Es extraña la imagen: un senador nacido y criado en el distrito que representa, decide viajar a Inglaterra una vez que este distrito es afectado por un terremoto. La razón del viaje era el Mundial de Rugby realizado en Reino Unido. Al parecer era un compromiso ineludible con el que debía cumplir, incluso aunque tuviera conciencia del contexto en el que viajaba y lo particular que ha sido el año con su figura y todos los parlamentarios. Y sobre todo lo vigilante que anda una ciudadanía con cada movimiento, con cada error.
Parece que Jorge Pizarro debía cumplir con esta labor por algo personal. Puede parecer antojadiza esta interpretación, pero tal vez el senador buscaba arrancar de esas tierras que lo vieron nacer, para así regodearse en los lugares que formaban parte de su presente. Era una cita con su presente a la que tenía que concurrir, dejando así las sombras de un pasado que hoy-y visto a la luz de los hechos- no es más que un instrumento de poder.Ser político es más que un currículum, es también una vocación que debe comprender a la sociedad en su conjunto y no negarla.
Eso parece ser la política para Pizarro más que el dedicarse al servicio público. Esto no lo digo porque crea en esa idea que nos ha metido la derecha de que el político tiene que ser un superhéroe. No creo en los superhéroes, y claramente su presencia en el terreno constantemente no habría sido de gran ayuda, pero no por ello me deja de llamar la atención la urgencia que significa en su cabeza un mundial de un deporte muy poco tomado en cuenta en Chile, salvo por algunas pequeñas élites de poder. Élites a las que, al parecer, el parlamentario quiere pertenecer de manera urgente.
¿Qué puede motivar a una persona que dice querer servir, alejarse de sus raíces? No deja de ser importante ver cómo Pizarro parece necesitar más de las luces del presente que la oscuridad del pasado. Esto no lo digo porque no tenga el derecho de hacerlo, sino porque pareciera que su pasado se transformó solamente en un trampolín electoral cada vez que recorre los terrenos y habla del hecho de haber nacido ahí. Luego de eso no parece importar el hecho mismo, sino que trata de escapar de éste de manera rápida.
Tal vez el presidente de la Democracia Cristiana entendió mal lo que significa ser político. A lo mejor creyó que serlo era otra manera de ascender socialmente y contribuir con la llamada movilidad social, esa que ha ido convirtiendo a los chilenos en un grupo de desclasados que tratan de salir corriendo de lo que fueron, dejando de lado los atributos de una clase trabajadora, para así tirarse a los brazos de una burguesía cada vez más carente de intelecto y muy lejana de la realidad. Una élite que prefiere escabullirse antes de entender. Aparentar antes que ser. Inventarse una vida antes que vivirla realmente.
La política no debe intentar escapar de lo real, sino afrontarlo y transformarlo en algo más que en un discurso. Son ideas que deben tener-y si no lo tienen, por último simularlo- un trasfondo social por la simple razón de que consiste en enfrentarse con la injusticia, aunque ésta sea provocada por la naturaleza. Ser político es más que un currículum, es también una vocación que debe comprender a la sociedad en su conjunto y no negarla. Y menos negarse. Lo último que debe hacer un político es no reconocerse, ya que al no hacerlo está engañando a sus ideas-si es que dice enarbolar el humanismo cristiano-quienes votan por ellas.
Comentarios
25 de septiembre
LOS PATRIOTEROS “HONORABLES” esa agrupación donde yace el “poder legislativo” algo muy parecido a una secta religiosa, pues siguen a pie juntillas a unos empresarios infalibles y omnipotentes a los que les deben sus votos, motivo por el cual actúan en consecuencia (y obsecuencia) .
Los miembros de esta secta tienen en común que a toda hora andan con cara de malas pulgas, como si se hubieran tragado un paraguas. Y no es que padezcan de insomnio o que a todos por igual les pese su conciencia de lacayos, NO. Es que cumplen juiciosamente la tarea de mostrar como sus actividades son complejas y agotadoras, y quieren hacer creer que el país está a punto de acabarse y no pueden andar repartiendo sonrisas, por supuesto, (eso es lo que quieren hacer creer a sus recuas de dóciles seguidores) que el proceso de “reformas” sumergió a la nación en el peor de los avernos y de ahí por tanto no saldrá nada bueno.
Lo aburrido del paseo es que para imponer sus tesis primitivas han convertido la política en un infernal campo donde priman los insultos, las coimas, las acusaciones, las bajas pasiones, de ladrones, mentirosos y jaibas surtidas.
EJEMPLO: EL reemplazo del Fiscal Nacional, los encargados de ratificar la elección de la Presidenta es la Cámara Alta. El tema es que de los 37 senadores en cuestión, HAY NUEVE que se encuentran siendo investigados por el Ministerio Público! .Parece cómico que el persecutor sea elegido por los perseguidos.
0