Al final, en esto tiene todo que ver el sabor. Y la adicción al sabor. La adicción a un hábito adquirido.
1 ¿Qué busco con escribir sobre esto? Compartir los fundamentos que guiaron mi determinación a dejar de comer carne y derivados de cualquier tipo de animal y criticar el hábito de comer carne animal (principalmente proveniente de la industria). Un hábito que casi la totalidad de las personas lo ha heredado de su familia y su crianza. Si te hubieran criado sin carne, lo mas probable es que hoy no la necesitarías y no la habrías elegido.
2 Además de los beneficios físicos y espirituales que produce dejar de comer carne animal (de cualquier animal), no comiéndolos, reduces tu huella de carbono (ya que las vacas son una de las principales fuentes de CO2 en la atmósfera), y tampoco te haces cómplice del derroche de agua (se necesitan no sé cuántos mil litros para un kilo de carne. Una inmoralidad).
3 Sí, tengo muchas contradicciones. Muchísimas. A cada rato, En todos los aspectos de mi vida. Por estos días la contradicción que más me atormenta es que alimento a mis gatos con comida que compro en el supermercado. Un alimento para gatos que está hecho en base a los restos de los restos, lo peor de lo peor de la cadena de la cruel carnicería industrial. Es una contradicción, es cierto. Y me pesa. Pero no he encontrado otra opción. Me parece cruel no darles comida y que se les arreglen solos. No sé. Algún día voy a encontrar la forma de resolver eso.
4 El hecho de que me importe el sufrimiento animal, no implica que no me importe el sufrimiento humano. No es excluyente. Pensar que evitar el sufrimiento animal me hace indiferente al sufrimiento de, por ejemplo los niños que trabajan como esclavos o que mueren de Ébola o que sufren de cualquier manera, es de un nivel de simplismo que no resiste análisis.
5 Optar por una dieta vegana es mucho más que simplemente “me gusten las verduras”. Se trata de una opción alimenticia más compleja. Más que un tema medio ambiental o de salud, creo que es incluso un tema político. Respeto a quienes comen carne, pero condeno de manera enérgica la crueldad, la indiferencia, el egoísmo y el dolor de la industria de la carne y la explotación animal.
6 No busco aplausos ni admiración. Tampoco busco enemigos, pero no puedo hacer nada por la gente que me desprecia por mi opción alimenticia. Que es también una posición política y espiritual.
7 Antes, cuando me preguntaban por qué no como carne, intentaba explicarme lo más cuidadosamente posible, ahora, después de la discusión de la que escribí en mi columna anterior, simplemente respondo “es una decisión personal en la que no voy a ahondar”.
8 No juzgo a la gente que come carne. Pero sí me cargan los que se jactan de hacerlo. Los que se ríen de que yo no lo haga. Los que me ridiculizan por mi opción. Esos son los peores ¿Creerán que son más “choros” por esa posición vacía y egoísta? ¿Más machos? ¿Superiores? Jaja. Pobres. Prefiero a la gente que dice “no me resisto al sabor de la carne”. Porque al final, en esto tiene todo que ver el sabor. Y la adicción al sabor. La adicción a un hábito adquirido (una vez que has sido criado en la cultura de la carne, eres carnívoro por herencia, no por opción).
9 No proyecto atributos humanos a los animales. Les atribuyo características reales. Está científicamente comprobado que todos los animales se comunican, tienen conciencia de su entorno, sienten dolor, miedo y algo parecido a la tristeza. Saben perfectamente lo que está pasando en la fila al matadero.
10 Nunca antepondría la vida de un perro callejero a la de un niño, como me acusó un señor por ahí. Siempre la vida de un niño me va a importar más que la de cualquier animal. Ahora, tengo que reconocer que si se tratara de la vida de mis gatos, podría hacer una larga lista de humanos adultos que preferiría que se murieran antes (en vez) de mis gatos maravillosos y perfectos. No cualquier ser humano, por supuesto. Algunos muy específicos. Pero por favor no me hagan dar nombres.
Comentarios
03 de febrero
Como aporte me gustaría dejar aquí los links de un trío de videos de diferente profundidad acerca del tema:
Earthlings (2005, EEUU): Creo que NO es recomendable para nadie verlo por el shock emocional que puede llegar a causar con la crudeza de las imágenes. El mensaje en sencillísimo: demostrar en que consiste el especismo y cómo éste sumado a la falta de consciencia humana genera un verdadero «holocausto» animal. Es claramente de enfoque ANIMALISTA y permite entender la postura de quienes han optado por el camino vegano de no crueldad.
https://www.youtube.com/watch?v=D8mLO9EGCUw
Nuestro pan de cada día (2005, Austria): Recomendable, ya que es objetivo al nivel de carecer de diálogo y música. «El documental muestra el actual proceso de industrialización y mecanización agrícola y ganadera existente en Europa». Si existe «lo objetivo en sí» este documental se acerca totalmente a tal ideal.
Food, inc (2008, EEUU): MUY RECOMENDABLE. Considerando la postura de quienes visitan el Quinto Poder creo que este documental podría llevar a un primer paso de un debate muy productivo sobre la industria alimentaria, la cual aquí es enfocada explícitamente desde el monopolio y deja como un subtexto el abuso hacia animales, el cual puede ser considerado más o menos relevante dependiendo la sensibilidad personal.
http://vimeo.com/40856402
Con respecto a la cuestión de las mascotas considero que la mejor opción es tenerlas si es posible darles un cuidado adecuado y por adecuado estoy pensando en la posibilidad de darles un espacio donde desarrollarse teniendo ellas cierta independencia. Yo tengo cuatro gatos y los alimento de modo de gastar el mínimo de alimento seco industrial, ya que así se mantienen activos – no pierden el instinto cazador – y cazan palomas y ratones (aunque me tienen lleno de plumas el jardín a veces). Si viviese en un depto dudo que hubiese adoptado estos gatos que fueron abandonados.
Y creo que en esto último esta el quid de la tenencia de las mascotas: únicamente son «éticas» aquellas cuyo origen es la adopción y no aquellas que son vendidas y compradas como objetos, ya que al hacerlo se alienta a la industria a criar más y más. Tampoco es ético las mascotas de raza (https://www.youtube.com/watch?v=VR59716JwqQ), luego es un maltrato tácito el mantener la «pureza» de éstas. Tampoco tiene sentido en sí mismo el permitir que se sigan reproduciendo, debido que siguen existiendo animales abandonados esperando en las calles precisamente en tal lugar porque NADIE se hace cargo de la población excedente.
La tenencia de mascotas NO debe darse como una cuestión para suplir carencias emocionales. Es cierto que es beneficioso para los seres humanos solitarios tener un perrito o un gatito, pero tal perrito o gatito no siempre va ligado con una tenencia responsable puesto que o bien no se les esteriliza, o bien viven en condiciones de estrés (grandes perros en deptos por ejemplo) o bien se privilegia la tenencia de mascotas «bonitas» que son de raza antes de otras que desde el punto de vista de la especie son más «aptas» como las mestizas que tienen menos problemas de genes defectuosos.
Una mascota no debe verse como una extensión de uno, sino que como un individuo con su propia clase de derechos.
Saludos cordiales y me disculpo de antemano si he puesto demasiados links.
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11 de febrero
Una decisión más que respetable, pero una columna muy pobre en contenido.
Decir «está científicamente probado» y no dar ni un más mínimo atisbo del estudio que supuestamente lo probó es de una falta de rigurosidad tremenda, que raya en la falacia.
+1
25 de febrero
científicamente probado: http://fcmconference.org/img/CambridgeDeclarationOnConsciousness.pdf