «limpiar Chile del cáncer marxista» Hay cientos de testimonios de militantes de PyL y civiles varios, colaborando con la DINA, y a su vez, los vejetes del PN dándo sustento político a la cruzada genocida de Pinochet. Baste leer las expresiones de la junta en la época. Pinochet dijo que no habría plazos sino metas, ya que » una persona a quien le amputan una pierna no se recupera de inmediato» por ej. Ese es el ánimo que animaba a golpistas. Un odio como nunca visto contra quienens ellos veían como culpables de la debacle institucional de Chile (y social, económica, etc tal como se lee en los bandos).
Ud realmente cree que los llamados a que los militares den un golpe (transferencia de poder total a los cuerpos armados) era para «reconstruir el tejido social»? Ud peca de ingenuidad. o es tal vez es un democrata cristiano que quiere quedar bien con Aylwin y con los 13. El juicio de la historia es uno y la DC pretende torcerlo, asumiendo como oficial una postura minoritaria en 1973, como Ud bien dice. Incluso el hijo de Arellano, reconocido DC, comunicó a dirigentes DC que el golpe se haría, una semana después. Eso explica porqué los principales dirigentes tomaron medidas especiales de seguridad antes del 11. En esta historia, Aylwin y Frei, y todo su sector, incluyendo a Carmona, etc dieron sustento político a la dictadura y son responsables políticos de las masacres ocurridas desde la hora cero, cuando ya se sabía de los cientos de cuerpos flotando en el mapocho, tirados en las calles, del estadio nacionaly de Chile transformados ilegalmente en campos de concentración, etc. Ahora bien, Frei murió, lo asesino la misma mafia a la que primero apoyó y luego desconoció, entonces cualquier responsabilidad criminal queda. Aylwin esta tan viejo, que aún si se descubre que participó o avaló el flujo de dólares de la CIA para finanaciar e instigar el golpe, no será sometido a proceso.
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31 de agosto
Esta bastante desinformado señor Schmal. Informese un poco.
Desde la insistente proclamación de la guerra civil que hacía el socialismo, especialmente el Sr. Allende, en la década de los 60, todos sabiamos que el pronunciamiento de las FFAA era inevitable, sólo que la DC nunca quizo comprometerse en el «trabajo sucio». Este cinismo de la DC hízo prolongar hasta el extremo la intervención militar, desatendiendo lo que dictaba la conciencia en ese tiempo: obviamente el derremamiennto de sangre y la destrución institucional seria mínimo mientras ántes sucediera lo inevitable.
Este cinismo de la cúpula DC llegó a tal extremo, que a pesar de la obligada petición de intervención militar del 22 de agosto, redactada, propuesta y aprobada por la entonces poderosa DC, hubieron estos 13 que despues de leerla y firmarla pretendieron lavarse las manos. Hasta ese extremo llegó el cinismo de la DC señor, el mismo al que ud. se suma con su homenaje..
Saludos
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