Las elecciones primarias del fin de semana pasado, primarias que impulsó la Nueva Mayoría y que posibilitaron por primera vez en la historia de nuestro país el voto de nuestros compatriotas en el extranjero, dejaron en sus resultados una serie de indicadores que nos obligan necesariamente a un reordenamiento de nuestras fuerzas en torno a la candidatura de Guillier.
«¿Cuantos años esperaron miles de compatriotas la posibilidad de elegir? y hoy que esa participación se materializa nosotros equívocamente preferimos mirar con distancia.»
A la luz de los resultados del domingo pasado, la primera lección es simplemente que nunca más nuestro conglomerado debe restarse de una primaria, para nuestro sector el haber recuperado la democracia no solo debe ser un antecedente más en el discurso, sino que necesariamente debe ser un compromiso con la posibilidad de elegir y participar.
Una segunda lección es entender que los procesos, sobre todo los democráticos, jamás deben mirarse con distancia, si bien es cierto en la papeleta de fin de semana no habían candidatos de nuestro sector, nuestra miopía no nos permitió dar el realce a un logro que fue perseguido y defendido por la Nueva Mayoría ¿Cuantos años esperaron miles de compatriotas la posibilidad de elegir? y hoy que esa participación se materializa nosotros equívocamente preferimos mirar con distancia.
Terminó el proceso de primarias, se definió el nombre que representara a la derecha en las próximas elecciones, seguir en la interpretación de los números y las encuestas es simplemente una pérdida de tiempo cuando la propia realidad nos demuestra que no existe relación entre la realidad que pretenden mostrarnos y la que la ciudadanía es capaz de reflejar. Si la CADEM tuviera algo de razón, los resultados de la primaria serían otros.
Hoy comienza la carrera real, esa que nos pone en franca dirección a La Moneda, es ahora cuando los partidos políticos deben comenzar a hacer la pega electoral, es ahora cuando se debe comenzar a defender en terreno nuestro compromiso con Chile y sus reformas, es ahora cuando debemos decir con fuerza que estos cuatro años han transitado hacia un chile más justo, es ahora donde debemos comenzar a decir gracias Presidenta y renovar nuestro compromiso con el Chile que hace años comprometimos. Este domingo ya fue el tiempo de ChileVamos ahora es el tiempo del Vamos Chile, vamos a construir una patria justa, donde educación, salud, pensiones dignas, sean un compromiso con la realidad y lo vamos a construir nosotros, la Nueva Mayoría, porque somos nosotros los que no tenemos ataduras, somos nosotros los que no disfrazamos dictaduras con gobiernos autoritarios, porque somos nosotros los que podemos mirar a un pueblo y decir perdón cuando nos hemos equivocado y enmendar el rumbo. Es ahora cuando debemos sumar mayores compromisos para sumar uno más uno para terminar de construir esa patria justa que tanto hemos pregonado.
Terminaron las primarias y qué más da, siempre supimos quién sería el candidato, es hora de dejar de ser comentarista para transformarnos en quienes con fuerza dirán Gracias Presidenta con Guillier sigue su tarea y nuestro compromiso.
Comentarios
07 de julio
Me parece que esta visión continuista del actual gobierno no es la tendencia, no tiene destino. Este discurso mas nostálgico que programático para algo justo ya no se compra tan facil después del resultado de tener un gobierno con un apoyo tan mayoritario, sin contrapesos en el parlamento, hasta casi parecían haber realmente logrado juntar a la DC con el PC. O sea tenían todas las velas desplegadas y todo el viento a favor para terminar en algo mas parecido a un naufragio que al prometido puerto de “lo justo”. Todo indica que la gente no quiere seguir en esta travesía que no logra un Chile mas justo sino mas inestable.
Puede ser un emotivo discurso de un alcalde hacia sus amigos en el municipio, pero esta claro que afuera ya nadie lo compra.
Saludos
0